Cómo no subir de peso durante las novenas y fiestas de fin de año: el nutricionista deportivo Jacobo Martínez dio consejos

Según Martínez, es importante no exceder las porciones y mantener la rutina de ejercicios para evitar desbalances

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El especialista enfatiza en que
El especialista enfatiza en que es importante no caer en excesos - crédito Freepik

En el inicio de las tradicionales novenas en Colombia, el nutricionista deportivo Jacobo Martínez (@jacobo_nutricion) ha compartido una serie de recomendaciones para quienes desean disfrutar de estas festividades sin aumentar de peso.

Según explicó Martínez a Infobae Colombia, la clave está en evitar el exceso y mantener la consciencia sobre las elecciones alimentarias, ya que “entre más opciones tengas, más calorías vas a acumular”.

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Martínez enfatizó la importancia de no abandonar por completo la rutina de ejercicio durante diciembre. Señaló que muchas personas, al llegar la temporada de novenas y festividades, suspenden totalmente su entrenamiento, lo que puede dificultar la recuperación posterior.

“Encuentra un equilibrio donde puedas entrenar al menos tres vececitas a la semana. Eso va a ayudar mucho a que si tu objetivo es no subirte de peso en una época como esta, te puedas apoyar y tengas una salida muy, muy buena”, recomendó el especialista.

El especialista comparte una guía
El especialista comparte una guía completa en sus redes socials - crédito @jacobo_nutricion / Instagram

Además, sugirió que mantener la rutina de actividad física y alimentación consciente durante todo el mes es preferible a interrumpirla y retomarla recién después del 25 de diciembre, ya que un periodo de descontrol de casi 10 días puede impactar negativamente en los objetivos de salud.

El protocolo de “Reducción de Daños” propuesto por Martínez se basa en tres pilares. El primero es el “blindaje de proteína”, que consiste en consumir alimentos ricos en proteínas, como huevos o batidos, antes de asistir a la novena, con el fin de llegar saciado y evitar la ansiedad que lleva a comer en exceso.

El segundo pilar es el “presupuesto de carbohidratos”, que invita a seleccionar un solo alimento favorito entre las opciones típicas: buñuelos, natilla, empanadas, hojuelas y disfrutarlo plenamente, en lugar de sumar calorías con productos que no resultan especialmente atractivos.

El tercer punto es el “control del alcohol”, ya que bebidas como el aguardiente dificultan la oxidación de grasas; por ello, Martínez recomienda alternar cada copa con un vaso de agua y evitar mezclas con gaseosas azucaradas.

Se recomienda comer solo uno
Se recomienda comer solo uno de los platillos ofrecidos - crédito @jacobo_nutricion / Instagram

En cuanto a la variedad de alimentos consumidos durante las novenas, el nutricionista explicó a Infobae que es posible disfrutar de diferentes preparaciones en días distintos, siempre que se evite la suma excesiva de calorías en una sola noche.

“Si un día vas a una novena y te comes 1 o 2 buñuelos, al otro día vas a otra novena y te comes un pedacito de natilla, al otro te comes una o dos empanadas, al otro te puedes comer una hojuela. No hay ningún miramiento. Ahí lo más importante es no entrar en exceso ni consumírselas todas juntas”, afirmó.

De igual manera, subrayó que las porciones pequeñas permiten probar de todo sin que ello represente un riesgo significativo para el peso corporal: “Puedes comer pequeñas porciones de todo y no preocuparte porque eso te vaya a afectar. No es lo mismo comerte un buñuelo a comerte un pedacito de buñuelo, no es lo mismo comerte un pedacito de natilla a una natilla completa”.

Además el especialista dio consejos para quienes están empezando con la rutina de entrenamiento y alimentación consiente en una época tan difícil como navidad: “Empezar de menos a más va a ayudar a que se sea más sostenible con ese hábito y que no se deje tan rápido”.

Además de la comida se
Además de la comida se debe equilibrar el consumo de alcohol - crédito @jacobo_nutricion / X

El especialista advierte sobre los riesgos de realizar cambios drásticos, como eliminar todos los carbohidratos o el azúcar de manera repentina, o iniciar ayunos sin preparación. Considera que estas medidas suelen ser insostenibles y conducen al abandono prematuro de los nuevos hábitos.

Recomienda, en cambio, avanzar progresivamente para asegurar la permanencia de las mejoras en la alimentación, especialmente en momentos como diciembre o enero, cuando muchas personas buscan transformar su estilo de vida.

Finalmente, destaca el valor de la asesoría profesional. Afirma que “tomar la cita con un nutricionista o con un experto en el tema que te pueda dar una programación personalizada y ajustada y así te ahorras demasiado tiempo y logras mucho más fácil cambiar tu alimentación, sea en diciembre, enero o cuando lo necesites”.