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Pese al exceso de emisión que genera el creciente desequilibrio fiscal, las expectativas de inflación de las familias continúan desacelerándose, por la restricción presupuestaria que impone una economía que no crece y que en muchos casos destruye puestos de trabajo.
"La inflación esperada por la gente para los próximos doce meses cae 5 puntos porcentuales a 25%, según la media de las respuestas. Aun siendo una cifra elevada, es el nivel más bajo desde febrero 2012. Según la media, las expectativas caen 2,8 puntos porcentuales respecto de la medición de junio, y se encuentran en 27,7%", indica el Centro de Investigación en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella.
El trabajo de la casa de altos estudios indica que "desde diciembre de 2008, sólo hubo un mes (mayo 2015) en donde el promedio estuvo por debajo del nivel actual".
La inflación esperada, en promedio, cae para las tres regiones: marcó 28,4% para el Gran Buenos Aries (2,8 p.p. en comparación a junio), 27% para el interior del país (3,2 p.p.), y 26,6% para Capital Federal (2,2 puntos porcentuales).
Los sectores de bajos ingresos redujeron sus expectativas de inflación a 26,6%
El sondeo hecho para la UTDT por parte de Poliarquía Consultores sobre 1.209 casos detectó que en términos de ingreso los sectores más postergados proyectan una baja de 4,3 p.p. en sus expectativas de inflación, mientras que para los más favorecidos el descenso aparece más acotado: 1,6 puntos porcentuales. De esta forma, la inflación esperada en promedio se ubica en 26,6% para los primeros y en 27,8% para los segundos.