Los astronautas de la NASA varados en el espacio durante varios meses retornaron ayer a la Tierra y tuvieron la mejor de las bienvenidas: un grupo de delfines rodeó la cápsula Dragon Freedom de SpaceX en pleno Golfo de México.
Se trata de los astronautas Butch Wilmore y Sunita Williams, que viajaron desde la Estación Espacial Internacional (EEI) a bordo de la misión Crew-9 de SpaceX junto con sus compañeros Nick Hague y el cosmonauta Aleksandr Gorbunov.

Así, el amerizaje en el Golfo de México, frente a la costa de Florida, estuvo marcado por un inesperado recibimiento: una manada de delfines rodeó la cápsula Dragon Freedom poco después de su impacto en el agua cerca de la costa de la localidad de Tallahassee, un momento captado por las cámaras de la NASA y que sorprendió a la tripulación de rescate.
“¡Guau! Tenemos una adorable manada de delfines, no solo uno o dos”, comentó Kate Tice, ingeniera de SpaceX, durante la transmisión oficial del regreso.
Las imágenes mostraron a los mamíferos marinos nadando alrededor de la cápsula, aparentemente curiosos por la llegada del objeto a su hábitat.
El evento no solo destacó la naturaleza impredecible de los amerizajes en el océano, sino que también añadió un tono especial al regreso de los astronautas, especialmente a Wilmore y Williams que viajaron al espacio por 8 días, pero debieron quedarse más de 9 meses porque la cápsula original en la que llegaron al laboratorio orbital a 400 kilómetros de la Tierra presentó fallos y debió regresar a nuestro planeta sin tripulación.
Un viaje más largo de lo previsto

A bordo de la cápsula que amerizó ayer viajaban los astronautas de la NASA Nick Hague, Suni Williams y Butch Wilmore, junto con el cosmonauta Aleksandr Gorbunov de la agencia espacial rusa Roscosmos.
Sin embargo, el regreso de Wilmore y Williams fue particularmente significativo, ya que ambos habían permanecido en el espacio mucho más tiempo de lo planeado.

Su viaje comenzó el 5 de junio de 2024 a bordo de la nave Starliner de Boeing, en lo que debía ser una misión de apenas 8 días. Problemas técnicos en la nave, que incluyeron repetidas fugas de helio y falla en 5 de sus 20 propulsores, impidieron su retorno, obligando a la NASA a reconsiderar su plan de regreso.
Después de varios retrasos, la agencia decidió en agosto de 2024 traer la cápsula Starliner a la Tierra sin tripulación y asignar a Williams y Wilmore a bordo de la Dragon Freedom de SpaceX. Eso finalmente ocurrió el 7 de septiembre, cuando la Starliner aterrizó sin tripulación en la Tierra.

Para que los astronautas varados pudieran regresar a la Tierra, la tripulación original de la Crew-9 en la cápsula de SpaceX se redujo, dejando fuera a dos astronautas, Zena Cardman y Stephanie Wilson, para hacer espacio para los astronautas varados. Finalmente, la misión de regreso se concretó este mes, poniendo fin a una larga estadía en órbita.
El descenso de la cápsula Dragon Freedom ocurrió a las 17:57 EDT, con un aterrizaje suave frente a la costa de Tallahassee, Florida, gracias al despliegue de cuatro paracaídas.

“¡Amerizaje del Dragón confirmado! ¡Bienvenidos de nuevo a la Tierra, Nick, Suni, Butch y Aleks!”, anunció SpaceX a través de sus redes sociales. Poco después, una flota de buques de rescate se dirigió a la cápsula para asistir a la tripulación en su desembarco.
El regreso también estuvo rodeado de controversia. Figuras como Elon Musk, director ejecutivo de SpaceX, y el expresidente Donald Trump sugirieron que la administración de Joe Biden había “abandonado” a los astronautas en el espacio por motivos políticos, lo que la NASA desmintió.
Según la agencia, el plan de rescate con SpaceX había sido trazado desde agosto del año anterior y no estaba relacionado con cuestiones políticas.
Último amerizaje en la costa este
El regreso de la Crew-9 no solo marcó el fin de una misión extendida, sino que también representó el último amerizaje de una cápsula Dragon cerca de la costa este de Estados Unidos. SpaceX anunció que trasladará sus operaciones de recuperación a la costa oeste para minimizar los riesgos asociados con la caída de escombros durante los reingresos.
“Solo espero que la costa de California pueda traer tantos delfines como los que vimos durante la operación de hoy”, bromeó Sarah Walker, directora de gestión de la misión Dragon en SpaceX.

Las imágenes de los delfines rodeando la cápsula se convirtieron en uno de los momentos más llamativos de la misión, resaltando la interacción entre la exploración espacial y la vida marina.
A pesar de los desafíos técnicos y la prolongación del tiempo en órbita, el regreso de los astronautas a la Tierra fue un éxito, consolidando el papel de SpaceX y la NASA en la continuidad de los vuelos espaciales tripulados.
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