“En Ecuador la cosa está más fea”: ex futbolista de Monterrey narró la dura situación que atraviesa su país por el coronavirus

La pandemia de coronavirus ha puesto al límite a diferentes gobiernos en el mundo. En algunos, la crisis sanitaria sigue creciendo y ha generado incertidumbre entre la población, como en España o Italia.

Sin embargo, la noticia que conmocionó al mundo fue que en Guayaquil, Ecuador, la gente vive entre sus muertos. Esto porque la saturación de servicios por la emergencia ha evitado que las autoridades recojan los cuerpos de las personas que han fallecido ya que algunos han quedado varados en las calles.

Por ello, medios de comunicación retrataron la dura situación que atraviesa el país sudamericano con testimonios de la población, entre ellos deportistas. En esta ocasión, el ex jugador ecuatoriano que militó en equipos de México, Walter Ayoví, contó cómo vive su familia estos momentos.

“En mi país, en Ecuador, la cosa está más fea. La gente está golpeada por todo lo que está sucediendo, es algo muy crítico, muy complicado, por lo que está sucediendo. Ojalá que pronto se pueda mejorar esto”, comentó el ex jugador de los Rayados de Monterrey, de acuerdo con ESPN.

El sudamericano, que vive en la ciudad de Monterrey, México, señaló que su familia vive momentos complicados. “Tengo una hermana que es doctora y trata de día a día darles la información y cuidado, cuando se trata de comprar alimento va una sola persona, tratando de tener el cuidado con tapabocas”, apuntó.

“Allá la gente está muy golpeada en cuanto a lo económico y ahora mismo el país está pasando por situaciones muy, pero muy complicadas. Lo económico le afectará allá a todos, a ver de qué forma se trata de salir adelante”, finalizó.

Por los mismos días que México, el 29 de febrero, Ecuador confirmó su primer caso de COVID-19. Sin embargo, a diferencia de tierras aztecas, los sudamericanos suman más de 3.163 contagios hasta el jueves y oficialmente hay 120 muertes.

Esto se debe a las pobres condiciones sanitarias que vive el país. Para doctores y expertos la limitada disponibilidad de las pruebas para el COVID-19 en Ecuador hace más complicado identificar y aislar a los enfermos y detener la cadena de transmisión, además de que hay pocas camas de hospital y ventiladores.

“Estamos viendo una situación bastante parecida a lo que sucede en Italia”, dijo a la agencia AP la doctora Mireya Rodas, neumóloga en un hospital de Guayaquil que ella misma dio positivo al nuevo virus.

Medios ecuatorianos han mostrado esta semana escenas del drama en Guayaquil: cadáveres abandonados en las calles apenas cubiertos con plásticos o sábanas y largas filas de personas frente a hospitales y cementerios a la espera de saber el destino final de sus muertos.

La mayoría de las funerarias, que además de retirar cadáveres de casas y hospitales, se encargan de los trámites legales y el entierro o cremación. Por ello, han suspendido actividades ante el temor de que sus empleados se contagien del coronavirus.

En un intento de enfrentar la situación en Guayaquil, el gobierno busca tanto simplificar los trámites médicos y legales como que la policía, bomberos y fuerzas armadas ayuden a recoger los cuerpos de los fallecidos.

El delegado presidencial para atender la situación, Jorge Wated, dijo que una fuerza de tarea de militares, policías y bomberos en los últimos días ha recogido 150 cuerpos, aunque no precisó la cantidad de cuerpos que quedan pendientes por retirar, no todos por COVID-19, tanto en casas como en hospitales.

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