
La pandemia de coronavirus ha obligado a repensar los espectáculos deportivos. En muchos casos se ha optado por organizar los eventos a puertas cerradas, mientras que en otros se ha limitado el ingreso del público. Para el regreso estelar de Sergio Maravilla Martínez al boxeo se optó por esta segunda opción, dándole la posibilidad a un grupo reducido de fanáticos de ver nuevamente en acción al oriundo de Quilmes. Y los privilegiados en conseguir un ticket se llevaron como premio, además, el triunfo del gran protagonista de la velada.
El boxeador argentino se encontró con un entorno diferente al subir al ring en el Malecón de Torrelavega, un reducto ubicado en la comunidad autónoma española de Cantabria. Acostumbrado a los estadio llenos y a las masivas concentraciones en escenarios como Las Vegas, el Madison Square Garden o la propia cancha de Vélez Sarsfield en Liniers, esta vez Maravilla se presentó ante un grupo de mil espectadores y bajo un estricto protocolo sanitario.

El estadio de fútbol que ofició de escenario para la velada tiene una capacidad para ocho mil espectadores. A pesar de que la idea inicial de la organización, atenta a las restricciones en el marco de la pandemia de Covid, era permitir el ingreso de dos mil asistentes, el Gobierno de Cantabria solo autorizó la presencia de mil personas con el objetivo primordial de garantizar el distanciamiento social.
Entonces, de acuerdo a lo estipulado, 600 espectadores se ubicaron en las gradas del estadio, mientras que otras 400 se repartieron entre las sillas de plástico que fueron ubicadas sobre el césped del campo de juego, a los cuatro costados del ring. Todos los integrantes del público, sumados a los auxiliares de los boxeadores y los árbitros de los combates, usaron las mascarillas recomendadas para evitar la propagación del virus.

El excampeón del mundo Sergio Maravilla Martínez volvió a subir a un ring esta tarde con 45 años y tras seis de inactividad. El argentino derrotó por nocaut en el séptimo round al español José Miguel Fandiño.
La última pelea oficial del excampeón mundial superwelter y mediano había sido el 6 de junio de 2014 con una dura derrota ante el puertorriqueño Miguel Ángel Cotto, quien lo venció por nocaut técnico en 10 rounds en el célebre Madison Square Garden de Nueva York.
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