Clàudia Pons: "El bronce del Mundial nos inspira a seguir creciendo día a día"

Después de hacer historia logrando el tercer lugar en el primer Mundial femenino de fútbol sala, el equipo español se prepara para afrontar la próxima fase clasificatoria europea, renovando ambición y compromiso bajo la dirección de Clàudia Pons

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La selección española femenina de fútbol sala ya tiene en el horizonte los desafíos clasificatorios europeos tras concluir el Mundial de Filipinas con una medalla de bronce, resultado calificado como histórico por su seleccionadora, Clàudia Pons, quien manifestó que este reciente logro les impulsa a mantener el espíritu de superación en la ruta hacia el Campeonato de Europa de 2027. De acuerdo con declaraciones recogidas por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Pons subrayó el valor simbólico de este tercer puesto en el primer Mundial oficial, señalando que el grupo mantiene la ambición y el compromiso de cara a las próximas citas internacionales.

Según publicó la RFEF, la selección española participó entre el 21 de noviembre y el 7 de diciembre en el primer Campeonato del Mundo de fútbol sala femenino, con sede en Filipinas. Bajo la dirección de Clàudia Pons, el equipo consiguió avanzar hasta las semifinales, donde cedió ante el combinado de Brasil. Posteriormente, España obtuvo la tercera plaza tras superar a la selección argentina en el partido por el bronce. Pons expresó: “Hemos conseguido el bronce en el primer Mundial femenino de fútbol sala, un hito que nos enorgullece y que nos inspira a seguir creciendo día a día”.

La temporada 2025 fue calificada por la entrenadora como un momento crucial en el desarrollo del equipo, al haber conseguido subir al podio en este debut mundialista. Según destacó la referente del banquillo español, este éxito no solo supone reconocimiento a nivel deportivo, sino que también contribuye a fortalecer la proyección del fútbol sala femenino dentro y fuera de España. La seleccionadora consideró que el pasado campeonato abre paso a un ciclo de renovación de objetivos, con la mirada puesta en el torneo continental, donde la escuadra española buscará prolongar su hegemonía.

España ha conquistado hasta ahora las tres ediciones previas del Europeo femenino de fútbol sala, lo que establece una referencia en la disciplina para el resto de competidoras del continente. El medio RFEF detalló que la próxima fase de clasificación para el cuarto Europeo se iniciará en octubre de 2026, por lo que el staff técnico y las jugadoras afrontarán los próximos meses como preparación clave en busca de un nuevo título, manteniendo la idea de permanecer en lo más alto del panorama internacional.

Pons ha reiterado la importancia del trabajo constante y de la cohesión grupal, señalando que el éxito conseguido en Filipinas constituye tanto un motivo de celebración como una motivación adicional para encarar los desafíos venideros. Según consignó la RFEF, la entrenadora manifestó que la meta inmediata consiste en asegurar la mejor puesta a punto posible del plantel con vistas al proceso clasificatorio, así como fomentar el apoyo de la afición: “Mirando al futuro, en 2026 seguiremos trabajando con la misma ilusión para afrontar los nuevos retos que nos esperan, como es la clasificación para el próximo Europeo, donde queremos contar con vuestro apoyo y así seguir escribiendo juntos la historia del fútbol sala femenino”.

Las jugadoras españolas y su cuerpo técnico consideran que el balance de la pasada temporada internacional refleja tanto el crecimiento deportivo como el refuerzo del sentimiento de identidad en torno al fútbol sala femenino en España, según informó la RFEF. Estas sensaciones dan lugar a una fase de renovación de ambiciones, donde el objetivo principal radica en consolidar el progreso alcanzado. La preparación para el Europeo de 2027 se presenta ahora como el nuevo gran reto, marcado por la defensa del título y la continuidad del impulso logrado en los últimos años.

El medio federativo subrayó además que el campeonato mundial en Filipinas representó una oportunidad para medir el nivel competitivo de selecciones de diferentes continentes y permitió a la delegación española analizar aspectos tácticos y humanos que serán determinantes en futuros compromisos. Tanto Clàudia Pons como las jugadoras han coincidido en la importancia del aprendizaje extraído de cada partido del Mundial, considerándolo esencial para los siguientes pasos de la selección nacional.