Martín Salvetti: “Valoro la política como un agente de transformación”

En una entrevista que se ocupó más de su trabajo y su vocación, el Subsecretario de Educación de Lomas de Zamora habló con Patricio Zunini en el auditorio que Ticmas montó en la Feria del Libro y habló de los proyectos que lleva adelante, de la política educativa y de los programas de robótica en la infancia que desarrolla en su municipio

Compartir
Compartir articulo

“Para mí es un tipazo, me encanta hablar con Martín”, destacó Patricio Zunini para iniciar la charla con el Subsecretario de Educación de Lomas de Zamora, Martín Salvetti, quien además fue “uno de los diez maestros más importantes del mundo”; reconocido como tal en 2019 por su labor docente durante la crisis argentina del 2001.

En 2001, Salvetti, frente a la baja presencialidad y el ausentismo --imagínense en 2001, un momento donde la crisis social y económica ponía en cuestión todos los valores: la educación, el futuro, etc.--, encontró que armar una radio con sus estudiantes podía sostener a la educación. No sólo frenó la caída sino que aumentaron en un número muy significativo.

Martín —comenzó Zunini—, el reconocimiento llegó casi veinte años después. La radio sigue activa, pasaron muchísimos chicos y personalidades por la radio. Lo primero para preguntarte es que hay una relación muy misteriosa entre educación, motivación y vocación.

—Buenas tardes a todos y a todas, Patricio es un placer estar acá con vos en el stand de Ticmas, en la Feria del Libro, para mí es un honor. Primero decir que veinte años después llegó la visibilidad mediática; el reconocimiento más importante fue el de los estudiantes y lo tenía al otro día de haber dado la clase o de haber desarrollado este proyecto. Ese reconocimiento es el que para mí te lleva a la vocación docente. En 2001 no fue solo Martín Salvetti el que pensó y desarrolló ese proyecto como si fuera una locura. Junto a un equipo de docentes sabíamos que los estudiantes no venían a la escuela. Una escuela técnica que tenían que estar ocho o nueve horas en ella. Entonces había que ir a buscarlos. Había que desarrollar una estrategia innovadora para que vengan a la escuela. Entonces en esa escuela técnica donde se enseñaba a soldar y a trabajar la madera, teníamos que pensar proyectos innovadores a través del arte para que los chicos sientan que estamos desarrollando algo distinto.

» Entonces pensamos en desarrollar un taller de cine, un taller de radio escolar y un taller de bandas de música. Era un proyecto sustentado económicamente por un grupo de fundaciones; el único docente que era de la escuela era yo. El programa duraba tres años y nos ayudó a reducir en un 15% la deserción escolar en el año 2001. Una deserción escolar que siempre hubo en nuestras escuelas; no es que hubo deserción escolar en pandemia. Siempre, en la Argentina, tuvimos deserción escolar. En la crisis económica del 2001 se acrecentó. Entonces, a través del desarrollo de estos programas, pudimos lograr estrategias innovadoras para que los chicos sientan que estábamos haciendo algo distinto. Había otro interés. Creo que ahí es donde uno, con la vocación docente, descubre estrategias para despertar intereses y vocaciones en nuestros chicos. El camino que se inició en el 2001, tuvo un reconocimiento mediático y de organizaciones veinte años después, pero yo hoy y el grupo de docentes con el que trabajábamos lo teníamos cuando los chicos venían a la escuela y veíamos que los indicadores de deserción iban bajando.

Martín Salvetti en el auditorio de Ticmas en la Feria del Libro
Martín Salvetti en el auditorio de Ticmas en la Feria del Libro

¿Cuántos chicos pasaron por la radio?

— No los cuantifiqué. Pero sí me acuerdo los nombres y los apellidos de todos. Tendría que cuantificarlos, pero no soy un docente de los números. Soy un docente más de lo social. Y si me preguntás, te puedo decir nombre y apellido y capaz por qué vino y qué se logró después.

¿Cómo eran las historias de esos chicos que llegaban a la radio? ¿Cómo era el entusiasmo de esos chicos en los programas, cuando se homologó la radio y tuvieron ya una señal FM para todos?

—Lo cuento brevemente. Yo iba a arrancar la charla diciendo que soy más un docente de escuela técnica que piensa que en el hacer y en el desarrollar actividades innovadoras puede despertar esas vocaciones, o intereses y pasiones en los estudiantes. El proyecto de la radio, tengo el placer de que están acá hoy conmigo tres, cuatro estudiantes que han pasado por el proyecto que hoy son docentes. Uno de esos estudiantes... Lo voy a contar como lo charlo con él. No le ponía una ese a una palabra. Y le dije: “Tenés que ir a la biblioteca. Tenés que empezar a leer libros. Tenés que expresarte”. Y me dijo “Bueno”. Y al otro día, me lo encontré en una biblioteca popular cerca de casa. A las 72 horas me dijo “Leí un libro”. “¿Qué leíste?” “La metamorfosis, de Kafka”.

Arrancamos bien.

—Arrancamos bien. A los seis días ya llevaba leídos cuatro, cinco libros. A los veinte días me dijo: “Yo quiero hacer una entrevista”. Bien digo, “¿A quién querés hacer?”. [Mira al estudiante sentado en el auditorio] ¿Cómo se llamaba? [Se escucha de fondo: Osvaldo Bayer]. Me dijo “Es el que armó el plan de la revolución; él estuvo con Fidel y el Che. Yo lo leí, quiero entrevistarlo”. Y dije “Bueno”. Entonces yo, como docente, tenía que conseguir que Osvaldo Bayer venga a la radio de un colegio. Y Osvaldo Bayer vino a la radio de un colegio. Ese chico que no le ponía las eses a todas las palabras hoy es profe de historia, hoy trabaja conmigo en el equipo y está desarrollando el programa “Dale voz”, que es un programa de radios escolares en el Municipio de Lomas de Zamora . Y él está dialogando con los equipos directivos contándoles por qué los chicos tienen derecho a expresarse, comunicarse, a decir lo que sienten.

» Esas son pequeñas cosas que me dio ese proyecto en la radio escolar. Hay un equipo de innovación educativa en el municipio de Lomas, que son dos estudiantes que pasaron por el proyecto de la radio escolar que descubrieron su pasión --creo que lo tenían innato-- sobre las tecnologías. Y ellos soldaban los amplificadores de micrófonos, y después empezaron a meterse en electrónica. Y se empezaron a meter con los lenguajes de programación. Una hoy es una profesora del Centro de Formación profesional dando programación. Y el otro está con todo lo que es innovación y robótica, y toda la parte de multimedios en una escuela terciaria. Creo fue esa pequeña semillita de ese programa que arrancamos en el año 2001. Pensando que el arte en forma transversal podía despertar pequeñas vocaciones, pero creo que hay muchísimos chicos más que quizás hoy no tengo contacto con ellos que descubrieron pasiones y vocaciones desde el proyecto de la radio.

El proyecto de la radio es buenísimo porque fue una especie de caballo de Troya.

—Un caballo de Troya que costó que entrara. Porque cuando arrancamos con esto, yo tenía 30 años. Los profes que habían sido profes de mi escuela me decían: “Pibe qué hacés con un micrófono, qué hacés con un grabadorcito, si acá soldamos, acá laburamos la madera… tomatelá”. Yo sabía que los chicos tenían que presentarse para un futuro. Entonces la comunicación y todo teníamos que trabajarlo. Creo que eso fue muy importante.

Martín Salvetti en el auditorio de Ticmas en la Feria del Libro
Martín Salvetti en el auditorio de Ticmas en la Feria del Libro

Hay otro proyecto, que es de “Un carro por un caballo”. Te quería preguntar por el sentido ya que es un proyecto totalmente contextualizado en un aquí y un ahora, pero cómo hacen ustedes para darle un sentido pedagógico.

—No todos tenemos que saber de todo. Y más los docentes, tenemos que aprender. Yo aprendí a trabajar en equipo. Yo era jefe de área, tenía los talleres a cargo y sabía que tenía un profe muy importante en herrería y un profe muy importante en el taller de mecánica de motos, entonces nos pusimos en contacto con el Municipio por las motos que incautaba Tránsito, que a los dos años no la retiraban y era chatarra. Nosotros se las pedimos para poder restaurar. El profesor de mecánica de motos le enseñó a restaurar motos a los estudiantes, el profesor de herrería les enseñó a hacer un carro, a soldar. Y nosotros les explicamos la importancia que tenía ese carro para la Cooperativa de Cartoneros que usaba la tracción a sangre con los caballos en Lomas de Zamora.

» Entonces se lo presentamos a Martín Insaurralde como Intendente, en ese momento, que hoy es Jefe de Gabinete. Y las Cooperativas de Cartoneros empezaron a entregar a sus caballos para llevarse estas motos recicladoras que desarrollamos en la escuela. Y ahí los chicos entendían --cuando la Cooperativa pasaba a juntar el cartón por la puerta de la escuela y veían su moto-- la importancia del trabajo que ellos habían desarrollado. Chicos de 12 años, 13 años. Que el trabajo de ellos era el producto que le cambiaba la vida a alguien. Entonces ahí es donde empiezan a desarrollar un sentido de pertenencia, un compromiso y una identificación porque es muy importante que uno empiece a sentirse que es importante. Y esto del proyecto del moto-carro se los brindaba.

Lo mencionaste a Martín Insaurralde, que era intendente de Lomas. Después del reconocimiento de 2019, después del viaje a Dubai, llegaste a la Subsecretaría. Cuando vino un político, un dirigente que además es intendente de un partido tan importante y te propone un cargo, ¿te dio miedo, te asustaste?, ¿cómo evaluaste entrar? Ya llevás un año, después te voy a preguntar por el balance, pero ¿cuáles fueron los sentimientos que se despertaron en vos? Y también: ¿por qué aceptaste?

—Acepté porque es un desafío. Porque todos tenemos que participar. Porque criticar es muy fácil y hacer es muy difícil. Y cuando él me lo ofreció dije que sí porque desde la política es un agente de transformación muy importante. Valoro la política como un agente de transformación. Y cuando veo el trabajo que Martín [Insaurralde] venía desarrollando, me sumo a porque creo en él y creía que desde la política podemos hacer cosas. Creo que desde la política podemos hacer cosas. Por eso es que me sumé a esto. Siempre me gustaron los desafíos y soy una persona que los asume y empieza a desarrollarlos.

Martín Salvetti en el auditorio de Ticmas en la Feria del Libro
Martín Salvetti en el auditorio de Ticmas en la Feria del Libro

Yo estuve en la primera reunión que tuvieron en el proyecto de robótica. Esa conversación habrá sido en febrero, o marzo de 2021, cuando comenzabas tu gestión. Ahora ha pasado un año. ¿Qué balance podés hacer?

—¿Un balance del Programa o un balance de la función?

Un balance de tu gestión.

—El balance de mi cargo, pienso que yo no soy la persona para hacerlo. Estoy contento con lo que estoy haciendo. La función pública tiene muchos altibajos emocionales. Hay días que te tenés que sentar a encontrarle la vuelta a una dificultad, y te lleva mucho tiempo; que pensás en ese Martín que quiere hacer ¡zas! y encontrarle una solución no se encuentra inmediatamente. El trabajo en equipo hace que encontremos la variante. Si trabajás en equipo en una escuela, tenés ciertas miradas; si trabajás en un municipio donde hay muchos más actores, tenés muchas más miradas. Este año el aprender a escuchar y el aprender a tratar de entender a muchas más personas creo que fue un factor muy importante en mí. Cuando hoy arranqué con vos charlando y diciendo que es fundamental ver que como docentes tenemos que seguir aprendiendo y como funcionario también lo tomo. No es Martín el que puede ejecutar rápido, para desarrollar políticas y políticas educativas adecuadas hay que tener muchas miradas, muchas voces que a veces no se tenían y creo que desde la posibilidad de la cual estoy a cargo yo, le estoy dando la posibilidad a muchas personas para que sean actores necesarios dentro de la educación. Si bien hoy Mariana Lesci, la intendenta, es la que tiene la palabra final, hay muchos actores que participan de esto.

¿Cómo se conforma tu equipo de trabajo?

— Mi equipo de trabajo son cinco Direcciones que ya estaban conformadas cuando yo asumí. Estas Direcciones son Dirección de Infraestructura, Dirección de Educación, Dirección de Educación Privada, Dirección de Educación Especial y Dirección de Proyectos Educativos. Y después dentro de mi equipo en la Subsecretaría hoy la integran casi todos ex estudiantes míos, que me conocen ya hace años…

¿Ex estudiantes de la radio, por ejemplo?

—De la radio que siguieron su formación docente y creo que dándoles participación es dejar que esa pequeña semillita que se inició hace veinte años pueda seguir creciendo. Porque uno no es indispensable y no va a seguir estando toda la vida. Entonces creo que esas personas que uno formó, gracias a Dios es muy diverso y plural, creo que puede seguir creciendo. Entonces hoy la Subsecretaría, mi equipo lo conforman casi un 90% de ex estudiantes de la escuela.

Martín Salvetti en el auditorio de Ticmas en la Feria del Libro
Martín Salvetti en el auditorio de Ticmas en la Feria del Libro

El proyecto de Programación y Robótica que se implementó el año pasado en las escuelas en sexto grado tuvo un largo trabajo, y ahora ya casi llega al año de trabajo. Arrancó en plena pandemia, en clases en burbujas. Nosotros fuimos a cubrir ese encuentro y me acuerdo la cara de los nenes con el robotito. ¿Cómo se da hoy?

—Cuando nosotros nos sentamos en la primera charla, lo habíamos planificado para sexto grado. Porque Martín Insaurralde iba a entregar 10 mil tablets y después dijo vamos a entregar 10 mil tablets más para quinto grado y después dijo vamos a entregar 10 mil tablets más para cuarto grado y así entregó 10 mil tablets más para tercer grado. Entonces lo que nosotros pensamos como un programa para 290 docentes con 10 mil tablets, había 40 mil tablets entregadas. Cuando empezamos a trabajarlo micro no teníamos una dimensión macro. Hoy ya tenemos este desafío para el 2022 de que se va a incorporar tercero, segundo y primero. Que la plataforma de Ticmas va a ser para sexto, quinto, cuarto, tercero, segundo y primero con todo lo que es diseño curriculares digitales, con alfabetización. Lo que nosotros habíamos pensado para una mirada pequeña hoy es totalmente superadora ¿por qué nos pasa ésto? Porque el programa fue un éxito, porque tuvimos una muy buena devolución de nuestros estudiantes y de nuestra comunidad educativa, de nuestros docentes.

» Después de las vacaciones, el grupo de Innovación tecnológica y educativa del equipo empezó a recorrer escuelas con los kits de robótica en secundaria. Dónde están los chicos que pasaron de sexto a primero. En dos de las tres escuelas que estuvimos, los chicos ya están realizando talleres extracurriculares de robótica. Se fue haciendo una red. Nosotros capacitamos docentes para que trabajen con chicos de sexto grado y hoy se está viendo que eso que hicimos en sexto ya se está trabajando en primer año en otras escuelas donde nosotros no habíamos apuntado. Pero ahora sí estamos fortaleciendo con un equipo que se desarrolló de este programa dentro del Municipio. Lo que pensábamos se multiplicó con creces. Cuando yo escucho charlas que me hablan del futuro… que el futuro es así. Uno no sabe muy bien cómo es el futuro y cómo se pueden ir dando las cosas. A veces es difícil programarlas.

» Pero desde la Educación, si nosotros lo hacemos con mirada positiva sabemos que todo lo que estamos sembrando es para el futuro de los y las estudiantes. Pueden aparecer cosas que nos van a sorprender. Hoy ver estos talleres en estas escuelas donde nosotros no pensábamos que se podían desarrollar son producto de este programa es eso que te estaba contando.

Sabía de sexto grado, pero no sabía que habían llegado hasta abajo. ¿Cómo es el Proyecto en primero o segundo grado? ¿Qué tan distinto es Programación y Robótica en los primeros años que el viejo logo de mi época cuando yo iba a la primaria?

—Bien, nosotros para los grados más pequeños… El otro día fuimos a un centro complementario el Fiorito 805 donde hay chicos de primer grado, segundo y tercero. Pero yo había llegado para conocer el centro educativo y vino un chico y me dijo “Yo quiero ser escritor. Yo quiero escribirle un poema a la seño”. Y la seño me dijo: “Tenemos una Remington”. Entonces les digo “Acá está faltando tecnología” Ahí fue el equipo de Innovación con robótica, tablets y el chico empezó a usar la tablet y a trabajar con el robot. Y ahí los chicos le pusieron el word y empezó a escribir. Creo que era tercer grado. y empezó a usar la tablet y empezó a usar la tecnología a la cual no tenía el alcance.

» Gracias a Dios todos los chicas y chicos son distintos; yo no te puedo asegurar qué es lo que va a provocar en ellos la incorporación de la tecnología. Lo que yo sé es que si nosotros acercamos y democratizamos el acceso a la tecnología y la comunicación puede despertar la vocación y el interés en chicos que tal vez no tenían acceso a eso. ¿Qué es lo que va a producir? Interés. En algunos sí, en algunos no. Quizás en otros no llegamos con robótica o programación, pero sí podemos llegar a través del deporte. Capaz que lo convocamos para jugar un torneo a la pelota con su profe de educación física y no demuestra interés. Entonces yo no te puedo decir que en todos va a provocar interés la programación y robótica. Lo que sí te puedo decir es que sí voy a democratizar el acceso a la incorporación de la tecnología y la programación en ese grupo etario.

Una de las cosas que sucede habitualmente en las escuelas es que la gente de Educación las recorre, las transita, busca los problemas, los desafíos, las cosas que están haciendo bien. Si no recuerdo mal, alguna vez me dijiste que de hoy el desafío era la conectividad en las escuelas. ¿Qué otros desafíos encontrás?

—Muchos. La conectividad es fundamental, pero que todos tengan el acceso a la escuela es fundamental. Que todos tengan acceso a la educación formal es importantísimo. La educación formal garantiza derechos. Entonces, creo que tenemos que generar escuelas donde no las hay, donde la población ha aumentado; eso me parece que es de dónde tenemos que partir. Y después de ahí los desafíos más importantes son generar actividades, programas que sean transversales a los diseños curriculares, que los diseños curriculares tienen que ser innovadores, hay que renovarlos. Nuestros diseños curriculares ya tienen 12, 13 años. Me parece que esos son los desafíos más importantes que tenemos que hacer. Ver la parte didáctica para desarrollar programas que generen interés en nuestros estudiantes y actualizar los diseños curriculares. Garantizando la infraestructura en los lugares donde la escuela todavía no está.

El diseño curricular y su actualización es un temón para hablar con los docentes, hablar con sindicatos, con institutos de formación.

—Es un temón importante del que nos tenemos que hacer cargo. No podemos dejar pasar cinco minutos donde un estudiante pierda tiempo en la escuela, donde se aburra, donde lo que aprenda no le interesa, o que no es importante. Nosotros estamos trabajando y estamos hablando de los diseños curriculares con docentes de escuelas técnicas, que por lo menos es lo que yo conozco. Y a su vez me junté con el Ministerio de Ambiente de la Provincia de Buenos Aires para que todo lo que hablamos de educación sustentable se va a llevar a cabo en los diseños curriculares. Me parece que entre todos y todas tenemos que hablar de la importancia de los diseños curriculares y se tienen que actualizar…

¿Apuntando a educación y trabajo?

—Apuntando a todo. Cuando yo hablo de educación veo la construcción del sujeto como persona. El trabajo también está dentro de la construcción del sujeto. Dentro de lo que es la educación y el trabajo, por ejemplo la semana pasada nos empezamos a juntar con empresarios de Lomas de Zamora. Nunca se había articulado. Juntamos 250 empresas del municipio para que articulen con las escuelas secundarias y las escuelas técnicas. Todavía no puedo entender cómo en Argentina no articulan las escuelas secundarias con las empresas, como si la secundaria no te prepara para el mundo del trabajo. Como si el que te prepara en la escuela de arte, el artista no fuera a trabajar. Tenemos que trabajar esos conceptos. Hay que ver muy bien los diseños curriculares, la formación docente y sentarnos todos a debatir todo lo que es educación y trabajo y qué es lo que queremos de nuestra escuela. Creo que ahí cuando nos sentemos todos, y estén todos los actores presentes y nos sentemos a debatir, ahí vamos a tener un buen futuro para la educación.

¿Extrañas el aula?

—Sí.

¿Nada más?

—La semana pasada estaba pensando cómo hacía para volver. Porque es necesario, el otro día estaba dando una clase y es como andar en bicicleta. No se olvida, pero hay que pedalear mucho para volver a retomar el ritmo de dar clase. No quiero perder nunca eso. Extraño el aula y está en mi cabeza pensar cómo vuelvo. Es un desafío enorme.

LEER MÁS