
Esquerra Republicana no solo ha perdido 178.000 votos y 13 diputados en las elecciones autonómicas del pasado domingo. Ha perdido el Govern y la hegemonía independentista, aunque sigue teniendo la llave para que Cataluña tenga un Ejecutivo. Los socialistas de Salvador Illa los necesitan para formar un tripartito, o al menos para que les den su apoyo en la investidura, y Junts de Carles Puigdemont reclama a los republicanos para intentar formar una nueva alianza que lleve al secesionismo al Palau de Barcelona.
Pero, vistas las declaraciones de los líderes de Esquerra, su nuevo destino les lleva a la oposición. Por eso, la otra gran derrota de los de Pere Aragonès (que la ha costado el puesto) y de Oriol Junqueras, que quiere seguir pilotando el barco, tiene un número: 369. Son los altos cargos que actualmente tiene el Ejecutivo catalán en funciones. Su sueldo medio, según el portal de transparencia, es de 80.648 euros. El presidente Pedro Sánchez tiene asignado un sueldo de 90.010,20 euros brutos al año.
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Junqueras refrendó este martes, en una carta abierta a la ciudadanía, la idea de pasar a la oposición: “No queremos cortinas de humo que nos paralicen y generen más desgaste y frustración”, señaló el presidente de Esquerra, señalando a Puigdemont y su partido, Junts. “No pasaremos -agregó- por los que piensan que Cataluña puede ser gobernada desde Madrid”, en un mensaje claro al PSC. Junqueras lanzó también un guiño a los votantes perdidos el domingo y se ha abierto a un debate interno sobre el futuro de la formación. “Entendemos y encaramos la reflexión que exige el aviso que nos ha hecho la ciudadanía. Pondremos sus votos de forma constructiva al servicio del país”.
Pero cuando hay cambio de Gobierno, hay damnificados. Y los primeros son los altos cargos que conforman ese Ejecutivo: consejeros, directores y secretarios generales y otros puestos de carácter eventual, como asesores o jefes de prensa, por ejemplo. Formar parte de un tripartito supondría para Esquerra mantener poder en la futura estructura del Govern y conservar algunos de estos cargos. También en el improbable caso de conseguir formar un Ejecutivo totalmente de corte secesionista con Junts. Pasar a la oposición conlleva directamente el ‘entierro’ político de todo ellos. Como hemos dicho, el actual Govern en funciones desde el domingo cuenta con 369 que suman 23 millones de euros en salarios. A esta cifra, además, habría que sumarle el de los titulares de las empresas del sector público de la Generalitat.
Si Esquerra se queda fuera, es complicado que sus altos cargos continúen. Ya hay precedentes. El divorcio entre Esquerra Republicana y Junts per Catalunya en octubre de 2022, cuando ambos gobernaban en coalición, implicó que 114 altos cargos designados por esta segunda formación salieran entonces del Ejecutivo catalán. Solo 22 nombramientos hechos por Junts, que tenían un perfil mucho más técnico, se mantuvieron en el Gobierno monocolor de Pere Aragonès. Los 114 altos cargos que salieron trabajaban en las siete consejerías que ostentaba Junts (Vicepresidencia, Acción Exterior, Salud, Economía, Derechos Sociales, Justicia y Universidades).
El listado que se puede consultar en Transparencia también permite conocer la antigüedad de muchos de los altos cargos de la Generalitat. Un total de 35 iniciaron su etapa en lo público antes de que comenzara el anterior mandato resultante de las elecciones del 14 de febrero de 2021. El más veterano actualmente es José Luis García Ramírez, asesor jurídico del Departamento de Economía y Hacienda. Allí llegó en julios de 2004, con el tripartito PSC-ERC-Iniciativa. Desde entonces, cinco consejeros le han ratificado.
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