El gobierno de Ecuador inició las pruebas de generación eléctrica en la barcaza flotante EMRE BEY, contratada a la empresa turca Karpowership para enfrentar la actual crisis energética del país. Este proceso, que empezó el 8 de septiembre de 2024 en Guayaquil, es parte de una serie de medidas implementadas por el presidente Daniel Noboa y su administración con el propósito de evitar los cortes de electricidad y fortalecer al sistema energético nacional durante la crisis que ya ha provocado distintos periodos de racionamientos.
Según información oficial, la barcaza, que aportará 100 MW al Sistema Nacional Interconectado (SNI) por un periodo de 18 meses, fue instalada temporalmente en el muelle de ex Ecuagran, en el río Guayas. Esta ubicación fue elegida debido a las dificultades técnicas encontradas para estabilizar el barco en su punto original, la subestación Las Esclusas. Las pruebas están coordinadas por la Corporación Eléctrica del Ecuador (CELEC EP) y el Centro Nacional de Control de Energía (CENACE), y se estima que la operación comercial de la barcaza comience entre el jueves o viernes de esta semana, una vez concluidas las pruebas técnicas.
El viceministro de Electricidad y Energías Renovables, Rafael Quintero, informó que el anclaje temporal de la barcaza en el muelle de ex Ecuagran durará 90 días, mientras se completan los trabajos para el acoderamiento definitivo en Las Esclusas, de acuerdo a lo publicado en un boletín oficial. Quintero también aseguró que los costos adicionales de esta reubicación no serán asumidos por el Estado, sino que serán cubiertos por la empresa contratista, lo que garantiza que las finanzas públicas no se verán afectadas. Según CELEC EP, el despacho de energía se realizará a través de la subestación Las Esclusas, con un voltaje de 138 mil voltios.
Este proyecto es parte de un plan más amplio que busca incorporar 341 MW adicionales al sistema eléctrico del país. De estos, 100 MW provendrán de generación flotante como la barcaza EMRE BEY, mientras que el resto se generará mediante plantas térmicas en El Salitral, Esmeraldas y Quevedo. Para enfrentar la crisis energética de manera más sostenible a largo plazo, el Ejecutivo ha destinando aproximadamente USD 28 millones para mejorar la infraestructura eléctrica. En los próximos meses, el gobierno espera lanzar una licitación para agregar 800 MW más de potencia al sistema, lo que permitirá cubrir el déficit energético de 1080 MW estimado por CENACE.
En paralelo a estas medidas, el presidente Noboa también anunció un paquete de alivio económico que incluye la exoneración total del pago de las planillas eléctricas de diciembre 2024, enero y febrero 2025 para los hogares que consuman hasta 180 KWH en cada uno de esos meses. Esta medida beneficiará a unos 3,5 millones de familias en todo el país, según estimaciones del gobierno. Una familia ecuatoriana consume en promedio entre 150 y 250 kilovatios hora (KWh) mensuales dependiendo de la zona en la que se encuentre. El consumo tiende a ser considerablemente más bajo en las áreas rurales.
Los cuestionamientos de la empresa que alquiló la barcaza
Karpowership tiene una flota de más de 40 plantas de energía flotantes con una capacidad instalada combinada de más de 7.000 MW. Estos barcos están equipados con motores que pueden utilizar múltiples tipos de combustible, incluyendo gas natural licuado, para generar electricidad. La empresa se encuentra en más de 20 países en cuatro continentes, incluyendo África, Asia, el Medio Oriente y América del Sur.
La empresa turca enfrenta varias acusaciones de corrupción. En 2021, en el Líbano, Karadeniz (la empresa matriz de Karpowership) fue acusada de corrupción en los contratos y la Fiscalía libanesa pidió la incautación de las barcazas y en sancionar a la empresa con una multa de USD 25 millones, según Daily Sabah.
Según un reportaje de News24, publicado en 2021, en Pakistán, una filial de Karadeniz fue acusada de pagar a intermediarios con conexiones políticas más de USD 5 millones para cerrar un contrato de cinco años por valor de USD 565 millones. El acuerdo fue rescindido por la Corte Suprema del país en 2012, lo que desencadenó una batalla legal de siete años y una investigación de corrupción.
Asimismo, en Sudáfrica, Karpowership firmó un contrato para el suministro de energía poe 20 años en 2021 y también enfrentó acusaciones de corrupción en el proceso de licitación. En 2022, se negó la apelación de la empresa para continuar con un proyecto debido a la falta de consulta y a informes ambientales insuficientes. El gobierno Sudafricano y Karpowership negaron cualquier irregularidad en la firma de los contratos, de acuerdo a News 24.