El verano es la época de las ansiadas vacaciones, de detener la vida por momentos y disfrutar del merecido descanso. Sin embargo, estas expectativas no siempre se cumplen y para muchas personas es realmente difícil, si no imposible, desconectar del trabajo.
La dificultad para dejar atrás las responsabilidades laborales y el acceso constante a dispositivos electrónicos puede impedir que el tiempo libre cumpla su función reparadora, haciendo que a la vuelta nos sintamos más cansados y frustrados. No obstante, existen algunas estrategias prácticas y a nuestro alcance que nos ayudan a desconectar, facilitan la transición hacia un periodo de descanso genuino y ayudan a reducir el estrés asociado al trabajo.
Organiza tu ausencia
El primer paso para asegurar una desconexión efectiva consiste en preparar adecuadamente la salida del entorno laboral. Antes de iniciar las vacaciones, resulta fundamental informar a los compañeros sobre las tareas prioritarias que deben atenderse durante la ausencia. Comunicar de manera clara que no se estará disponible y definir en qué circunstancias se puede interrumpir el descanso contribuye a establecer límites saludables y a evitar interrupciones.
Deja el teléfono del trabajo
El uso del teléfono del trabajo representa otro obstáculo frecuente para quienes buscan relajarse. Por ello, se recomienda dejar el dispositivo laboral en la oficina. Si esto no es posible, se aconseja desactivar todas las notificaciones para evitar distracciones. Además, activar el modo avión o la función “No molestar” de forma regular ayuda a reducir la tentación de revisar mensajes o llamadas relacionadas con el trabajo.
Limita las entradas al correo electrónico
En este sentido, la gestión del correo electrónico laboral también requiere atención especial. Cerrar la sesión en la cuenta de correo y activar respuestas automáticas que informen sobre la ausencia ayuda a establecer expectativas claras. Puede ser útil designar a una persona de contacto que pueda atender asuntos urgentes durante el periodo vacacional. Para quienes encuentran difícil desconectarse por completo, establecer horarios específicos para revisar el correo puede ser una alternativa que limite la intrusión del trabajo en el tiempo de descanso.
Evita las redes sociales
Alejarse de las pantallas y las redes sociales constituye otro aspecto relevante para lograr una desconexión real. Configurar limitadores de tiempo en el teléfono móvil o en aplicaciones específicas puede ayudar a reducir el uso excesivo de dispositivos. Se recomienda considerar una desintoxicación digital, es decir, una desconexión total de las plataformas digitales, lo que puede potenciar los beneficios del descanso y favorecer la recuperación mental.
Prioriza las actividades al aire libre
Dedicar tiempo a actividades al aire libre se presenta como una de las formas más efectivas de contrarrestar el estrés laboral. El contacto con la naturaleza no solo permite alejarse de las pantallas, sino que también aporta beneficios comprobados para la salud mental. Un estudio científico publicado en 2019 en la prestigiosa revista Frontiers in Psychology reveló que pasar tan solo veinte minutos en entornos naturales puede contribuir a disminuir los niveles de cortisol, la conocida popularmente como la hormona del estrés, favoreciendo así una recuperación más completa durante las vacaciones.