Varios aviones de combate F-16 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos fueron enviados a Medio Oriente desde Alemania, según informó el Mando Central estadounidense (CENTCOM).
El Pentágono informó a inicios de octubre que Estados Unidos decidió aumentar su fuerza militar en Medio Oriente mediante la incorporación de nuevas unidades y la ampliación de otras que ya están allí.
Este aumento de la presencia militar de Washington en Medio Oriente también se produce en medio del creciente conflicto entre Israel y el grupo terrorista libanés Hezbollah. “Un cierto número de unidades ya desplegadas en la región de Medio Oriente... se ampliarán y las fuerzas que rotarán hacia el frente de operaciones para reemplazarlas ahora aumentarán” las que ya están allí, dijo a los periodistas la subsecretaria de prensa del Pentágono, Sabrina Singh, el lunes.
“Estas fuerzas aumentadas incluyen aviones de combate F-16, F-15E, A-10, F-22 y personal asociado”, dijo Singh, y luego agregó que, como resultado, habrá “unos miles” de efectivos adicionales en la región.
Además, el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, ofreció apoyo a su homólogo israelí, Yoav Gallant, para “desmantelar la infraestructura de ataque” perteneciente a Hezbollah a lo largo de la frontera con el Líbano.
Austin también advirtió a Irán de “graves consecuencias” si ataca directamente a Israel en respuesta a sus operaciones contra Hezbollah y el grupo terrorista palestino Hamas.
“El mayor escudo”
Por otra parte, el líder supremo iraní, el ayatollah Ali Khamenei, afirmó el jueves que Hezbollah, apoyado militar y financieramente por Irán, es “el más grande defensor del Líbano” frente a Israel, que bombardea objetivos en ese país para neutralizar a los terroristas.
El ejército israelí lanzó el 23 de septiembre una campaña de bombardeos aéreos intensos contra bastiones de Hezbollah en el Líbano y realiza desde el 30 de septiembre operaciones terrestres en el sur.
“Hezbollah es el más grande defensor del Líbano y el mayor escudo contra la avidez del régimen sionista, que busca desde hace tiempo desintegrar el Líbano”, dijo el ayatollah.
Desde la instauración de la República Islámica en 1979, Irán apoya la causa palestina contra Israel. Sus dirigentes no reconocen el Estado israelí y lo califican como “entidad sionista”.
El ayatollah Ali Khamenei reaccionó así en un comunicado a la confirmación el miércoles por Hezbollah de la muerte de Hashem Safieddine, mencionado como posible sucesor para dirigir el movimiento después del asesinato de Hassan Nasrallah en un bombardeo israelí a fines de septiembre. “Hezbollah, gracias al tacto y a la valentía de dirigentes como él, pudo proteger al Líbano del peligro de la desintegración”, agregó el guía supremo iraní.
(Con información de AFP y EFE)
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