El estudio que explica por qué el vino blanco está de moda: el tinto y rosado ya no son tendencia

El sector vitivinícola se encuentra en una situación complicada en España, dada la reducción del consumo y de las exportaciones, a lo que se une que el cambio climático amenaza la producción

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La gastronomía de España tiene un sinfín de platos y recetas que bien merecen acompañarlos de una bebida de calidad. Para los que no son amantes de los refrescos o la cerveza, el vino parece ser siempre la opción ideal. De entre todo ellos, hay uno que triunfa especialmente, por encima del tinto y el rosado: el blanco. Pero lo cierto es que el sector vitivinícola atraviesa una situación complicada en el país: el 90% de las zonas de producción corren peligro si las temperaturas aumentan más de dos grados. A ello se une la bajada del consumo y la reducción de las exportaciones.

Aunque el vino es perfecto para combinarse con algunas de las comidas más típicas de la cultura culinaria española, no sirve cualquiera para todos los platos. Así, el sabor, aroma y estructura del tinto hace que este suela asociarse a las carnes. Por su parte, el blanco es el idóneo para acompañar mariscos, pescados, arroces o pastas, mientras que el rosado suele usarse para aperitivos, mariscos, vegetales, huevos o arroces.

Sin embargo, las exportaciones de vino español cerraron 2023 con una drástica caída del 3,2%, hasta los 2.905,9 millones de euros, y del 4,1% en lo que respecta al volumen, hasta los 2.026 millones de litros, de acuerdo con el informe que ha llevado a cabo el Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV). En total, se generaron 97 millones de euros menos y se exportaron 86,3 millones de litros menos.

Qué países son los principales compradores de vino español

El vino blanco es ideal para acompañar un buen queso. (Iván Martínez Photo)
El vino blanco es ideal para acompañar un buen queso. (Iván Martínez Photo)

El pasado año, la exportación de vinos españoles tuvo cambios en función de los tipos de productos: hubo incrementos notables en los que tienen indicación de variedad y envases tipo Bag-in-box, mientras que aquellos con Denominación de Origen Protegida (DOP) y a granel sufrieron considerables caídas. En el ámbito internacional, el Reino Unido es el principal destino para el vino envasado de España, seguido de cerca por Estados Unidos y Alemania, según el informe antes mencionado.

En concreto, la venta de vinos con indicación de variedad envasados tuvo un aumento del 11% en valor y un 3% en volumen. Paralelamente, los envasados en formatos de entre 2 y 10 litros, dominados por el sistema Bag-in-box, registraron un crecimiento del 8,6% en valor y del 9,5% en volumen. Por el contrario, los vinos DOP envasados sufrieron una caída significativa, perdiendo 73,7 millones en ingresos y 33,4 millones de litros en sus exportaciones. Esta tendencia negativa también se observó en el vino a granel en términos de valor y en los vinos sin indicación envasados.

Los mercados principales para el producto español, aparte del ya referido Reino Unido, incluyen a Estados Unidos, Alemania, Bélgica, Países Bajos y Canadá. Cabe destacar que, a excepción de Gran Bretaña, solo Bélgica, Países Bajos y Canadá experimentaron incrementos tanto en valor como en volumen de vino importado de España. Por otro lado, China marcó una disminución relevante, con una caída del 28% en valor y del 42% en volumen.

En lo que respecta al vino a granel, Alemania lideró el incremento de compras con 36,7 millones de litros más, mientras que Francia e Italia fueron los países que más disminuyeron en volumen, con reducciones de 34,6 millones y 23 millones de litros, respectivamente.

Vino tinto, blanco o rosado: los consumidores lo tienen claro

La exportación del vino tinto español se redujo más que la del blanco en 2023. (Freepik)
La exportación del vino tinto español se redujo más que la del blanco en 2023. (Freepik)

En 2023, el mercado vitivinícola experimentó variaciones notables en sus tendencias de consumo. Los vinos blancos envasados vieron un crecimiento en su valor del 3,9%, alcanzando los 442,5 millones de euros, lo que representa un incremento de 16,7 millones de euros respecto al año anterior. Por otro lado, los vinos tintos y rosados envasados tuvieron un declive en valor del 7%, situándose en 1.278,9 millones de euros, lo cual implica una reducción de 95,4 millones de euros en comparación con 2022.

El comportamiento en volumen de ventas también reflejó dinámicas interesantes. Los vinos blancos sufrieron una leve caída en sus cifras de volumen, disminuyendo un 2,4% hasta los 228,9 millones de litros, lo que equivale a 5,7 millones de litros menos que el año previo. De forma más acentuada, los vinos tintos y rosados registraron una caída del 12% en volumen, disminuyendo hasta los 384,9 millones de litros, es decir, 53,1 millones de litros menos que en 2022.

En el segmento de vinos a granel, la situación fue mixta. Los vinos blancos a granel vieron incrementos tanto en valor, con un aumento del 1,4% hasta los 280,2 millones de euros, como en volumen, con una ligera subida del 0,2% hasta alcanzar los 625,5 millones de litros. En cambio, los vinos tintos y rosados a granel no corrieron con la misma suerte, experimentando descensos tanto en valor, con una caída del 4,4% hasta los 317,3 millones de euros, como en volumen, decreciendo un 1% hasta los 585,7 millones de litros.

Estas cifras, que muestran los cambios en los gustos de los consumidores, destacan la creciente preferencia por los vinos blancos en un contexto en el que el sector vinícola global sufre varios desafíos. La fluctuación en la demanda subraya la necesidad de adaptación por parte de los productores y comercializadores dentro de esta industria.

El precio medio de los vinos producidos en España

Los precios medios del vino tinto y rosado superan a los del vino blanco, tanto en los envasados como a granel. Los datos recientes indican que el costo promedio de los primeros alcanzó los 3,32 euros por litro, experimentando un incremento del 6%, mientras que el vino a granel de las mismas variedades vio una disminución de 3,5%, situándose en 54 céntimos por litro. Por otro lado, el vino blanco envasado registró un precio medio de 1,93 euros por litro, lo que supone un aumento del 6,5%, y el vino blanco a granel se valoró en 45 céntimos por litro, marcando un crecimiento del 1,2%.

Este contraste de precios entre los vinos tintos, rosados y blancos revela tendencias significativas en la valoración de estos productos en el mercado. El incremento en el precio de los vinos envasados, tanto tintos como blancos, sugiere una mayor apreciación por parte de los consumidores hacia productos que perciben de mayor calidad o con características organolépticas preferidas. En contraste, la caída en el precio de los vinos tintos y rosados a granel podría reflejar cambios en la demanda o ajustes en las estrategias de producción y distribución de los productores.

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