El deporte es una de las áreas de la vida humana en donde encomendarse a una fuerza superior parece dar mayor fuerza ante las adversidades que pone el rival enfrente. En México, una de las figuras a la que los atletas rinden homenaje en sus competencias es la Virgen de Guadalupe, a la cual incluso le han hecho importantes regalos en su honor.
Hace un par de años, en el museo de la Basílica de Guadalupe, al interior de la Plaza Mariana, se abrió una exposición llamada Regalos para la Reina, testimonios de amor y Fe, en donde grandes exponentes del deporte nacional y otras personalidades entregaron obsequios de suma importancia a la Virgen.
Uno de los artículos más importantes que se expuso en este lugar fue una réplica de la bota de oro que el futbolista Hugo Sánchez le dio a la Morenita del Tepeyac. Ese trofeo lo ganó el canterano de Pumas UNAM, debido a que fue el delantero más goleador de la temporada 1989-1990, en la cual hizo 38 anotaciones en el fútbol europeo.
Cabe mencionar que Sánchez es el único futbolista mexicano que ha sido acreedor a un trofeo individual de tal magnitud, además de que durante su estancia con el Real Madrid, obtuvo cinco pichichis, premio otorgado al mejor goleador de la temporada del balompié español. Otras leyendas del deporte europeo que han ganado la bota de oro son Alfredo Di Stefano y Lionel Messi.
Durante esa exposición también se mostró una réplica de la Copa FIFA que la selección italiana ganó en el Mundial de España 1982. Este campeonato fue un regalo que los italianos entregaron a la Virgen de Guadalupe durante su estancia en el país para el Mundial de México 86.
Cabe mencionar que durante la visita de la selección española a México en 2010, después de haber ganado el campeonato mundial en Sudáfrica, los directivos llevaron el trofeo a la Basílica de Guadalupe con el objetivo de que fuera bendecido por la Virgen, quien en palabras del entonces presidente de la federación española de fútbol, Ángel María Villar, los ayudó a salir victoriosos.
“Cuando vine a firmar el convenio (para disputar el partido amistoso contra México) escuché misa en la Basílica y pedí ser campeón del mundo. La Madre de Dios me lo ha concedido y al venir a jugar planteé la posibilidad de presentar ante su imagen la copa ganada en Sudáfrica”, comentó a los medios en agosto de 2010.
Otros artículos relacionados con el fútbol que deportistas le han entregado a la Virgen María son tres playeras de la Selección Mexicana, las cuales tienen los nombres de jugadores emblemáticos para el Tri: Rafael Márquez, Andrés Guardado y Guillermo Ochoa.
Sin embargo, el fútbol no es el único deporte en donde la Virgen ha apoyado a los atletas y muestra de ello es que entre los tesoros guadalupanos figura una medalla que entregó la taekwondoín, Iridia Salazar, quien obtuvo el bronce en los Juegos Olímpicos de Grecia 2004. Asimismo, otro de los obsequios es una medalla del boxeador Kid Azteca.
En el mundo de los puños, un exponente que mostraba su cariño y devoción a la Morenita del Tepeyac era el campeón Raúl “Ratón” Macías, cuyo lema versaba: “Todo se lo debo a mi mánager y a la Virgencita de Guadalupe”. Además, tras su muerte en 2009, el Ratón tuvo una emotiva misa de despedida en la Basílica.
Es un hecho que el deseo de los deportistas por querer destacar y ser mejor en el campo de juego siempre estará presente y en algunos casos, pedirán ayuda a entidades dividas y en México, la figura que siempre ha sido generosa con todos ellos, es la de la Virgen de Guadalupe.
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