Los primeros logros del bebé: la sonrisa, gateo, palabras y pasos

Son momentos súper especiales para la vida de toda la familia. Te contamos sus desarrollos y posibles tiempos

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La sonrisa será una de las primeras habilidades que notarás en tu bebé – (Foto: Archivo Atlántida / Para Ti Mamá)
La sonrisa será una de las primeras habilidades que notarás en tu bebé – (Foto: Archivo Atlántida / Para Ti Mamá)

El día que miraste a tu bebé y te respondió con una sonrisa no podías creerlo. ¡Era su primera respuesta hacia vos! Este logro y los que vendrán serán un hito en la vida de ambos.

"Un bebé necesita ser sostenido amorosamente por un adulto para desarrollarse y alcanzar los logros madurativos progresivamente acordes a su edad", explica el pediatra Mario Elmo. Y destaca que de este encuentro entre el psiquismo de un bebé y el de un sujeto maduro e inmerso en la cultura, definido como vínculo, dependerá el desarrollo de las capacidades psíquicas, motrices y emocionales del bebé.

Todos los días algo nuevo…

El profesional comenta que el desarrollo tanto sea en el área motriz, como en el personal–social y en la comunicación, consiste en una gran variedad de adquisiciones, siendo algunas de ellas tomadas como parámetros de observación y valoración del mismo, por su significado psicobiológico y social.

"Con el correr de los días y meses el pequeño irá adquiriendo habilidades progresivas de mayor complejidad, coordinación y con componente voluntario. Estos logros cuando se visibilizan generan satisfacción tanto en el bebé como en los adultos cuidadores, y son elementos de valoración clínica del adecuado desarrollo" explica el especialista, quien indica que esos logros son:

-La sonrisa: Será una de las primeras habilidades que notarás en tu bebé y suele lograrse entre el primer y segundo mes de vida. El Dr. Elmo sostiene que la sonrisa constituye el primer hito de la comunicación social y es generadora de un intercambio intenso y festivo con los adultos.

-Las primeras palabras alrededor de los 12 meses. El Dr. Elmo explica que éstas son precedidas por otros logros, no menos importantes, como son el balbuceo monosilábico del sexto mes, la inhibición en respuesta al "no", el silabeo repetitivamente ma-má y pa-pá, entre otros logros.

"Las primeras palabras reales se adquieren e incorporan en función del entorno y del juego e interacción verbal con los padres, identificando progresivamente objetos y personas" comenta el especialista.

-Los primeros pasos: Se logran aproximadamente a los 12 meses, también implica un complejo proceso de maduración de todo su sistema osteomuscular y articular, empezando con el sostén de la cabeza a partir del segundo mes, el logro de sostenerse sentado al sexto y luego parado sobre sus pies.

Posteriormente, a los 10 meses, logra sentarse solo y mantenerse indefinidamente en esa posición sin soporte, gatear y luego pararse y sostenerse con apoyo.

"Llegando al año se para, se sostiene solo y da sus primeros pasos tomado de la mano o con algún apoyo. Caminar solo es un logro socialmente muy celebrado pero es la culminación de todo ese proceso previo que le sirvió de estructura y desarrollo madurativo para alcanzarlo" aclara el profesional.

Los primeros pasos se logran aproximadamente a los 12 meses – Foto: Archivo Atlántida / Para Ti Mamá
Los primeros pasos se logran aproximadamente a los 12 meses – Foto: Archivo Atlántida / Para Ti Mamá

Juntos y a la par

El Dr. Elmo manifiesta que el rol de los adultos es esencial en el camino del aprendizaje de nuevas habilidades. ¿De qué forma? A través del acompañamiento, la mirada atenta y afectiva, mostrándoles "el mundo" que los rodea, ofreciéndoles objetos para que los explore y descubra, jugando e interactuando físicamente con abrazos, "vuelos", cosquillas, entre otras formas.

"El tiempo dedicado, el afecto y el aprendizaje socializador de normas de seguridad y respeto hacia los otros forman parte también de los roles de los padres y adultos cuidadores que consolidan el adecuado desarrollo del niño en todas las áreas" explica el especialista.

Y recalca que es importante organizar un espacio físico adecuado que permita un desplazamiento autónomo desde las primeras etapas del gateo, sin riesgos de accidentes, caídas de altura, heridas, quemaduras, intoxicaciones, entre los mas frecuentes.

Por Gloria Kaspar / Asesoró: Dr. Mario Elmo, Pediatra y Secretario Consultor del Comité Nacional de Pediatría Ambulatoria de la Sociedad Argentina de Pediatría, M.N.: 57.220.

 

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