
El príncipe Harry y su esposa Meghan Markle crearon una red de once empresas en el estado de Delaware, un paraíso fiscal, con el fin de ampliar sus lucrativos intereses comerciales en Estados Unidos.
Las empresas han sido constituidas por el abogado de la duquesa, Richard Genow, y su director comercial, Andrew Meyer, y parecen tener nombres con valor sentimental para la pareja que actualmente vive en California, según información de The Telegraph.
Entre las empresas se encuentran dos editoriales: Peca Publishing LLC y Orinoco Publishing LLC.
Peca, que se utilizó para tener los derechos del libro infantil escrito por la duquesa, “The Bench”, podría aludir al primer libro que escribió cuando era niña, titulado “A Face Without Freckles... Is a Night Without Stars” (“Una cara sin pecas es una noche sin estrellas”).
Se espera que Orinoco Publishing LLC tenga los derechos de las esperadas memorias del Duque, que se publicarán a finales de este año. Para The Telegraph el nombre hace referencia a una de las canciones favoritas de la princesa Diana: Orinoco Flow, de la cantante irlandesa Enya.

Hampshire LLC podría aludir al lugar en el Reino Unido donde tuvieron una estancia de tres noches en las últimas semanas del primer embarazo de la duquesa en la primavera boreal de 2019 y Baobab Holdings LLC podría llevar el nombre del árbol Baobab, que es originario de África y Australia, lugares en los que el duque disfrutaba pasando tiempo en su año sabático y en su vida posterior.
Los expertos afirman que constituir una empresa en Delaware tiene varias ventajas, como la flexibilidad de las leyes empresariales del estado y los bajos tipos del impuesto sobre la renta de las personas físicas.
Este estado, situado en el noreste de Estados Unidos, es conocido por albergar más empresas que personas, ya que casi el 65% de las compañías de la lista Fortune 500 están constituidas allí.

Si bien los directivos y administradores de una empresa deben ser declarados, el propietario real no está obligado a identificarse.
Delaware no impone el impuesto sobre la renta a las sociedades registradas en el estado que no hacen negocios en él. Asimismo, los accionistas que no residen en Delaware no tienen que pagar el impuesto sobre las acciones en el estado. Por eso se lo conoce como un paraíso fiscal nacional.
De acuerdo a The Telegraph, se cree que el Duque o la Duquesa nunca visitaron Delaware. Sus principales negocios se llevan a cabo bajo el paraguas de su organización benéfica, Archewell, que tiene su sede en Beverly Hills.
La fundación Archewell recaudó menos de 50.000 dólares en 2020, según revelan las declaraciones de impuestos.
SEGUIR LEYENDO:
Últimas Noticias
El padre de Meghan Markle sufrió la amputación de pierna tras una grave complicación arterial
Thomas Markle, de 81 años, permanece bajo vigilancia constante mientras los especialistas analizan posibles riesgos de infección y nuevas intervenciones

Historia, lujo y drama: el Dom Pérignon de la boda real entre Carlos III y Lady Di será subastado
La pieza, creada en exclusiva para la “boda del siglo” y reservada para un selecto grupo en 1981, atrae la atención de coleccionistas y amantes de la realeza que buscan poseer un testimonio tangible del glamour y su desenlace inesperado

Meghan Markle reflexionó sobre cómo es su relación con la vida pública: “Pierdes tu autenticidad”
La duquesa de Sussex, exactriz y activista estadounidense, compartió su visión sobre la presión mediática y la importancia de mantener la esencia propia, durante una entrevista exclusiva con Harper’s Bazaar

El príncipe George cautivó con su pasión por la historia aeronáutica británica en el Festival del Recuerdo
Acompañado por Kate Middleton durante el homenaje, el joven heredero sorprendió al público y a los veteranos por sus conocimientos en modelos de aviación, una afición alentada por la princesa de Gales y celebrada como parte del legado familiar, según Vanity Fair
La actriz Sophie Winkleman se mostró muy dura con la realeza británica: “Sus vidas son un infierno y la fama es una tortura”
En diálogo con The Times, la esposa de Lord Frederick Windsor compartió una mirada íntima sobre las presiones, la falta de privacidad y los sacrificios que acompañan a la monarquía, además de su preocupación por el impacto de la tecnología en la infancia y la educación


