
Isabel Pérez Arrastia, más conocida como Isabel Preysler, llegó a España de una acomodada familia de Filipinas. Fue enviada a Madrid por sus padres para estudiar Secretariado Internacional. Pronto comenzaría a codearse con la alta sociedad debido a su gran elegancia y sofisticación. A día de hoy, su familia es una de las que más a dado que hablar en España desde el siglo pasado. Sin embargo, a pesar de haber llevado una vida rica en amor y lujos, hay sombras que la han marcado para siempre, desde la muerte de sus tres hermanos hasta la de su gran amor, Miguel Boyer.
Historias de amor
Los padres de Isabel Preysler son Carlos Preysler, delegado del Banco Español de Crédito en Manila, y Beatriz Arrastia, agente inmobiliaria. Estos fueron los que tomaron la decisión de mandar a su hija a España para vivir en la casa de Madrid de sus tíos Tessi y Miguel Pérez Rubio. Esto tuvo lugar en el año 1969, cuando Isabel tan solo tenía 19 años.

Al cabo de un tiempo en la capital española, Isabel empezó a asistir a eventos que la dieron a conocer dentro de las grandes esferas. Destacaba por su belleza y elegancia y no tardó mucho en conquistar la vista de un joven muy conocido en nuestro país. Se trata de Julio Iglesias, al cual conoció en una de las fiestas organizadas por Tomas Terry. Cuando ella tenía 20 años y el cantante 28 tuvo lugar su boda, en 1971, poco tiempo después de conocerse en lo que parece que fue un flechazo.
De este matrimonio nacieron tres hijos: Chábeli Iglesias, Julio José Iglesias y Enrique Iglesias. Sin embargo, a pesar de parecer una historia de amor idílica, el matrimonio se rompió en 1978 tras los constantes rumores de infidelidad por parte del cantante.

Más adelante, Isabel conoce a Carlos Falcó, Marqués de Griñón. A este le conoce en una sesión privada de la película Fiebre del Sábado Noche. Unos años más tarde contrajeron matrimonio en la finca ‘Casa de Vacas’, lo que hizo que Isabel diera el salto hacia la aristocracia. De este matrimonio nació Tamara Falcó, una de las hijas más conocidas de Preysler y que ha participado en algunos programas de televisión. Una vez más, el amor no lo pudo todo y la pareja transmitía el comunicado de su separación en 1985.

Entre sus amores también tenemos a Miguel Boyer. Este es conocido como “el gran amor de Isabel Preysler”. Isabel conoció a Miguel, ministro socialista, en las reuniones de “las lentejas de Mona Jiménez”, periodista peruana que solía hacer este tipo de quedadas con otros periodistas. Sin embargo, en aquellos momentos, año 1982, Isabel todavía continuaba con Carlos Falcó, con el que acudió al evento. A pesar de que ambas parejas mantuvieron una relación de amistad, Isabel y Miguel tuvieron un flechazo y comenzaron a salir en 1986, al año de la separación con Carlos. Con Miguel, Isabel tuvo a Ana Boyer.
Este fue el matrimonio más extenso de la que fue Marquesa de Griñón; llegó a durar 26 años. En esta historia de amor no hubo problemas de infidelidades ni quebraderos de cabeza para Isabel, convirtiéndola en la más estable que había tenido hasta el momento. Sin embargo, tras un derrame cerebral sufrido por Miguel en 2012, este acabaría falleciendo el 29 de septiembre de 2015 a causa de una embolia pulmonar.

Un año tras la muerte de Miguel Boyer, parece que el destino tenía preparada otra historia de amor para Isabel: el escritor Mario Vargas Llosa, recientemente fallecido. Estos se conocieron en 1986 por una entrevista que el escritor le realizó a Isabel y años más tarde, se reencontrarían en Londres, concretamente en 2015, tras la fiesta que organizó el príncipe Carlos de Inglaterra en el Palacio de Buckingham. Al cabo del tiempo, a pesar de que el escritor tuviera pareja, terminaron juntos y su relación duró 8 años. Nunca llegaron a casarse y terminaron su relación de mutuo acuerdo en 2022.

El destino de los hermanos de Isabel
Beatriz Arrastia, más conocida como Betty o Beba, fue la madre de Isabel Preysler. La agente inmobiliaria se casó con Carlos Preysler y pronto conformaron una de las parejas más elegantes de la sociedad filipina. Del matrimonio surgieron seis hijos (Isabel, Victoria, Enrique, Carlos y los mellizos Joaquín y Beatriz), de los cuales, tres se fueron demasiado pronto.
La primera pérdida de la familia Preysler llegó con Enrique, que murió en un hotel a sus 25 años en dudosas circunstancias. La prensa del momento contó que se habían encontrado restos de heroína en la habitación del hotel en el que el hijo de Betty había pasado la noche con una mujer de la alta sociedad. Isabel siempre ha negado este hecho sobre su hermano.
Otro de los hermanos de Isabel que se fueron a una edad temprana fue Carlos. Este comenzó a tomar drogas a sus 16 años, siendo acusado de otros delitos como atraco a mano armada. Es por este último por lo que permaneció en la cárcel durante cinco años. Finalmente, murió a causa de un cáncer.
De los mellizos Joaquín y Beatriz también datan trágicos sucesos. A pesar de que se rumoreaba que Joaquín también coqueteaba con drogas, finalmente, fue Beatriz la que terminó falleciendo por un cáncer.
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