La ciudad de Pomfret, famosa por sus colores otoñales, se cansó de los influencers y restringió su acceso

En los últimos años, Pomfret, localidad estado de Vermont, se ha convertido en un destino muy popular para los amantes de la fotografía y las redes sociales, especialmente durante la época del otoño. La gama de las hojas que se marchitan, del amarillo al rojo, transforma el paisaje en bosques de colores vibrantes que atraen a los influencers, quienes llegan desde todas partes del mundo para capturar estas imágenes y compartirlas en sus perfiles sociales. Para los residentes, eso significa problemas de tránsito, invasión de propiedad privada y ruidos molestos. Tanto que limitó el acceso a ciertos lugares claves.

Hasta el domingo 15 de octubre, la junta comunal aplica restricciones a la circulación y el estacionamiento de vehículos en Cloudland Road y Barber Hill Road, los caminos que conducen a la granja privada que más buscan los influencers, porque se encuentra rodeada de un impresionante follaje colorido al final de una ladera. Según el medio Hyperallergic, la granja Sleepy Hollow es el lugar donde más fotografías se toman en todo el estado, lo que genera congestión vehicular.

El creciente número de influencers y turistas en la zona ha generado una serie de problemas que las autoridades locales consideran insostenibles. El primero es el tránsito, ya que los estrechos caminos rurales de Pomfret no están diseñados para soportar la intensa circulación vehicular que se ha generado en los últimos años, lo que ha llevado a un aumento en los accidentes y las congestiones.

Otro problema es que muchos visitantes invaden las propiedades en su búsqueda de la foto perfecta del otoño. En muchas ocasiones, han ignorado las señales de prohibido el paso y han ingresado en terrenos privados sin el consentimiento de sus propietarios. Esto ha llevado a conflictos con los residentes locales y ha causado daños materiales.

Además, la presencia de numerosos influencers en el estado ha generado el descontento de sus habitantes con la polución sonora que producen. Muchos de ellos utilizan drones y equipos de fotografía profesionales que emiten ruidos constantes, interrumpiendo la tranquilidad de los residentes locales y perturbando la vida silvestre de la zona.

“Ruido excesivo, polvo, basura, allanamiento de morada y daños a la propiedad por parte de los visitantes”, sintetizó un miembro de la junta municipal a Hyperallergic el saldo de la popularidad de Pomfret para sus habitantes.

Varios residentes relataron a The Washington Post historias que influencers y turistas que paseaban y hacían picnics en propiedades vecinales, se cambiaban de ropa en vestidores improvisados y bloqueaban las entradas a sus viviendas con sus vehículos aparcados.

Ante esto, las autoridades locales de Pomfret decidieron tomar medidas. En primer lugar, restringieron el acceso a ciertos lugares favoritos de las redes sociales. El anuncio de la junta municipal indica que se han instalado señalizaciones adicionales para despejar la congestión vehicular en las carreteras.

Asimismo, se han colocado vallas y señales de prohibido el paso en áreas consideradas de alta importancia ecológica o propiedad privada, con la finalidad de preservar el entorno natural y evitar conflictos con los propietarios.

Además, se han establecido límites de velocidad más estrictos y se está considerando la posibilidad de implementar un sistema de transporte público para reducir la cantidad de vehículos en las carreteras.

Con respecto a la invasión de propiedad privada, se ha aumentado la presencia de la policía local en las zonas más afectadas. Se están imponiendo multas más elevadas a aquellos que sean encontrados invadiendo terrenos privados sin permiso.