Cuánto dura la comida si la guardas en el frigorífico: cuidado si te pasas de plazo

Las sobras del fin de semana, el táper de comida que te ha pasado tu madre o las porciones de una receta mal calculada. Todo ello se acumula dentro de los frigoríficos y sirve para solventar la falta de tiempo para preparar comidas de entre semana.

Cada alimento, ya sea cocinado o en su estado natural, tiene un límite de tiempo para su consumo, incluso si se somete a congelación. El consumo de productos caducados puede provocar intoxicaciones alimentarias graves. Según advierte la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), una cuarta parte de las intoxicaciones se deben a una refrigeración inadecuada.

El frigorífico nos da la posibilidad de aumentar el tiempo de vida útil de los alimentos. A veces se calculan mal las cantidades, otras sabemos que vamos a necesitar tener la comida ya preparada, y guardar las sobras en frío nos ayudas a conservarlas. Ahora, tanto los alimentos crudos como los cocinados pueden estar en la nevera durante un periodo de tiempo máximo.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha clasificado los alimentos en función de su tiempo de conservación en la nevera. Los productos que pueden mantenerse entre uno y dos días son el pollo, el pavo, la carne picada, las salchichas frescas, el pescado blanco y azul, y la leche fresca una vez abierta. Por otro lado, las salsas y el caldo de carne se conservan entre dos y tres días.

Entre los alimentos que aguantan de dos a cuatro días se encuentran el filete de ternera, las chuletas de cerdo, los platos preparados, las sopas y la leche. Los fiambres y embutidos pueden mantenerse hasta seis días, mientras que los huevos y la mantequilla llegan a conservarse hasta tres semanas.

Para aumentar el tiempo de conservación de los alimentos, se recomienda el uso del congelador. Esta práctica permite preservar los productos por periodos más largos, aunque es aconsejable anotar la fecha de congelación, ya que aunque en este caso los plazos son muchos más extensos, también tienen un límite marcado.

Si la comida pasa más de cuatro días en el frigorífico, lo más prudente es tirarla a la basura. Y es que después de tres o cuatro días, las sobras de comida pueden empezar a desarrollar bacterias, lo que incrementa el riesgo de intoxicación alimentaria. Por lo general, estos microorganismos no alteran el sabor, olor o apariencia de los alimentos, lo que hace difícil saber si está o no en buen estado.

Por otra parte, también es fundamental saber como debe guardarse la comida en el frigorífico. Dejar los alimentos durante horas a temperatura ambiente antes de refrigerarlos, almacenarlos sin cubrir o en recipientes inadecuados también puede favorecer una rápida proliferación de bacterias. Estas prácticas incrementan el riesgo de intoxicaciones alimentarias, como la salmonela y otras enfermedades causadas por diferentes microorganismos.