EEUU sancionó al sector ruso de servicios financieros y al oligarca cercano al Kremlin Vladimir Potanin

Estados Unidos sancionó este jueves al sector de servicios financieros de Rusia y al empresario ruso Vladimir Potanin, aumentando la presión sobre Moscú por su invasión a Ucrania. Se trata del enésimo paquete de sanciones de EEUU contra personalidades y empresas cercanas al Kremlin.

Washington impuso sanciones a Potanin, uno de los hombres más ricos de Rusia, a su esposa, sus hijos adultos, su yate e Interros, un holding de inversiones que controla Potanin, informó el Departamento de Estado en un comunicado.

Potanin, de 61 años, es el mayor accionista de Nornickel, que no recibió sanción el jueves. Interros posee el 36% de Nornickel, el mayor productor mundial de paladio y níquel refinado.

El Departamento del Tesoro de Estados Unidos dijo que Washington también impuso sanciones a Rosbank, un banco comercial que Potanin adquirió este año, junto con 17 filiales del banco ruso VTB, al que Washington había apuntado previamente.

“Al sancionar a otros importantes bancos rusos, seguimos profundizando el aislamiento de Rusia de los mercados mundiales”, dijo en el comunicado el subsecretario del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera, Brian Nelson. “Las designaciones de hoy por parte de Estados Unidos, junto con las acciones tomadas por nuestros socios internacionales, inhibirán aún más la capacidad del régimen de Putin para financiar su horrible guerra contra Ucrania”, subrayó.

La medida congela cualquier activo estadounidense de los sancionados y, en general, prohíbe a los estadounidenses realizar transacciones financieras con ellos.

Rosbank dijo que las sanciones de Estados Unidos “no tendrán un impacto material” en sus operaciones. “Mantenemos todas las mejores prácticas y normas en beneficio de nuestros clientes”.

Por otra parte, además de Potanin, el Tesoro de EEUU sancionó a otras cuarenta personas, entre ellas funcionarios del Kremlin, como el primer viceprimer ministro, Andrei Belousov, y los viceprimer ministros Dimitro Chernishenko, Sergei Franko, Oleg Belozherov y Oleksi Sazanov.

Washington confía en que estas nuevas restricciones golpeen la economía rusa lo que resta de año y la contraiga aún más en 2023. “Más allá de eso, la pérdida de inversión, los controles a las exportaciones y las limitaciones en su economía inhibirán sus perspectivas de crecimiento los próximos años”, explicó el Departamento del Tesoro en un comunicado.

(Con información de EuropaPress y Reuters)

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