Los bares y restaurantes más emblemáticos de Sevilla que no te puedes perder si vas de visita, según el propio Ayuntamiento

Décadas de historia a sus espaldas, respeto por las recetas tradicionales, los mejores productos e ingredientes o un ambiente local sin excentricidades ni innecesarias innovaciones. Es difícil asegurar qué es exactamente lo que define a un bar o restaurante emblemático, aunque lo que sí está claro es que ciudades como Sevilla están repletas de ellos.

Este verano, el Ayuntamiento de Sevilla ha concedido el título de ‘Establecimiento Emblemático’ a cuatro bares de la ciudad hispalense, emblemas gastronómicos que se unen así a una lista de más de una docena de lugares donde degustar Sevilla en su versión con más solera. Bar Dueñas, Casa Robles, Bodeguita Mariano Camacho y Bar Guadiana han sido los grandes afortunados, locales de hostelería a los que se suman también este año otros tres comercios, la Joyería Reyes, el Hotel Inglaterra y Populart, un local de jazz en directo.

“No es algo simbólico, sino que refuerzan el tejido comercial tradicional y preservan parte de nuestra identidad cultural e histórica”, aseguraba el delegado de Economía y Comercio, Álvaro Pimentel, sobre esta prestigiosa rúbrica. “Estos negocios no son sólo puntos de venta. Son espacios con alma que llevan décadas, incluso siglos, dando vida a nuestros barrios, generando empleo y transmitiendo valores de cercanía, esfuerzo y compromiso con Sevilla”.

Locales emblemáticos para comer y beber en Sevilla

En total, son ya 46 los establecimientos hispalenses que gozan de este reconocimiento, concedido paulatinamente desde la primera edición celebrada en 2020. De este cerca de medio centenar de comercios premiados, 14 se dedican al negocio de la hostelería, bares y restaurantes que bien merecen una visita en caso de viajar hasta la capital andaluza. Estos son todos los establecimientos reconocidos por el Ayuntamiento de Sevilla:

• Confitería La Campana (C. Sierpes, 1, 3, Casco Antiguo): esta emblemática confitería del centro sevillano, abierta desde 1885, sirve las torrijas más famosas de toda la ciudad. Otras de sus especialidades son los merengues, las tortas de polvorón, las lenguas de almendra o las yemas sevillanas.
• Bodegas Díaz Salazar (C. García de Vinuesa, 20, Casco Antiguo): fundada en 1908 por la familia Díaz-Salazar como depósito de vinos, pronto adquirió el carácter de despacho y se convirtió en uno de los establecimientos más emblemáticos de la ciudad. Hoy en día es un bar de tapas reformado, con una amplia bodega de más de 40 tipos de vinos, procedentes en su mayoría del entorno de Jerez.
• Patio San Eloy (C. San Eloy, 9, Casco Antiguo): este rincón emblemático es conocido por sus tapas, vinos y cerveza, todo ello servido en el establecimiento desde 1975. Sus montaditos y sus tartas vegetales son las grandes estrellas de este bar.
• Bar Europa (C. Siete Revueltas, 35): fundado en 1925 y restaurado en 1999, este mítico bar del centro ofrecía gran variedad de tapas
• Casa Vizcaino (C. Feria, 27, Casco Antiguo): fundado en los años 30, esta casa es famosa por su cerveza Cruzcampo fría y su barra de azulejos azules y blancos, en la cual se sirven a diario tapas de tradición sevillana para acompañar las cañas.
• Casa Morales (C. García de Vinuesa, 11, Casco Antiguo): longeva taberna familiar fundada en 1850 y ubicada a la vera de la Catedral de Sevilla, se especializa en chacinas, salazones y guisos caseros, servidas con Jerez y vinos españoles.
• Entrecárceles (Cjón. Faisanes, 1, Casco Antiguo): fundada en 1894, esta taberna ocupa la que fuera la sala del Cuerpo de Guardia de la antigua Cárcel Real de Sevilla, donde estuvieron presos personajes históricos como Mateo Alemán, Alonso Cano o Miguel de Cervantes.
• Restaurante El Cairo (C. Reyes Católicos, 13, Casco Antiguo): a escasos metros de la Real Maestranza y del río Guadalquivir, este restaurante comenzó a funcionar en 1977, convirtiéndose en todo un emblema de la cocina andaluza. Su especialidad, los pescados y mariscos del litoral andaluz.
• El Rinconcillo (C. Gerona, 40, Casco Antiguo): es el bar más antiguo de Sevilla, con una historia que se remonta a 1670, y sirve tapas y platos que salvaguardan la esencia de la cocina tradicional andaluza-mozárabe.
• Las Teresas (C. Santa Teresa, 2, Casco Antiguo): con 150 años de historia a sus espaldas, Las Teresas se encuentra en el casco antiguo de la ciudad y nació como ultramarinos, para luego convertirse en taberna. Pescado frito, garbanzos con espinacas, otros guisos y salazones.
• Bar Dueñas (C. Gerona, 3, Casco Antiguo): una casa de comidas abierta desde el año 1973 de la mano de la familia Boa. Especializada en cocina tradicional andaluza, su carta da especial protagonismo los guisos y a sus famosas albóndigas, elaboradas con una salsa cuya receta tiene más de 50 años.
• Casa Robles (C. Álvarez Quintero, 58, Casco Antiguo): este elegante restaurante se especializa en alta cocina andaluza, con una historia que se remonta a 1954 y con el rabo de toro y los arroces como sus principales exponentes.
• Bodega Camacho (Pl. Pumarejo, 3C, Casco Antiguo): fundada en 1949 y ubicada en la céntrica plaza del Pumarejo, esta bodega conserva la estética de las tabernas sevillanas y es famosa por recetas tan tradicionales como la de sus caracoles.
• Bar Guadiana (C. Guadiana, 29, A, Casco Antiguo): en este emblemático local, el tapeo se sirve de manera ininterrumpida desde primera hora de la mañana hasta la una de la madrugada, opciones que van desde montaditos hasta cazuelas de espinacas con garbanzos, carrillada o ‘laterío’ de conservas.