¿Qué hacer si recibí la vacuna de Johnson & Johnson contra el COVID-19?

Si la fórmula fue administrada en las últimas tres semanas, la atención se centra en los posibles síntomas. Los médicos recibieron recomendaciones para tratar los eventuales casos de trombosis

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Vacunación en Chicago con la fórmula de Johnson & Johnson  (Reuters)
Vacunación en Chicago con la fórmula de Johnson & Johnson (Reuters)

Recibí la vacuna contra el coronavirus desarrollada por Johnson & Johnson. ¿Y ahora qué?

Que no cunda el pánico. Las autoridades de sanidad de Estados Unidos recomendaron el martes suspender la administración de la vacuna de J&J mientras investigan los reportes de seis casos de trombosis entre las casi 7 millones de dosis que se han administrado en Estados Unidos.

Las autoridades señalaron que hay que estar atentos, pero recordar que los reportes de coágulos sanguíneos que podrían estar relacionados con la vacuna de J&J son muy poco comunes.

“Es menos de uno en un millón”, señaló el doctor Anthony Fauci, el experto en enfermedades infecciosas del país. Según consideró, es un exceso de precaución.

(Reuters)
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Los efectos secundarios comunes luego de recibir una vacuna contra el COVID-19 pueden incluir dolor en el brazo y síntomas similares a los de una gripe normal durante un par de días. No son agradables, pero no son los que están inquietando a las autoridades.

Más bien hay que estar atento a síntomas distintos y más graves relacionados con los coágulos, sobre todo entre una y tres semanas después de haber recibido la vacuna. Esos síntomas incluyen fuertes dolores de cabeza, de espalda y abdominales, así como dificultad para respirar, hinchazón en las piernas, pequeños puntos rojos en la piel o moretones.

Si se presentan esos síntomas, hay que buscar atención médica de inmediato. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han publicado consejos para ayudar a los médicos a detectar esos coágulos y tratarlos de manera segura.

Entre otras advertencias, señalan que los pacientes no deben ser tratados con heparina (un fármaco habitual para la coagulación de sangre), ya que podría ser más dañina. Ante cualquier sospecha, la consulta debe ser derivada a un hematólogo para su evaluación.

Según la Casa Blanca, la suspensión temporal “no va a tener un impacto significativo en el plan de vacunación, ya que la vacuna de Johnson & Johnson representa menos de un 5% de las inoculaciones en Estados Unidos hasta ahora”. El presidente Joe Biden aseguró que “hay suficientes vacunas para todos los estadounidenses. Eso es absolutamente indiscutible”.

No obstante, ya se confirmaron demoras para Europa, que tiene una campaña de vacunación más lenta. La Unión Europea firmó un pedido de 200 millones de dosis de la vacuna de Johnson & Johnson, con opción a otros 200 millones.

La aparición de estas complicaciones de coágulos son similares a las asociadas a la vacuna de AstraZeneca, que está siendo investigada por la EMA y que ha provocado una fuerte desconfianza de la población hacia el agente inmunizante y la suspensión de su uso en varios países, entre ellos Dinamarca.

Ambas vacunas utilizan la misma tecnología de vectores de adenovirus.

(Con información de AP y AFP)

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