Susanna Griso revela el gran secreto de su boda con Luis Enríquez Nistal: “No me voy a casar de blanco, será distinto”

Desde que Susanna Griso anunció el pasado octubre que pasará por el altar junto a Luis Enríquez Nistal —coincidiendo con su 56º cumpleaños—, cada evento público en el que participa se convierte en una oportunidad para conocer un poco más cómo será una de las bodas mediáticas del próximo 2026. La presentadora de Espejo Público, que afronta esta etapa con entusiasmo, sigue ofreciendo pinceladas sobre un enlace que, a más de medio año vista, ya despierta una gran expectación.

Griso fue una de las grandes protagonistas de la fiesta navideña de Atresmedia, donde apareció con un llamativo conjunto rojo formado por un traje sastre y un top de gasa transparente. Allí, visiblemente ilusionada, explicó cómo está viviendo este período de preparativos. Asegura que 2025 ha sido “tan bueno” que solo desea que el nuevo año mantenga la misma línea: “Que el 2026 sea igual o mejor, porque encima me caso con el hombre de mi vida”, confesó con una sonrisa a Europa Press.

En ese mismo encuentro reveló uno de los aspectos que más curiosidad generan en torno a cualquier boda: su look nupcial. Aunque dejó claro que no vestirá de blanco, también descartó el rojo, el color que la acompañó en la gala. “No me voy a casar de blanco, pero de rojo tampoco. Será distinto. Pero me tenéis que dejar algún secreto, porque cada día que os veo me sacáis algún secreto y ya no me van a quedar secretos”, bromeó ante los medios.

La periodista ha confirmado que la boda tendrá lugar el 25 de julio en un pequeño municipio de la Costa Brava, donde ambos han adquirido una vivienda. La pareja ha optado por una ceremonia civil cuidadosamente planificada pero alejada de los formalismos tradicionales. Todavía no han hecho pública la localización exacta, un detalle que mantienen bajo llave para preservar la intimidad del día.

Durante un acto reciente en el que ejerció de madrina de los primeros Celebrity Pets Awards, Griso habló con Europa Press sobre el ritmo de los preparativos. Reconoció que aún no ha encontrado su vestido, aunque sí tiene claro que quiere una celebración “relajada”, donde no habrá exigencia de corbatas ni chaquetas.

Sin exclusiva, pero considerada con la prensa

Pese a que el enlace podría atraer numerosas ofertas, la presentadora ha descartado por completo vender una exclusiva. Sin embargo, sí ha avanzado que tanto ella como su futuro marido posarán ante los fotógrafos después de la ceremonia, un guiño que Griso hace a sus compañeros de profesión y a los medios que siguen su trayectoria.

En cuanto a la organización, asegura que ya ha resuelto la parte más “pesada”, especialmente la distribución de mesas, un aspecto que suele generar quebraderos de cabeza en cualquier boda. Su objetivo es centrarse en disfrutar: “Es que si te casas es para disfrutar. Uno tiene que aprender a estas alturas de la vida y quedarse con lo bueno”.

Aunque en un principio la pareja imaginaba una celebración contenida, la realidad ha sido otra. A medida que avanzaban los preparativos, el número de invitados se ha ampliado por la cantidad de compromisos personales y vínculos profesionales de ambos. Griso ha confirmado que todo el equipo de Espejo Público estará presente, y se espera una notable representación del mundo audiovisual y periodístico.

Lo que no formará parte de la instantánea del gran día serán sus mascotas. Griso, que siempre ha mostrado un enorme cariño por sus perros, explicó entre risas que la logística ya es suficientemente compleja como para sumar más miembros a la ceremonia. “Los preparativos van bien. Una nueva vida y mis perros van a formar parte, somos una familia numerosísima, pero en mi boda no estarán. Ya bastante tengo con todos los invitados, los hijos…”, aseguró.