La tasa de ahorro de los hogares cae al 12% en el tercer trimestre, la menor en casi dos años

El índice de acumulación de recursos en familias españolas descendió durante el periodo julio-septiembre, alcanzando su nivel más bajo en casi dos años, mientras aumenta la demanda de fondos, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística

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El requerimiento de financiación por parte de los hogares en España se ha incrementado notablemente, sumando 7.537 millones de euros durante el tercer trimestre, una cifra considerablemente superior respecto a los 3.588 millones del mismo periodo en 2024. Según informó este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE), este aumento en la necesidad de fondos se produce en un contexto de descenso en la capacidad de ahorro de las familias.

El INE detalló que, en valores desestacionalizados, la tasa de ahorro de los hogares españoles descendió en este periodo al 12% de su renta disponible bruta. Esta cifra representa una disminución de una décima con respecto al trimestre anterior y una reducción de 1,1 puntos porcentuales en comparación con el tercer trimestre de 2024. La tasa registrada supone el nivel más bajo dentro de la serie ajustada desde el cuarto trimestre de 2023, cuando el porcentaje se situó en 11,6%.

En los datos publicados por el INE, también se destaca que, si se toma la información sin ajustar por efectos estacionales, el ahorro de los hogares ha caído hasta situarse en el 4,6% de la renta disponible bruta, frente al 6% del mismo periodo del año previo. De acuerdo con la información difundida por el organismo estadístico, este retroceso en la proporción de recursos acumulados implica un menor margen de maniobra para las familias a la hora de afrontar gastos imprevistos o realizar nuevas inversiones.

El aumento de la necesidad de financiación coincide con un entorno económico que afecta la capacidad de las familias para reservar parte de sus ingresos. El saldo negativo en las cuentas domésticas, después de incluir las transferencias de capital correspondientes a este sector, subraya la intensidad de la caída en la acumulación de recursos. El medio INE indicó que estos resultados marcan una tendencia de reducción en el ahorro disponible, evidenciando un cambio significativo respecto a los periodos anteriores.

En la serie ajustada por estacionalidad, la evolución del indicador sugiere que tanto la confianza como la estabilidad financiera de los hogares han registrado una disminución. El descenso continuo en la tasa de ahorro, según consignó el Instituto Nacional de Estadística, refleja el impacto combinado de factores como la evolución de los precios, la variabilidad en los ingresos y las políticas fiscales que inciden en la economía doméstica española.

El medio INE hizo énfasis en las diferencias entre los datos ajustados y los no ajustados de la tasa de ahorro, remarcando que la lectura desestacionalizada resulta esencial para detectar cambios estructurales y distinguirlos de las fluctuaciones habituales a lo largo del año. Utilizando ambas métricas, el informe mostró que el poder de ahorro de los hogares españoles ha perdido fuerza en comparación con tiempos recientes.

La dinámica registrada durante el trimestre julio-septiembre, según publicó el Instituto Nacional de Estadística, apunta a un contexto en el que las familias deben recurrir en mayor medida a la financiación externa o realizar ajustes en su consumo ante la menor capacidad de ahorro. Esta situación, reflejada en los indicadores expuestos, condiciona el comportamiento económico de los hogares y puede influir en las perspectivas de gasto e inversión a corto y medio plazo.