El emotivo rescate de tres mineros tras 5 días atrapados bajo tierra

Tras cinco días de esfuerzos constantes se logró el rescate de tres mineros que el pasado 19 de agosto habían quedado atrapados bajo tierra por causa de un derrumbe en una mina de carbón ubicada en el municipio de Lenguazaque, Cundinamarca, al interior del país.

Los mineros Antonio José Salas, Wilmer Orejuela y Antonio Javier, pudieron regresar este domingo a la superficie, todos en buenas condiciones de salud, una noticia que fue celebrada por el presidente de Colombia, Iván Duque, quien se trasladó al lugar para recibirlos.

“Me permito confirmar exitosa operación de rescate de Antonio, Manuel y Eduardo, mineros que estaban atrapados en mina de carbón en Lenguazaque, Cundinamarca. Toda nuestra gratitud a organismos de rescate”, dijo Duque por medio de su cuenta de Twitter.

Desde el día del derrumbe los organismos de socorro, como la Cruz Roja, el cuerpo de bomberos y socorristas de la policía, trabajaron para lograr rescatar con vida a los mineros atrapados, y pudieron comunicarse con ellos a través de una manguera por la que les suministraron agua y comida (maní) y bebidas hidratantes, durante las 96 horas que estuvieron bajo tierra.

“Gracias a Dios estamos bien de salud, de comida, bien de todo. Un poquito preocupados por la salida, pero gracias a Dios estamos bien en estos momentos”, le dijo Antonio Salas, de 45 años, a RCN Noticias tras su rescate.

Él y los demás mineros fueron trasladados en ambulancia hacia el Hospital de Ubaté para hacerle las respectivas revisiones médicas.

El derrumbe del pasado miércoles produjo un deslizamiento de tierra que dejó prisioneros a los tres mineros a unos 27 metros debajo de la superficie. De acuerdo con declaraciones de Carolina Galindo, funcionaria de la Agencia Nacional de Minería, las razones del incidente se debieron a que “un coche falló y tumbó las puertas del inclinado”.

“Todo pasó por el rodamiento de un carro que subía con la carga. Se soltó la guaya y el vehículo se devolvió. El fuerte movimiento causó un derrumbe”, explicó por su parte la secretaria departamental de Minas y Energía, Olga Ramírez.

Este incidente ocurrió alrededor de la 8:30 de la noche del pasado 19 de agosto en la mina conocida como “El Alisal”, en el sector de Gacheneque en Lenguazaque, Cundinamarca.

El rescate de estos mineros reviste de especial emotividad porque hace tan solo 10 días se conoció la triste noticia del fallecimiento de otro grupo de mineros que quedaron enterrados tras un derrumbe en otra mina ubicada en Sogamoso (Boyacá).

En ese caso los organismos de socorro duraron una semana entera trabajando por rescatar a los mineros, pero las condiciones geográficas de la mina, las violaciones a los protocolos de seguridad que tenía su diseño, y las condiciones climáticas, dificultaron grandemente las operaciones de rescate, impidiendo si quiera que pudieran establecer un contacto con los trabajadores sepultados por los escombros.

Al final rescataron los cuerpos sin vida de los tres hombres y la mujer que el pasado 7 de agosto había queda enterrados.

La noticia del rescate en Lenguazaque, sin embargo, ha sido motivo de celebración, no solo para las familias de los rescatados, sino para las autoridades colombianas que pudieron impedir otra tragedia en una mina durante el mes de agosto.

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