Turismo: la temporada alta cerró con crecimiento del 15,1% en la llegada de extranjeros

En el mismo período cayó 8% la salida de argentinos al exterior, pero aún así hubo déficit en la cantidad de turistas

Compartir
Compartir articulo
En febrero, uno de cada tres turistas extranjeros provino de Chile (Shutterstock)
En febrero, uno de cada tres turistas extranjeros provino de Chile (Shutterstock)

Durante el primer bimestre del año llegaron al país 1.555.300 turistas extranjeros, lo que marcó un crecimiento del 23,7% en comparación al mismo período del año pasado, según datos publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).

De esta forma, se mantuvo la tendencia creciente registrada durante todo el 2023, un año en el que la actividad se vio claramente favorecida por la macroeconomía nacional. Cabe recordar, que la llegada masiva de turistas internacionales comenzó en marzo del año pasado, luego de que Nación decidiera aplicar un tipo de cambio diferencial para los extranjeros (pagando con tarjeta de débito o crédito accedían a una cotización similar a la del dólar libre). A partir de entonces comenzaron a registrarse cifras récord de turistas del exterior, principalmente en las ciudades fronterizas, que se vieron “invadidas” de visitantes que cruzaban la frontera para hacer sus compras.

Hoy, el escenario es diferente. Tras la devaluación implementada por el Gobierno nacional en diciembre pasado los precios se dispararon y las brechas entre los diferentes tipos de cambio se acortaron de forma considerable. Aún así, los turistas internacionales siguen llegando y superando las expectativas.

El dato negativo, al menos desde el punto de vista de la balanza comercial, es que durante los primeros dos meses del año salieron del país 2.159.700 argentinos para pasar sus vacaciones en el exterior. Eso quiere decir que salieron 604.400 personas más de las que entraron, lo que por supuesto se traduce en una mayor cantidad de dólares que se fueron del país en relación a los que se gastaron dentro de la Argentina.

La radiografía de febrero

En febrero de 2024, último dato publicado por el Indec, ingresaron 1.187,8 miles de visitantes no residentes por todas las vías de acceso al país; de los cuales 713,4 miles fueron turistas y 474,4 miles fueron excursionistas.

El 65,2% del turismo receptivo provino de países limítrofes; los principales fueron: Chile, que aportó 30,6%; Brasil, 14,0%; y Uruguay, 12,5%. Además, el 51,4% de los turistas no residentes arribó a Argentina a través de la vía terrestre; el 35,0% utilizó la vía aérea; y el 13,6% restante llegó por vía fluvial/ marítima.

Turistas según destino
Turistas según destino

En tanto, las salidas al exterior (argentinos que viajaron fuera del país) alcanzaron a 1.406,5 miles de visitantes residentes por todas las vías internacionales, de los cuales 1.047,1 miles fueron turistas y 359,4 miles fueron excursionistas. Los principales destinos fueron Brasil, con 34,1% de participación; Uruguay, con 19,0%; y Chile, con 14,3%.

El 58,3% de los turistas residentes salió del país por la vía terrestre; el 31,0%, por vía aérea; y el 10,6%, a través de la vía fluvial/marítima.

En base a esto, se deduce que en febrero se registró un saldo negativo de 218.700 visitantes internacionales por todas las vías de acceso al país. Este resultado fue debido al saldo negativo de 333,7 miles de turistas y un saldo positivo de 115,0 miles de excursionistas.

Déficit de divisas

El déficit en la cantidad de turistas y por ende, en la cantidad de dólares que ingresaron y salieron, no fue algo ocasional. De hecho, desde 2011 hasta hoy, el sector acumula un saldo negativo de casi USD 30.000 millones, de acuerdo a las cifras oficiales de la Balanza de Pagos publicada por Nación.

Según un estudio de Fundación Mediterránea, a pesar del mayor peso del influjo de turistas extranjeros y la menor salida y menores gastos de turistas argentinos en el exterior, 2023 habría cerrado (no hay cifras definitivas aún) con un déficit sectorial de divisas cercano a los USD 1.500 millones. Es decir que ni siquiera un escenario económico con fuerte desincentivo a los viajes al extranjero pudo revertir el escenario de pérdida de dólares para la Argentina.