2025: los corridos tumbados alcanzan el estatus global del mariachi a pesar de la censura

Desde que el mariachi se volvió un referente de México ningún otro género musical había resonado tanto a nivel mundial

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A dos años de su
A dos años de su irrupción en la escena musical, el artista de Hermosillo, Sonora desplazó de las listas de popularidad a consagrados de los corridos tumbados. (Infobae México / Jesúe Abraham Aviles)

El narcotráfico y su inherente violencia reconfiguraron a México como un cubo Rubik. Como un espejo, la música regional reflejó el impacto del crimen organizado en el tejido social, derivado de dos políticas de seguridad disímiles entre sí: la guerra frontal de Calderón contra los cárteles y los “abrazos, no balazos” de López Obrador.

En 2023, luego de más de una década de dominio del reguetón, ocurrió lo que por años parecía improbable. Un nuevo género musical tomó por asalto las listas de popularidad.

Ese año, lo regional se volvió la corriente principal y Peso Pluma, un joven de 24 años originario de Zapopan, Jalisco, se convirtió en la cara más visible de un movimiento musical y cultural que volvió a posicionar a México como un referente a nivel internacional.

Sin embargo, no fue el único artista emergente. Natanael Cano, Dan Sánchez y Junior H, entre otros, años antes comenzaron a componer temas que encontraron en las redes sociales los espacios que les fueron cerrados en la escena local.

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Pesos Pluma fue el artista más escuchado en México en 2023. (Foto AP/Rebecca Blackwell, archivo)

Del mariachi a los corridos alterados

Desde que el mariachi se volvió un referente de México a mediados del siglo XX, ningún otro género musical había resonado tanto a nivel mundial, para bien y para mal.

Las métricas de Spotify sobre lo más escuchado en el país en 2023 estableció a siete artistas de regional mexicano en el top 10: Peso Pluma —quien desplazó a Bad Bunny—, seguido de Junior H, Natanael Cano, Fuerza Regida, Luis R. Conriquez, Carín León y Grupo Frontera, estos últimos, los únicos que no formaban parte de la avanzada de los corridos alterados.

No obstante, una sorpresa mayor aguardaba: Junior H y Peso Pluma figuraron en la lista de los artistas más escuchados a nivel internacional, junto a estrellas de peso en la industria como Taylor Swift, Drake, The Weeknd y Bad Bunny.

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Natanael Cano ha retado la censura oficial. Credito: cuartoscuro

La sombra de Ángel del Villar

El mismo año en el que los corridos tumbados fueron la música más escuchada en México, en Estados Unidos una figura clave de su difusión fue sentenciado a prisión por sus nexos con el crimen organizado.

Ángel del Villar, dueño de DEL Records fue condenado a cuatro años de prisión bajo la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico (Kingpin Act).

Según imputaciones de autoridades de EEUU, Del Villar negociaba a través de DEL Enternainment con Jesús Chucho Pérez Alvear, un promotor de conciertos vinculado al Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Los Cuinis. En diciembre de 2024, Chucho fue asesinado en Polanco, una de las colonias más exclusivas y seguras de Ciudad de México.

Del Villar, quien en 2010 incursionó en la industria proveniente del ámbito de la construcción, fue una figura controversial sin la cual Gerardo Ortiz, Ariel Camacho y los Plebes del Rancho, Eslabón Armado, T3R Elemento, Los Del Limit, Lenin Ramírez, Cheli Madrid, El Makabelico, José Manuel, Leonilo Jaimes, Ulices Chaidez y Pesos Pluma no figurarían en el mapa musical.

Una corte declaró culpable al
Una corte declaró culpable al magnate discográfico de 11 cargos bajo la Ley Kingpin. (Foto: @angeldelvillar27, Instagram)

Censura, contradicciones y castigo selectivo

El éxito de los narcocorridos y corridos tumbados detonó una reacción institucional. Congresos locales impulsaron reformas para prohibir narcocorridos en eventos públicos, con sanciones económicas para artistas.

A nivel federal, la Secretaría de Cultura lanzó México Canta, un concurso orientado a “cambiar narrativas” musicales.

Artistas como Natanael Cano, Grupo Firme y Los Alegres del Barranco optaron por asumir multas y restricciones para no romper con su audiencia, evidenciando una desconexión entre política cultural y consumo real.

2025: estatus global bajo sospecha

La caída de Ángel del Villar reabrió la discusión sobre la delgada línea entre industria musical, narcotráfico y espectáculo. Aun así, su influencia fue determinante para proyectar a decenas de artistas que hoy dominan el mercado.

La censura no detuvo al género. Al contrario, confirmó su fuerza. En 2025, los corridos tumbados ya no son una moda ni una provocación: son un síntoma cultural de alcance global.