Un estudio sobre el sistema visual reveló que el cerebro aprende a ignorar distracciones con exposición repetida

Investigadores detectaron cambios significativos en la capacidad de atención tras exponer a los participantes a estímulos visuales disruptivos

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Experimentos de EEG muestran adaptación
Experimentos de EEG muestran adaptación cerebral a estímulos repetitivos (Créditos: Peter Valckx, Vrije Universiteit Amsterdam)

En un mundo donde las distracciones visuales son constantes, desde anuncios publicitarios hasta notificaciones digitales, el cerebro humano ha demostrado una notable capacidad para adaptarse y filtrar estos estímulos perturbadores. Según informó Medical Xpress, un estudio reciente realizado por científicos de la Universidad de Leipzig y la Vrije Universiteit Amsterdam reveló que el sistema visual del cerebro puede aprender a suprimir distracciones frecuentes a través de la experiencia.

Este hallazgo, publicado en The Journal of Neuroscience, se basa en experimentos que utilizaron electroencefalografía (EEG) para observar cómo el procesamiento visual temprano cambia con la exposición repetida a estímulos distractores.

Adaptación del cerebro a estímulos repetitivos

El estudio involucró a 24 participantes, tanto hombres como mujeres, quienes fueron sometidos a una serie de experimentos de EEG. Durante estas pruebas, se les pidió localizar un objeto específico, como un círculo verde entre diamantes verdes, mientras un estímulo distractor, como un diamante rojo, se colocaba frecuentemente en la misma posición.

De acuerdo con Medical Xpress, los resultados mostraron que, con el tiempo, el cerebro comenzaba a suprimir la posición del distractor en los primeros momentos del procesamiento visual. Esta supresión aprendida permitió a los participantes mejorar significativamente en la localización del objetivo cuando el distractor aparecía en la posición aprendida, en comparación con cuando aparecía en otro lugar.

Implicaciones para la atención y el control visual

El Norman Forschack, del Instituto de Psicología Wilhelm Wundt de la Universidad de Leipzig, explicó que estos hallazgos demuestran que el cerebro no solo reacciona automáticamente a estímulos llamativos, sino que también puede aprender a filtrar distracciones de manera eficiente.

Según publicó Medical Xpress, Forschack añadió que también se observó una reducción en el procesamiento visual de los estímulos objetivo cuando aparecían en la posición donde el distractor había sido mostrado frecuentemente. Esto sugiere que el cerebro no solo ignora las distracciones, sino que también ajusta su atención en función de la experiencia previa.

Estudio revela cómo el sistema
Estudio revela cómo el sistema visual suprime estímulos distractores (Créditos: Freepik)

Aplicaciones potenciales en la vida cotidiana

Aunque el estudio se centró en un entorno controlado de laboratorio, las implicaciones de estos hallazgos podrían extenderse a situaciones cotidianas. Medical Xpress detalló que los investigadores sugieren que un diseño consistente de carreteras y entornos de tráfico podría ser beneficioso para la seguridad vial, ya que el cerebro de los conductores podría aprender a ignorar distracciones frecuentes y potencialmente peligrosas.

Dock Duncan, autor principal del estudio de la Vrije Universiteit Amsterdam, concluyó que las personas reconocen automáticamente interfaces de usuario familiares o diseños de capítulos de libros, y que este efecto ya se refleja en el procesamiento visual básico.

Conclusiones del estudio

Este estudio proporciona una visión valiosa sobre cómo el cerebro humano puede adaptarse a un entorno lleno de distracciones visuales. Según consignó Medical Xpress, la capacidad del cerebro para aprender a suprimir estímulos distractores no solo mejora la atención y el control visual, sino que también podría tener aplicaciones prácticas en el diseño de entornos más seguros y eficientes.

A medida que continuamos explorando las capacidades del cerebro, estos hallazgos podrían abrir nuevas vías para mejorar la interacción humana con el entorno visual que nos rodea.