Exministro de Defensa se refirió al pedido de Pedro Castillo: “Sacar a los militares a las calles es un razonamiento simplista”

Jorge Moscoso defendió la formación de las Fuerzas Armadas y dijo que no es compatible con la estrategia que se debe incorporar en el día a día para la seguridad ciudadana.

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Pedro Castillo dejó atrás el sombrero y ahora estrena chicote. Fotos: Presidencia
Pedro Castillo dejó atrás el sombrero y ahora estrena chicote. Fotos: Presidencia

En el marco de una presentación de resultados de un megaoperativo en el distrito de El Agustino, el presidente Pedro Castillo dio declaraciones sin sombrero, con chaleco antibalas y con un látigo en la mano. Lo más resaltante fue el anuncio sobre las Fuerzas Armadas que apoyarán a la Policía Nacional en la lucha contra la delincuencia.

“Pido al señor ministro del Interior que coordine con el Ministerio de Defensa no solamente para tener a la Policía, porque no todo es responsabilidad de la Policía. Vamos a sacar a las Fuerzas Armadas para combatir de una vez por todas al delincuente chico y al delincuente grande. No podemos frenarla de otra forma si no hacemos una tarea conjunta”, señaló el mandatario.

De hecho, Lima y Callao actualmente se encuentran en estado de emergencia por 45 días, lo que según decreto plantea que las Fuerzas Armadas puedan salir a las calles junto con la Policía Nacional y los efectivos de los gobiernos locales.

El vicealmirante (r) Jorge Moscoso Flores, ex ministro de Defensa, interpretó esta situación como declaraciones efectistas del mandatario, más efectistas que efectivas. “No se puede sacar a las Fuerzas Armadas. No hay ninguna doctrina con respecto a este accionar sobre todo en lo que es seguridad ciudadana”, señaló.

Agregó que una cosa es el control del orden interno, ante una escalada de violencia, por ejemplo la toma de una carretera, de un puente, o de una hidroeléctrica. Pero la seguridad ciudadana es diferente, porque allí hay áreas especializadas para investigación criminal, inteligencia, el trabajo policial en las comisarías, todo un esquema que tiene que ver con el día a día.

Mientras que la formación de los miembros de las Fuerzas Armadas están orientadas a la misión constitucional, defensa de la soberanía territorial y otros roles con participación en el desarrollo nacional y en el orden interno. “En resumen, es una expresión que busca un efecto, pero que no tiene un sustento real, que pueda evidenciar ante la ciudadanía un resultado positivo”, sentenció.

Para Moscoso, se desdibuja la idea de sacar a los militares “para que se asusten los delincuentes, eso es un razonamiento simplista y no es así, porque el personal de las Fuerzas Armadas salen con arma de reglamento, que es un fusil, hacer uso de un fusil en defensa propia no es una cosa menor, estamos hablando de armas de guerra”.

En esa línea, dijo que se pone en un área gris la presencia de las Fuerzas Armadas que no tiene nada que ver con una misión de seguridad ciudadana pensando que se está encontrando una fórmula mágica y eso no es así.

¿Cuál sería la solución? El exministro dijo que lo que corresponde es potenciar a la Policía, poner a los mejores en los puestos que corresponden, comenzando por el ministro y terminando por el general menos antiguo en el área operativa que corresponde. Darle los recursos, que haya patrulleros, mejorar las condiciones en las comisarías, establecer una red integrada para las personas. “Eso se debe hacer para tener resultados. y son temas de sentido común, tienen que traducirse en la parte operativa para generar un resultado. Nada de eso se está viendo, solo presentaciones al paso para una no muy clara estrategia de seguridad ciudadana”, refirió.

LA NUEVA IMAGEN

El presidente Castillo apareció con chaleco antibalas, látigo en mano y sin sombrero, y en un momento dijo que le gustaría sumarse al operativo para “agarrar a los choros”.

Sobre la nueva imagen del jefe de Estado, Moscoso aseguró que le hace acordar cuando el señor Urresti estaba de gerente de seguridad ciudadana de una Municipalidad, y salía a enfrentar a los maleantes.

“Es una presentación que desdice mucho de lo que es un jefe de Estado, si quiere dar una muestra de acción a nivel estratégico como corresponde debería estar en un centro de operaciones donde reciba las reportes y evidencie una orientación estratégica que es lo que le corresponde. Salir con el chicote y con chaleco antibalas, es solo una figura efectista. Para los que conocemos algo del planeamiento y proceso en operaciones militares no tiene ningún significado, más que el populismo”, manifestó.

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