Belenguer, la gestión eficaz del fútbol portugués

Madrid, 26 nov (EFE).- El español David Belenguer es propietario y presidente del CD Tondela, equipo que cumple su sexta temporada en la Primeira Liga portuguesa. Desde finales de 2018, gestiona un club modélico y humilde en una ciudad de sólo 14.000 habitantes, situada en la Región Centro de Portugal, a 135 km de la frontera salmantina, y a otros tantos de Oporto.
Exfutbolista, MBA en dirección de entidades deportivas de la Universidad Europea, entrenador UEFA Pro, y titulado como director deportivo por la RFEF, ha sabido fusionar empresa y sentimientos, en un equipo que camina cómodo en la tabla. Un desafío heroico y profesional.
“El fútbol se ha convertido en un negocio, pero es un negocio en el que gestionas los sentimientos de mucha gente. Y eso debe condicionar la toma de decisiones en algunos momentos. Cuando llegué a Tondela, lo tuve claro desde el inicio. Hemos conectado y la sinergia ha funcionado”, afirma a Efe, David Belenguer, mientras se toma un café con leche en el hotel SJ, situado justo enfrente del estadio Joao Cardoso, una hermosa bombonera de color verde y amarilla, que da lustre a la ciudad.
Es un privilegio para los habitantes de Tondela poder ver a ídolos del Benfica, Oporto o Sporting, al menos una vez al año. 5.000 espectadores pueden presumir de ver al equipo de su tierra, mirar cara a cara a los grandes expresos millonarios del fútbol luso.
David Belenguer jugó en el Getafe y en el Real Betis, entre otros clubes. Conoce los 360 grados del fútbol. Futbolista, ejecutivo, director deportivo. Su agenda vale mucho dinero. A golpe de teléfono habla con los agentes números uno del mundo.
Conoce al minuto el salario de los futbolistas de cualquier equipo del paisaje mundial. Su red de contactos recorre el planeta. Rastrea con finura el mercado y la captación es una de sus grandes fortalezas. Antes deaterrizar en Tondela, puso en valor al Granada CF, y con su dirección empresarial, pasó de Segunda división a jugar la Liga Europa en dos temporadas.
En esa misma época, además del conjunto andaluz supervisaba otros dos clubes: el Parma, que pasó entonces de la Serie C a la Serie A italiana, y el Chongqing Lifán, de la Superliga China.
“En el CD Tondela he podido plasmar todas mis ideas. Desde que era futbolista soñé con un proyecto así. Un escenario donde poder delegar, un club organizado, dividido en distintas secciones, contando con los mejores profesionales. La parcela deportiva, el márketing, la comunicación, es un placer poder dirigir un club de fútbol con ilusión, con pasión y con determinación”, subraya el presidente del club portugués.
Miguel Angel Méndez es su hombre de confianza. Periodista, experto en comunicación, ha sido la persona que ha iluminado las instalaciones. Modernizó poco a poco cada una de las dependencias, desde las oficinas al vestuario, sin olvidar el gimnasio y todas aquellas zonas que conforman el entorno del futbolista. Eso, y tematizar todo el estadio, armonizar a los patrocinadores, y dotarlo de una identidad y una estética acorde a la marca que se quiere construir en este nuevo CD Tondela.
“Es una experiencia vital maravillosa. David lo tenía claro desde el principio: teníamos que trabajar para conseguir un club sostenible, moderno, organizado, pero siempre, cuidando las tradiciones y valores de un equipo modesto pero orgulloso”, relata Méndez, en uno de los salones del hotel, que se ha convertido ya en su nueva casa, mientras ve al lado de David Belenguer uno de los partidos de la Primeira Liga en la televisión portuguesa.
Para Belenguer, su gran objetivo ahora es ver pronto ya construida la nueva Ciudad deportiva, el gran proyecto del CD Tondela desde siempre, un reto ilusionante, donde el club debe crecer alrededor de su academia. El movimiento de tierras en esos 40000 metros cuadrados ya ha comenzado a las afueras de la ciudad, a la que se adaptó desde el primer día su entrenador, Pako Ayestarán, durante muchos años, ayudante de Rafa Benítez.
Ayestarán es feliz en Tondela. Esta aventura le recuerda la que vivió con el Extremadura con Benítez en aquellos años inolvidables en Primera división, precisamente con Belenguer como uno de los referentes en aquella defensa. Pako vive al lado del campo. Acude a entrenar en bicicleta. Es un proyecto claramente dirigido a deportistas de verdad.
“Tondela es un lugar muy tranquilo, los jugadores saben que llegan a un entorno donde no hay ruido, donde se puede trabajar con profesionalidad, en un ambiente sano y agradable”, destaca David Belenguer, quien pondera la importancia de los valores.
Elementos intangibles, igual de necesarios en una empresa que los grandes nombres. El club, por ejemplo, cuida los detalles con cariño. Su utillero es un personaje entrañable. Se llama Rolando da Cruz. Su imagen luce a tamaño gigante en la puerta de acceso al recinto donde Rolando mima la ropa y las botas de sus jugadores desde 1982.
Como si fuera un actor de cine o un jugador de élite, el póster de Rolando a la entrada del cuarto de lavandería y utillaje, da empaque a un empleado modélico que explica a los visitantes la magia y satisfacción que le proporciona cuidar del material de sus chicos. Desde los profesionales a los infantiles. Rolando da Cruz es un sabio y da lecciones de vida todos los días. Con tipos como Rolando, el fútbol recupera el fútbol de toda la vida.