El truco de una dermatóloga para freír huevos sin tóxicos ni que se peguen

Cocinar huevos fritos sin que se peguen ni generen residuos tóxicos es posible con una técnica sencilla, efectiva y sin necesidad de sartenes antiadherentes. El método, compartido en Tiktok por la creadora de contenido @drsarasimonsen, combina el control de temperatura y un uso correcto del aceite para lograr una cocción limpia y sin productos químicos.

Frente al uso de utensilios con recubrimientos que pueden desprender sustancias nocivas al calentarse, las sartenes de acero inoxidable ofrecen una alternativa segura y duradera. Siguiendo unos pasos clave, este tipo de sartén permite preparar huevos fritos con textura ideal y sin que se adhieran al fondo.

CONTROL DEL CALOR: LA CLAVE PARA EVITAR QUE SE PEGUE

El proceso comienza con el calentamiento progresivo de la sartén a temperatura media-alta, alrededor de un nivel 7 en la cocina. Es importante no añadir nada en esta etapa. La prueba del agua es determinante: al verter unas gotas, deben formar pequeñas bolitas que se desplazan por la superficie. Este fenómeno indica que la sartén ha alcanzado el punto ideal de calor.

Una vez aparezcan esas burbujas, se baja el fuego a nivel 4 y se espera a que el agua se evapore por completo. Solo en ese momento se incorpora el aceite, distribuyéndolo por los laterales de la sartén. Las ondas que se forman en el aceite confirmarán que está listo para recibir el huevo.

El huevo, a temperatura ambiente, debe romperse con cuidado sobre la sartén y dejarlo unos segundos sin moverlo. Este tiempo inicial permite que se selle la base, evitando que se pegue y garantizando una cocción uniforme.

SIN TÓXICOS Y CON ESPÁTULA DE ACERO

Uno de los grandes beneficios de este método es la ausencia de recubrimientos antiadherentes, frecuentemente relacionados con disruptores endocrinoss, que son sustancias químicas capaces de interferir con el sistema hormonal del cuerpo, afectando procesos como el crecimiento, desarrollo y reproducción. Al usar acero inoxidable, se elimina la posibilidad de exposición a estas sustancias que pueden migrar a los alimentos con el uso continuado y a altas temperaturas.

Según la dermatóloga, "este tipo de sartén no se raya así que además podemos evitar las espátulas de silicona y usar espátulas de acero", lo que representa una ventaja importante para mantener la cocina libre de compuestos sintéticos.

Otra ventaja es que las sartenes de este material permiten utilizar espátulas metálicas sin riesgo de dañar la superficie. Así se evita depender de utensilios de silicona u otros materiales que, en ocasiones, también pueden liberar compuestos sintéticos al deteriorarse.

El resultado es un huevo perfectamente cocinado, sin residuos ni sabores extraños. Una opción saludable y profesional al alcance de cualquier cocina. Con práctica, este sistema se convierte en una rutina rápida y segura.