Las fuertes lluvias que han azotado al estado Querétaro afectaron gravemente uno de sus principales sitios turísticos: la Isla de Tzibanzá, ubicada en el municipio de Cadereyta de Montes.

Y es que esta pequeña y paradisiaca isla artificial se inundó en las últimas horas a causa del desfogue de la Presa Zimapán, por lo que tuvo que ser desalojada desde la noche de este 20 de septiembre a fin de garantizar la integridad tanto de los turistas como de los propios trabajadores.

Lugareños compartieron este martes a través de redes sociales fotos y videos donde se observan las áreas verdes bajo el agua; así como afectaciones en palapas y el restaurante, aunque las cabañas tipo safari permanecen a salvo hasta el momento.

Alejandra Pazarán, coordinadora de Protección Civil de Cadereyta de Montes, detalló en entrevista para AlertaQro que las afectaciones se concentran en cuatro palapas, alberca y las cisternas.

Pazarán indicó que desde hace diez años no se incrementaba el nivel del agua en esa isla, ante la sequía que aqueja al estado, aunque anteriormente estos hechos eran normales.

Al momento, se desconoce el saldo de las afectaciones en este atractivo turístico.

Asimismo, la funcionaria mencionó que las comunidades de Vega de Ramírez y La Mora están incomunicadas vía terrestre por la creciente del caudal del río, pero aseguró que están en contacto telefónico con los pobladores y les han enviado víveres.

Ayer, la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) emitió un aviso a cuatro estados del país ante los desfogues de la presa Zimapán y la posibilidad de que afecte a comunidades ribereñas.

De acuerdo con la dependencia federal, el aviso se dio a los estados de Veracruz, San Luis Potosí, Querétaro e Hidalgo, estas dos entidades que en los últimos 13 días han enfrentado inundaciones por el desbordamiento de ríos y presas.

Un campamento ecoturístico

Este santuario de descanso rodeado de naturaleza se formó en la década de los noventa, cuando la Comisión Federal de Electricidad (CFE) edificó la Presa Zimapán.

Con una superficie de 23 kilómetros cuadrados y una altitud de 1,870 metros sobre el nivel del mar, cuenta con 12 cabañas de lujo, totalmente equipadas y hasta para cuatro personas. Para poder alojarte en una de ellas es necesario reservar con al menos dos meses de anticipación.

Según sus redes sociales, el costo por noche es de 1,200 pesos para adultos y 700 para niños menos de 12 años. Incluye las tres comidas estilo buffet, estacionamiento y traslado a la isla.

Solo se puede llegar a través de lancha durante un recorrido de cinco minutos. Una vez ahí podrás disfrutar de actividades como pesca, renta de kayaks y paseos en bote. O bien, darte un chapuzón en su alberca y realizar una fogata debajo del cielo tapizado de estrellas.

También está la opción de contratar un recorrido guiado a los manantiales de Taxhidó, que ofrece aguas cristalinas a una temperatura de 35 grados, ideal para relajarse, así como el Pueblo Mágico de Cadereyta o las Grutas de la Esperanza.

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