El motivo por el que Katy Perry ha pagado más de 6.000 euros de multa en Formentera

La artista estadounidense fue sancionada por filmar sin permiso en el islote de s’Espalmador durante la grabación de su videoclip

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Katy Perry aparece en un
Katy Perry aparece en un evento de los 10 mejores creadores de tendencias de la temporada 22 de "American Idol" en Los Ángeles el 22 de abril de 2024. (Foto Jordan Strauss/Invision/AP, archivo)

El famoso islote de s’Espalmador, enclave virgen del Parque Natural de Ses Salines en Formentera, suma un nuevo capítulo a sus estrictas normas de conservación tras la polémica sanción que ha sacudido a Katy Perry y a la productora responsable de su videoclip Lifetimes. Según han publicado medios como Diario de Ibiza y ha confirmado Europa Press, la productora encargada del rodaje afrontó en febrero de este año una multa de 6.001 euros por filmar sin autorización en una zona protegida donde el acceso está terminantemente restringido.

La repercusión internacional del caso se unió a la expectación que siempre rodea los pasos de la artista estadounidense. Katy Perry, conocida por sus éxitos globales y sus giras de alto impacto, eligió Ibiza y Formentera como escenario principal de su última producción visual, destinada a capturar la esencia del Mediterráneo. El resultado fue una serie de imágenes de playas de aguas turquesas, fiestas con guiños a España, paseos en ferry y amaneceres inolvidables que no tardó en acumular millones de visionados en YouTube. No obstante, entre escenas de alegría y despreocupación, la artista y su equipo se adentraron en una de las áreas dunares mejor conservadas del archipiélago, un gesto que no pasó desapercibido para la administración balear.

La Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural confirmó que la grabación se realizó en una zona de exclusión, donde el paso está prohibido, sin que se hubiera solicitado ninguno de los permisos exigidos por la normativa vigente. Así lo recoge el artículo 65 del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN): “Las filmaciones requieren de autorización expresa de la Conselleria competente en materia de medio ambiente, sin perjuicio de las que concedan otros organismos o instituciones”. Así, aunque la infracción no constituyó un delito ambiental pues “no hubo daños ambientales” tras el paso del equipo, se tipificó como una falta grave, tal y como subraya la resolución hecha pública meses después de la grabación.

Katy Perry en una imagen
Katy Perry en una imagen de sus redes sociales. (Instagram @KatyPerry)

Con esta multa, que para el patrimonio de Perry puede resultar anecdótica, se busca, sin embargo, en palabras de las autoridades enviar “un mensaje claro sobre la necesidad de respetar las normas de conservación” en estos espacios de alto valor ecológico.

La respuesta del equipo de Katy Perry ante la multa

Desde el entorno de la artista, las explicaciones no se hicieron esperar. El sello discográfico Capitol Records, en un comunicado recogido por Diario de Ibiza, señaló: “La productora de vídeo local nos aseguró que se obtuvieron todos los permisos necesarios”. El mismo portavoz añadió: “Cumplimos con todas las regulaciones asociadas con la filmación en esta área y tenemos el máximo respeto por esta ubicación y los funcionarios encargados de protegerla”. A pesar de la defensa, la administración autonómica confirmó la infracción y anunció que la sanción se había pagado íntegramente al inicio del año.

Fue durante el siglo XIX un espacio dedicado al tratamiento de enfermedades infecciosas que a día de hoy se ha convertido en todo un reclamo turístico

S’Espalmador, junto a la célebre playa de ses Illetes, alberga 137 hectáreas de arena fina y dunas repletas de flora endémica y especies faunísticas protegidas. Estas características únicas han motivado desde 1980 un régimen especial de protección y un acceso altamente restringido, donde las señales y cuerdas limitan el acceso únicamente a quienes cuentan con autorización oficial. En el propio videoclip, varios fotogramas muestran a la cantante disfrutando de este lugar como si fuera un simple plató de rodaje, algo que para los responsables del parque supone un riesgo para la integridad del ecosistema.