La casa de París donde Porfirio Díaz vivió tras su exilio

El político se fue de México un 26 de mayo de 1911 para nunca volver

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La casa de Porfirio Díaz
La casa de Porfirio Díaz en París (capturas de pantalla: Youtube/@CristobalPorEuropa)

Luego de que la historia de México y Porfirio Díaz terminara para siempre, el hombre cambió su vida por completo, y dejó las excentricidades del país para pasar sus últimos días viviendo en una casa ubicada en una lujosa y exclusiva zona de París.

El general Porfirio Díaz abandonó México a los 80 años de edad, un 26 de mayo de 1911, partiendo del puerto de Veracruz con destino a Europa, como consecuencia del movimiento revolucionaron cuya cabeza fue Francisco I. Madero. Tras su exilio, quien fuera presidente de México por varias décadas, soñó siempre con volver al país.

Aunque su nueva casa no tenía nada que ver con el ostentoso estilo de vida que acostumbraba tener en México, el político vivía bastante bien y con suficientes comodidades para no tener preocupaciones económicas en los últimos años de su vida. Su hogar en Francia era, en comparación con las mansiones a las que estaba acostumbrado, más bien pequeño y modesto.

Tenía dos cuartos grandes, varias habitaciones para sus empleadas domésticas (quienes eran mujeres originarias de Oaxaca que lo habían acompañado desde México), una sala principal y algunos cuartos más. Este sitio se encuentra en la Avenida Foch, que por ese entonces tenía el nombre de Avenida del Bosque, dentro del exclusivo distrito 16 de París.

La casa de Porfirio Díaz
La casa de Porfirio Díaz en París estaba muy cerca del Arco del Triunfo (AP Foto/Michel Euler)

Su casa estaba en el número 26 de dicha avenida, muy cerca al famoso Arco del Triunfo, uno de los monumentos nacionales más importantes de todo Francia, y uno de los puntos turísticos más visitados en París. Muy cerca de allí, se encuentra un parque cuya vegetación, según cuentan algunos entendidos en el tema, le recordaba a Porfirio Díaz los verdes jardines del Castillo de Chapultepec, por lo que solía dar paseos.

Según historiadores, aunque era un hogar no precisamente barato, era más bien austero en comparación a las mansiones y castillos que acostumbraba en México. Este lugar, no era de él, sino que pagaba renta con el dinero que tenía de las acciones del Banco de México y de Londres.

Aunque este era su hogar, Porfirio Díaz solía viajar por todo el mundo junto a su esposa específicamente por los países más importantes del continente de Europa, como España, Italia, Austria, Suiza y Alemania; incluso, otros recónditos lugares en el globo terráqueo como Egipto. No obstante, jamás volvió a México, la tierra que lo vio nacer.

Foto del ex mandatario en
Foto del ex mandatario en su exilio en Paris

Aunque su casa de París era bastante cómoda, se cuenta que Porfirio Díaz y su esposa siempre soñaron con volver a su país, y estaban a la espera de que los ánimos se calmaran y la situación política fuera otra; sin embargo, esto nunca sucedió.

Se dice, que los últimos días del presidente de México fueron bastante duros para su familia, pues parecía distante y hablaba incoherencias que apuntaban a Oaxaca, estado de la República del que era originario.

Al morir, Porfirio Díaz fue sepultado en una iglesia de París llamada Saint Honoré l’Eylau, su familia deseaba que el dictador volviera a México para descansar en tierras aztecas; sin embargo, esto no fue posible, pues el gobierno en turno se negó. Por ello, en el año de 1921, Porfirio Díaz fue exhumado y trasladado al cementerio de Montparnasse, donde es visitado por curiosos todos los días.

En dicho cementerio descansan otras importantes figuras de la histora, como Simone de Beauvoir, Julio Cortázar, Carlos Fuentes y hasta el famosos filósofo Jean-Pául Satre.

Porfirio Díaz fue una importante figura histórica, odiado por algunos y querido por otros. Su fama ha trascendido con el paso del tiempo y es una pieza clave para los estudiosos de la historia de nuestro país.