Después de cerrar la temporada con el Barça con el acto de despedida que organizó Ronald Koeman el pasado domingo, y tras haber descansado durante toda la semana pasada, Lionel Messi emprendió viaje este martes hacia la Argentina para sumarse a la concentración de la selección nacional en el predio de Ezeiza. El crack rosarino viajó con su familia y cambió el chip azulgrana por el albiceleste.
Messi, con el aval del Barcelona, ya se había ausentado el viernes pasado a la última práctica previa al partido frente al Eibar, con el que el equipo culé cerró su participación en La Liga de España, donde llegó sin chances matemáticas de quedarse con el título. Por ello aprovechó para adelantar sus vacaciones, tomarse un merecido descanso con los suyos y prepararse para lo que viene con la Selección.
Leo llegó al aeropuerto junto con su esposa, Antonela Roccuzzo, y sus tres hijos, Thiago, Mateo y Ciro. Luego se subieron a su avión privado, y están viajando rumbo a la Argentina, adonde llegarán el miércoles. El capitán del seleccionado es esperado por el entrenador Lionel Scaloni y algunos de sus compañeros, que ya están en las instalaciones del complejo que lleva el nombre de Julio Humberto Grondona.
En el marco de la pandemia de COVID-19, la AFA armó una burbuja que nucleará a casi 100 personas. Para ello hay 17 motorhomes, habitaciones en cubos y carpas. El objetivo es tomar todos los recaudos para evitar algún contagio.
Los próximos compromisos de la Selección son los dos partidos clasificatorios para el Mundial de Qatar 2022 aplazados del mes de marzo. El día 3 de junio se medirá a Chile y el 8 a Colombia. Luego se vendrá la Copa América.

Messi voló a Buenos Aires sin haber firmado el contrato de su renovación con el Barcelona, pese a que Pep Guardiola dio por hecha la continuidad de Leo al revelar que Sergio Agüero jugará en el Barça: “Va a jugar junto al mejor jugador de todos los tiempos, Lionel Messi, y estoy seguro de que lo va a disfrutar. Va a hacer a mi club, Barcelona, cada vez más fuerte con él en la cancha”.
En la finalizada temporada Leo no pudo obtener la Champions League ni La liga de España, donde terminó arriba en la tabla de goleadores con treinta tantos. El aliciente fue el título logrado con la Copa del Rey.
Desde el entorno del capitán azulgrana explicaron que “no hay novedades”. Las conversaciones para su continuidad van por el buen camino, pero todavía no hay ningún acuerdo cerrado, según indica el medio catalán Mundo Deportivo.
Sin embargo, la confirmación de la continuidad en el club con el que siempre jugó Messi deberá esperar. Por ahora Leo está con la mira puesta en la selección argentina y en lo que viene. Se trata nada menos de la clasificación para jugar -tal vez- su último Mundial. Además, poder ganar su primer título en mayores con la Albiceleste en el certamen sudamericano.
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