El Banco Central tienta a las cuevas para que se transformen en casas de cambio

Además, la autoridad monetaria impulsa a las pymes que se financien con préstamos a cinco años a una tasa promedio de 6% anual en dólares. Esta línea de crédito es producto del exceso de divisas que atesoran los bancos tras el blanqueo. La capacidad prestable del sistema aumentó considerablemente pero choca con la menor actividad económica.

De todas maneras, los grandes bancos están preparando fideicomisos para que los que blanqueen sus capitales puedan colocar su dinero a tasas ventajosas, y contribuir a que la bancarización, la relación entre los depósitos y el PBI, salte de un paupérrimo 15% al 45% que promedia en el vecindario.

Es tanta la necesidad de colocar los dólares que salieron del colchón, que en la licitación de Letras del Tesoro en dólares, se adjudicaron USD 794 millones a 84 días a una tasa de 3% anual que es medio punto más baja que la de la licitación anterior. Esto implica que al tener en circulación casi USD 6 mil millones, la renovación se hará a menores costos.

El tema es cuánto tiempo más se seguirá tomando deuda para no emitir. El arranque de la economía no parece estar lejos si se escucha a los banqueros y empresarios. Para el titular del Santander Río, Enrique Cristofani, la economía crecerá 4% en 2017.

HAY MÁS OFERTA QUE DEMANDA DE DÓLARES

En este marco, la demanda de dólares por parte del público sigue siendo escasa. En el mercado "hoy", el minorista, el dólar aumentó 2 centavos a 15,32 pesos. Pero en el marginal, el "blue" perdió 2 centavos y cerró a 15,38 pesos. La diferencia entre ambos precios tiende a reducirse.

Con ese criterio, el Banco Central flexibilizó las normas para que se abran más casas de cambio. Incluso les quitó el límite de horario y otras restricciones. Pueden funcionar hasta en los hoteles y se permite a los bancos tener casas de cambio. La idea es que al facilitar la apertura, el circuito blanco del dólar se amplíe y desplace al "blue". No extrañaría que muchas cuevas se transformen en casas de cambio autorizadas por el Banco Central.

En la plaza mayorista, donde operan empresas y exportadores, se operaron USD 290 millones. La divisa inició en $15,15, pero el mercado se abrió una hora después cuando los vendedores no se movieron de ese valor. Sobre el final predominó la oferta y terminó a $15,10, tres centavos menos que el día anterior.

En la plaza de futuros, hubo un buen volumen de negocios porque siguen las coberturas. Las bajas predominaron para todos los plazos menos para agosto y setiembre de 2017. A fin de mes el dólar cerró a $15,3750, bajó 0,19% en el primer caso;  pero aumentó 0,17%, a $18,85 por dólar, en el tramo más largo.

Las reservas Internacionales aumentaron USD 22 millones, a USD 37.642 millones porque siguen creciendo los depósitos en dólares en los bancos. La suba se dio a pesar de que por la baja del oro se perdieron USD 22 millones y que se pagaron USD 26 millones a organismos internacionales y 1 millón a Brasil.

PROXIMIDAD DE PUNTO DE GIRO EN EL MERCADO DE CAPITALES

Los bonos de la deuda registraron más movimiento. Se operaron $4.369 millones. Los nominados en dólares con legislación argentina quedaron sin cambios.

En la Bolsa, primó la cautela y eso se vio en el bajo monto de negocios de $360 millones. Los inversores quieren estar seguros de que terminó la toma de ganancias y que no es el "rebote del gato muerto", como se denomina en la jerga de los operadores a las alzas que nacen y mueren en el día siguiente a una gran caída.

Lo cierto es que la Bolsa comenzó con leves alzas pero sobre el final el Merval perdió 0,6%, porque YPF cedió 1,75% y Petrobras, con su leve alza de 0,65%, no pudo compensar ese desequilibrio. Las dos petroleras son decisivas para confeccionar el Merval.

De todas maneras, se vieron reacciones en los papeles de las empresas de electricidad y de gas, en menor medida.

La última rueda de la semana va a estar signada por el comportamiento del mercado de acciones. Wall Street tuvo otra caída de 0,2% y la nueva baja del petróleo, de 1,5% a USD 44,66 por barril, no ayuda a mejorar el ánimo de los inversores.