Miguel Mora, periodista liberado por el régimen de Daniel Ortega: “Esta dictadura dinástica está herida de muerte, saben que están derrotados"

En diálogo con Infobae, el director del canal 100% noticias contó cómo fueron sus 172 días en prisión después de que las fuerzas policiales lo detuvieran y golpearan durante un espectacular operativo en el que también cerraron su emisora

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Miguel Mora, periodista y propietario del Canal 100% noticias, recibió a Infobae tras ser el liberado la semana pasada (Fotos: Oscar Navarrete)
Miguel Mora, periodista y propietario del Canal 100% noticias, recibió a Infobae tras ser el liberado la semana pasada (Fotos: Oscar Navarrete)

El periodista Miguel Mora recién pudo entrevistarse con su abogado defensor cuando salió libre. Ciento setenta y dos días después de ser detenido en un operativo hollywoodesco, Mora recibió en su casa al doctor Julio Montenegro, quien solo atinó a decir con una sonrisa. "¡Hombre! Por fin podré hablar con mi defendido!".

Miguel Mora es director y propietario de la televisora 100% Noticias. Fue detenido con violencia junto a la también periodista y jefa de prensa del canal, Lucía Pineda Ubau, la noche del 21 de diciembre de 2018. "Se lanzaron como que era 'El Chapo' Guzmán, como que era Osama Bin Laden al que buscaban", dice. "Entraron por arriba (techo), por abajo, con drones, estrellaban las camionetas contra los portones y contra los vidrios del canal. Todos con (fusiles) akas. Todos encapuchados. De civil. Pistolas de rayos láser, desbaratando todo, como un enjambre hasta que llegaron donde estábamos nosotros, tres periodistas".

Mora no se explica por qué tanta saña contra ellos. "A mí me acusan por la forma en que yo estoy informando, que los sandinistas se sienten ofendidos, que es un lenguaje de odio. Una mezcolanza espantosa tratando de vincular cada palabra, cada pensamiento mío, como que ejecutaba un asesinato o una especie de asonada".

Hasta antes de abril de 2018, cuando estallan las revueltas populares, Mora se definía como periodista de profesión y sandinista de ideología. "Ortega me conoce. (Rosario) Murillo me conoce. Conoce a Verónica (su esposa). Conoce a Lucía (Pineda)", dice. El Canal 100% Noticias no era, sin embargo, un órgano de propaganda a favor del régimen como los medios oficialistas, pero tampoco era frontalmente crítico. En su parrilla incluía programas de opinión abiertamente opositores, y en sus programas propios podían oírse voces diferentes a las del gobierno.

El edificio del canal 100& Noticias, se mantiene hasta hoy tomado militarmente por la Policía sin explicación legal alguna.
El edificio del canal 100& Noticias, se mantiene hasta hoy tomado militarmente por la Policía sin explicación legal alguna.

"Yo soy de los que vivo mi momento en el tiempo que es. Y si miro rasgos de dictadura a los niveles que tenemos hoy lo voy a decir. Creo que todo gobierno tiene derecho a tener su tiempo desenvolvimiento. Si a un gobierno le va bien, a la sociedad le va bien. Obviamente bajo un paraguas democrático institucional", explica.

Dice que el gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo se vino descomponiendo con los años y se descompuso dramáticamente a partir del abril 2018. "Fue un error histórico el que cometieron. No solo hicieron una represión normal en un régimen autoritario, sino que mandaron a matar. ¡Ya te pasaste! ¡Sos un régimen criminal! Cuando en vez de ver los problemas y buscar cómo solucionar, de ir a un diálogo, buscar la verdad, la justicia, seguís con operaciones limpieza (masacres de manifestantes), seguís con criminalización. eso ya es otro momento".

Durante la cobertura a las primeras protestas, periodistas de 100% Noticias, sufrieron golpizas y robos de equipos de parte de las turbas afines al gobierno. Un alto personero del régimen, según relato de Mora, le pidió en "nombre del comandante Ortega" que dejara de cubrir las protestas que se estaban multiplicando por todo el país en un pasaje inédito en los últimos diez años. Mora tuvo la opción de plegarse a la cobertura de los medios oficiales que al comienzo ignoraron el estallido social y luego trataron de presentarlo como un golpe de Estado, o pasar a la denuncia. Escogió lo segundo. Y con ello selló su suerte.

Dos meses antes de su detención, Mora recibió en Argentina el Gran Premio Libertad de Prensa 2018, de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), en representación del periodismo independiente de Nicaragua. Para ese momento, el canal 100% Noticias sufría acoso permanente del régimen orteguista. Incluso, en una ocasión lo sacó del aire sin explicación alguna, y permanentemente se apostaban policías, paramilitares y turbas frente al edificio con el propósito de intimidar y vigilar.

"Nunca antes había entendido el verdadero valor de la libertad de prensa como en estos tiempos de prueba para los míos y para mi patria", dijo Mora en Argentina mientras recibía el premio. "Es una libertad que define todas las demás libertades, colegas; no podemos menospreciarla, banalizarla, corromperla, venderla o postergarla. Es cuestión de vida o muerte".
En esos días, Mora llegó a temer por su vida. "Cuando ya me comienzan a sacar de mis vehículos, a quitarme la ropa, a amenazarme de muerte, si temí un poco. Tanto así que le dije a Verónica que nos quedáramos como atrincherados en el canal, ahí dormíamos. Pasamos desde el 5 de diciembre hasta el 21 que nos capturaron porque así evitamos que en el transcurso de la casa al canal nos estuvieran hostigando".

Miguel Mora, en la audiencia donde se le acusó de incitar al odio.
Miguel Mora, en la audiencia donde se le acusó de incitar al odio.

Mora dice que conversó con su esposa los escenarios posibles ante un régimen que decidió retomar el control por la fuerza. "Decidimos que no nos iríamos al exilio, que íbamos a asumir la censura e incluso mi captura", dice. Lo que no esperaba era una captura, a su decir, "estilo Chapo Guzmán". "Yo estaba listo para que llegaran, normal, golpean, ¿está aquí el licenciado?, si pasen, orden de captura, te "enchachan" (esposan), llamo a mi abogado y proceden. Lo que ocurrió no fue una detención sino la toma militar de un medio de comunicación por efectivos armados de (fusiles) aka, desbaratando todo lo que había". Tampoco esperaba lo que vino después.

"Vino el aislamiento. El vulgareo, la burla, los golpes", dice Mora que sufrió tan pronto fue capturado. "Me dieron un golpe (al llegar). Maldito, así te queríamos ver, hijo de tal por cual, me decía, aquí se te van a bajar esos huevos. Caí con la mafia".

A Lucía Pineda Ubáu la aislaron en una celda donde ni siquiera había baño y tenía que defecar en sus manos para recoger el estiércol y botarlo.

"Nos mantenía desnudos. Y después en un régimen de máxima, máxima seguridad. No sé por qué. Ya nos habían quitado los equipos. Incluso los periodistas del canal se habían tenido que ir al exilio y nuestra plataforma web se paralizó en ese momento. Verónica quedo sola", explica.

Mora tiene una tesis para explicarse la saña con que Lucía y él fueron tratados: la Policía les pasaba factura personal. "La saña vino de la Policía. Porque los señalábamos y los señalábamos como los asesinos del pueblo. Fuimos directos. ¿Quiénes mataron? La Policía. Paramilitares son iguales a la Policía. La policía como que se extralimitó en un primer momento, porque después vino una orden como de no seguir con más golpes. Ya en el sistema penitenciario el trato fue de aislamiento total, de máxima seguridad, pero ya no me tocaron ni un pelo, al punto que ni me cortaron el pelo en seis meses".

Verónica Chávez, Miguel Mora y Lucía Pineda Ubáu, poco después de la liberación de los dos últimos.
Verónica Chávez, Miguel Mora y Lucía Pineda Ubáu, poco después de la liberación de los dos últimos.

"Hay una norma para el preso político", agrega, "al preso político hay que desbaratarlo, hay que humillarlo, quebrarlo, siempre aislados. La saña tenía que ver con la política de odio que había".

El 10 de junio pasado, Miguel Mora y Lucía Pineda, fueron liberados dentro de un grupo de 56 reos políticos que soltó el régimen de Ortega mediante una cuestionada Ley de Amnistía.

"Esta es una dictadura dinástica", dice ya en su casa, golpeado por tantos días de encierro, pensando en recomponer su vida. "Está herida de muerte. Saben que están derrotados. No nos hicieron cambiar de opinión. Hubo una masacre. Cualquier persona con un mínimo de decencia no puede aceptar eso como correcto. Teníamos que denunciarlos".

Asegura que el canal 100% Noticias volverá pronto al aire. "Tal vez no en el edificio que nos tienen robado, ni con los equipos que nos han robado, porque ese día los vecinos nos reportan que en la madrugada un camión de la Alcaldía (de Managua) llegó y se llevó casi todo. Mejor armo de nuevo un canal en otro edificio. Comenzar de cero. Con el apoyo del pueblo. El principal capital de un medio y un periodista es su credibilidad. Ya ese canal no me pertenece, le pertenece al pueblo", señala.

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