El mercado de La Merced no se rinde: entre incendios y la pandemia

Lo que hoy es el gran mercado de menudeo en Ciudad de México, inició su proceso en 1594 con la fundación del Convento de la Merced. A su alrededor, la actividad comercial hizo presencia, pequeños locales donde se vendía fruta, verdura y semillas. El crecimiento no se esperó, pues la zona conectaba con el embarcadero de Roldán, del cual llegaba mercancía fresca proveniente de Xochimilco, Tláhuac, Chalco y Texcoco.

En 1862 las Leyes de Reforma aprobadas un año antes, causaron la demolición del Templo de la Merced, conservándose hasta la actualidad el convento. Con el nuevo espacio liberado, los comerciantes iniciaron la creación del mercado de la Merced asentándose en lo que fue el templo.

En 1863 fue consolidado como el primer “tianguis de barrio”, grandes lonas cubrían de manera permanente los locales, poco a poco la construcción de las naves llegó, siendo en 1957 cuando se estableció como centro de venta de manera oficial y formando parte de la red de mercados del antes Distrito Federal.

Pese a ser reconocido y visitado por miles de capitalinos, la zona en la que se ubica está marcada por los altos niveles de inseguridad, violencia y prostitución. También, los incendios han dejado huella en el mercado, el primero se registró en 1988, al presentarse una explosión en un local de fuegos artificiales cobrando la vida de al menos 60 personas. El cuatro de mayo de 1998 , un corto circuito generó un gran incendio que consumió dos terceras partes de la nave principal, es decir, casi 600 locales dañados sin víctimas mortales. Sumándose a la lista dos incendios más en 2013 y 2019, siendo el último en la nave mayor que dejó afectaciones económicas a casi mil comerciantes.

Infobae México recorrió los pasillos del mercado entre el mariachi, pastel, altares coloridos y mucha historia.

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