Alberto Prieto Valencia y las rifas colombianas: la práctica ilegal bajo la lupa tras su asesinato en Zapopan

Tras la balacera en Zapopan donde murieron “El Prieto”, su hija y un escolta, autoridades analizan diversas líneas de investigación, entre ellas la posible relación con las rifas colombianas ilegales detectadas en el Mercado de Abastos

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El asesinato de Alberto Prieto
El asesinato de Alberto Prieto Valencia trajo de nuevo a la mesa las rifas colombianas en el Mercado de Abastos. (X: @FreightlinerMex/CUARTOSCURO)

La mañana del 29 de diciembre de 2025, un ataque armado en los límites de Guadalajara y Zapopan dejó sin vida al empresario Alberto Prieto Valencia, conocido también como “El Prieto”, a su hija de 16 años y a uno de sus escoltas.

Alberto Prieto Valencia, de 57 años y originario de Veracruz, había construido una carrera como comerciante mayorista y fundador de Transportes Odal, empresa certificada bajo el estándar internacional C-TPAT impulsado por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos. Su influencia en la distribución de granos y cereales lo posicionó como figura central en el Mercado de Abastos.

Esa mañana, Prieto Valencia viajaba a bordo de un vehículo Lamborghini Urus, custodiado por un equipo de escoltas privados, varios de ellos exmilitares.

Imagénes del momento de la balacera en redes sociales Crédito Redes sociales

La agresión ocurrió alrededor de las 10:20 horas, cuando al menos 30 personas armadas interceptaron el convoy de Alberto Prieto Valencia utilizando varios vehículos de gran tamaño, entre ellos una camioneta GMC Yukon que fue abandonada en el lugar. Los atacantes emplearon una táctica de bloqueo para cerrar el paso y atacar de manera directa al empresario y su escolta.

Los escoltas respondieron, originando un enfrentamiento que abarcó al menos cuatro puntos distintos y que terminó con más de 200 casquillos percutidos. Los videos captados por vecinos y automovilistas mostraron las ráfagas continuas y el resguardo de comerciantes y habitantes, quienes estaban en pánico ante la escena.

En el lugar murieron Prieto Valencia, su hija Sara y uno de sus escoltas; otros cuatro elementos de seguridad resultaron heridos.

ZAPOPAN, JALISCO. 29DICIEMBRE2025.- Esta mañana
ZAPOPAN, JALISCO. 29DICIEMBRE2025.- Esta mañana en la avenida Topacio en el Fraccionamiento Residencial Victoria en los limites entre Zapopan y Guadalajara, se registro un ataque armado, que dejo como saldo de 3 personas fallecidas y cuatro escoltas lesionados por arma de fuego. FOTO : FERNANDO CARRANZA GARCIA / CUARTOSCURO.COM

La reacción involucró a la Policía de Guadalajara, Policía de Zapopan, Policía Estatal, Guardia Nacional y Ejército Mexicano, que desplegaron patrullaje aéreo y unidades artilladas.

Aseguran vehículos y definen posible móvil del crimen

Salvador Zamora, secretario general de Gobierno de Jalisco, informó que tras el ataque ya se han identificado algunos de los vehículos utilizados por los agresores y que dos de ellos fueron asegurados como parte de las investigaciones en curso.

El funcionario señaló que la indagatoria avanza y que el gobierno estatal mantiene la revisión de todas las evidencias recabadas en la escena, así como el análisis de los vehículos involucrados. Hasta el momento no se han reportado detenciones.

El Lamborgini Urus fue rafagueado
El Lamborgini Urus fue rafagueado durante alrededor de 10 minutos. (X)

El secretario afirmó que la Fiscalía estatal ya indaga el móvil del crimen e indicó que entre las hipótesis se incluirá la posible relación de Prieto Valencia con las llamadas rifas colombianas ilegales.

“Grupo Reforma, en algún momento, señaló algún vínculo de esta persona con aquellas rifas colombianas ilegales que aparecieron en el mercado de Abastos. Son notas periodísticas que existen y que, pues habrá que tomarlas en cuenta en la investigación”, sostuvo Zamora en declaraciones realizadas a los medios de comunicación.

La lupa sobre las rifas colombianas, ¿qué son?

Las rifas colombianas funcionan como sorteos ilegales organizados por redes integradas principalmente por personas de origen colombiano, que operan en alianza con actores locales en el Mercado de Abastos. Estas redes han sido señaladas por cometer fraudes y extorsiones contra comerciantes, bajo esquemas que combinan la venta obligatoria de boletos y la amenaza de represalias para quienes se niegan a participar.

entral de Abastos, foto ilustrativa.
entral de Abastos, foto ilustrativa. Foto: Cuartoscuro

El boleto, que suele costar hasta 20 pesos, se ofrece de manera obligatoria a los comerciantes y locatarios, y en la práctica funciona como un recibo de pago de extorsión o derecho de piso.

De acuerdo con Mural, la venta de boletos está documentada al menos desde 2021, aunque hay notas periodísticas que hablan de este tema desde el 2019.

Los premios, que van desde efectivo hasta autos y electrodomésticos, rara vez se entregan. Los organizadores, protegidos por el crimen organizado, acumulan grandes sumas y ocasionalmente otorgan premios menores para mantener el interés.

El sistema está directamente relacionado con los préstamos “gota a gota”, una modalidad de usura en la que, además de pagar altos intereses diarios, los comerciantes endeudados son obligados a comprar dichos boletos.

En junio de 2024, la detención de Camilo Andrés, colombiano acusado de trata de personas y explotación laboral, reveló la estructura detrás de las rifas. Grupo Reforma detalló que Andrés lideraba la operación en el mercado y fue vinculado a proceso tras comprobarse que tenía a 18 personas sometidas a vender boletos bajo coacción.

Comerciantes viven extorsiones. (Imagen Ilustrativa
Comerciantes viven extorsiones. (Imagen Ilustrativa Infobae)

En 2019, el vocero de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, Ulises Lara, informó que la dependencia investigaba rifas organizadas por personas extranjeras en la Central de Abasto, que fueron intervenidas por el Instituto Nacional de Migración (INM).

El Mercado de Abastos de Guadalajara cuenta con más de 20,000 trabajadores y una afluencia diaria de entre 60,000 y 70,000 clientes, según estimaciones. La magnitud de la plaza la convierte en un objetivo estratégico para extorsión y control territorial, históricamente bajo la influencia de cárteles locales como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

De acuerdo con una nota de Reforma publicada el pasado mes de septiembre, la Fiscalía de Jalisco reportó 18 denuncias por usura desde 2020, tres de ellas en 2025, y la apertura de dos carpetas de investigación por extorsión este año, con seis detenidos, cinco de nacionalidad colombiana.

Testimonios anónimos de comerciantes y trabajadores, retomados por el medio antes citado, señalan que algunas de las personas encargadas de vender los boletos eran mujeres que vestían de manera llamativa para captar la atención en los pasillos del mercado, mientras se ejercía presión para que los comerciantes adquirieran los boletos bajo amenaza.

“Fue poquito después de la pandemia. Los colombianos empezaron con las rifas, los miembros del crimen organizado los protegían y los dejaban trabajar en el lugar a cambio de una parte de la ganancia de las rifas... Estaban trabajando con ‘la plaza’ y al que no pagaba se lo llevaban y lo tableaban”, dijo.

Hasta el momento, las autoridades no han confirmado si “El Prieto” estaba involucrado en la operación de estas rifas o si, por el contrario, era uno de los comerciantes afectados por ellas.