Denunció que entraron a robar a su casa y terminó preso porque vendía marihuana

Habían pasado unos minutos de las dos de la mañana del jueves 22 de febrero último. Los vecinos del PH de la calle Emilio Lamarca al 1600, del barrio Santa Rita de la ciudad, escucharon gritos, una discusión, ruidos de vidrios rotos y el estampido de un tiro. Llamaron al 911 y salieron a la calle a ver qué pasaba. Fue el jueves 22 de febrero a la madrugada.

Allí se encontraron con J.G., a quien conocían. Le sangraba la cabeza, y mientras trataba de parar la hemorragia con una toalla, les contó que lo habían asaltado. Que dos hombres habían entrado a su casa y le habían robado.

Llegaron varios patrulleros de la Policía de la Ciudad y la ambulancia del SAME. Lo llevaron al Hospital Vélez Sarsfield, donde lo curaron. Tuvo un traumatismo de cráneo sin pérdida de conocimiento.

La novia de J.G. les contó a los policías que cuando estaba en el baño escuchó gritos y vio a dos hombres que mediante amenazas con armas de fuego le robaron a su pareja. J.G. relató que le robaron 25.000 pesos y que le pegaron un culatazo. La primera historia terminó allí.

Mientras J.G. estaba en el hospital, su madre y dos testigos acompañaron a los policías que ingresaron al departamento para tratar de determinar lo que había sucedido. J.G. le había dado las llaves a su madre para que se hiciera la diligencia policial.

Ahí se sorprendieron tanto policías como testigos del procedimiento, porque en medio del desorden que, se cree, produjo la pelea con los dos ladrones, hallaron 15 plantas de marihuana, fertilizantes y lámparas necesarias para el cultivo.

Además había balanzas digitales, envoltorios con picadura de marihuana, un pedazo compactado de marihuana y un ladrillo de marihuana envuelto en cinta plástica.

Los policías de la Ciudad que habían iniciado la investigación por el robo sufrido por J.G. cambiaron el enfoque del caso luego del hallazgo: consultaron al juez federal de turno Marcelo Martínez De Giorgi, quien ordenó que se decomisara lo encontrado dentro de la casa.

El juez también dispuso la detención de J.G. por el delito de tenencia de drogas para su comercialización. Aún queda por determinar si el robo denunciado por J.G. tuvo alguna relación con la venta de marihuana. Martínez De Giorgi tiene que definir la situación procesal de J.G., quien además de haber sido robado y de haber recibido un culatazo, terminó detenido.