El aumento de temperaturas y los eventos atmosféricos, factores de riesgo para la salud

Valencia, 25 may. El aumento de las temperaturas, con olas de calor nocturno cada vez más prolongadas, y los eventos atmosféricos extremos vinculados al proceso del calentamiento global tienen una afección directa en la salud humana porque son factores de riesgo ante la proliferación de vectores de transmisión de enfermedades tropicales y el agravamiento de otras como las respiratorias.

Así se ha puesto de manifiesto en la primera jornada del IV Congreso de Cooperación Internacional de la Organización Médica Colegial (OMC), que reúne en Valencia a expertos nacionales e internacionales para abordar la relación entre el cambio climático y la salud global, ya que cada año mueren más de doce millones de personas por la falta de salud ambiental.

CON EL TIEMPO JUSTO PARA EMPEZAR A TRABAJAR

El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, quien ha hablado sobre "Personas y la salud global en el siglo XXI", ha subrayado que, aunque estamos "ya con el tiempo muy justo para empezar a trabajar", el objetivo es conseguir que el planeta "nos deje quedarnos un poco más en él".

La velocidad con la que se ha multiplicado la población y la mayor producción de los recursos que ésta necesita ha generado un cambio climático "que está impactando gravemente en la salud y en los riesgos que podemos tener en el futuro" en una población más frágil por el incremento de la esperanza de vida, ha dicho.

También ha indicado que la movilidad de las personas y las mercancías es constante a nivel mundial y la transmisión de los patógenos de una persona a otra "se está produciendo constantemente en todas las partes del mundo y eso no se va a poder evitar".

Tras indicar que el cambio climático "afecta a todas las zonas del mundo", ha señalado que ha llegado "en muy pocos años. En una o dos décadas hemos tenido un impacto y una evolución del clima que está realmente afectando a nuestro país, sobre todo a la cuenca mediterránea".

Simón ha abogado por conseguir que los actuales tres sistemas sanitarios -Primaria, hospitalaria y salud pública- pasen a ser solo uno y entendamos que trabajar todos juntos impacta en la salud global.

LO MÁS PREOCUPANTE, EL CALOR NOCTURNO

Por su parte Jorge Olcina, catedrático de Análisis Geográfico Regional en la Universidad de Alicante (UA) y responsable del Laboratorio de Climatología, ha señalado que el cambio climático puede afectar a la salud de tres maneras.

Una de ellas es el crecimiento progresivo de las temperaturas, "que va cambiando ecosistemas y es un factor de riesgo ante posibles vectores de transmisión" de enfermedades tropicales o subtropicales.

En segundo lugar, los cambios bruscos en el tiempo alteran el movimiento de las masas de aire y hacen aparecer las infecciones respiratorias o gripales de manera más frecuente. Y el tercer elemento, "quizá el más preocupante", son los eventos atmosféricos extremos vinculados al proceso de calentamiento.

Según Olcina, "lo más preocupante de las olas de calor es el calor nocturno" y ha indicado que cada vez son más prolongadas y afectan a la salud porque las víctimas mortales que se producen por las olas de calor "son por las mínimas muy altas, no por la máximas".

"Hay que diseñar de nuevo las ciudades, adaptarlas al cambio climático, con más zonas verdes y de sombra, con un alcantarillado que pueda asumir la lluvia torrencial", ha dicho el experto.

Tomás Cobo, presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) y de la Fundación para la Cooperación Internacional (FCOMCI), ha señalado que hay enfermedades vectoriales como el Zica, la malaria o el dengue que ya existían en áreas específicas y que ahora se ven en zonas donde nunca se habían visto como consecuencia del cambio climático y del movimiento de masas de la población.

Según Cobo, debido a los golpes de calor, se están produciendo más problemas respiratorios: las alergias "se están disparando" y el impacto de temperaturas tropicales durante la noche, que no dejan descansar con normalidad, tiene también un impacto en el rendimiento y salud de la población. EFE

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