Redacción Deportes (EEUU), 20 sep (EFE).- Álex Palou es triple campeón de la Indycar. Hijo de clase media, ha triunfado en un mundo que necesita gran inversión para poder competir. Por eso quiere ayudar a los más jóvenes creando Palou MotorSport. Que ningún piloto con talento se quede sin cumplir su sueño por falta de medios. Álex Palou y su padre Ramón dan las claves del proyecto.
“Desgraciadamente el mundo del motor es así, se pierde mucho talento por falta de recursos. Pero de vez en cuando hay gente como yo que tenemos mucha suerte y todo nos funciona bien”, comenta Palou a EFE.
Lejos de tener la mente puesta sólo en su carrera en Estados Unidos, el reciente campeón de la Indycar ha querido ayudar a aquellos jóvenes pilotos que, como él, pueden tener una carrera brillante pero no poseen los recursos para poder dar pasos adelante.
“Queremos ganar carreras y poder ayudar en un futuro a pilotos jóvenes, que tengan una oportunidad como me la dio Campos a mi. No tenía los recursos necesarios para poder estar, vengo de una familia que no estaba en el mundo del motor, no teníamos ni idea. Es un mundo muy caro, por todo lo que cuestan los neumáticos, la gasolina, el personal necesario para llevar un coche o un kart. No es como otros deportes, en los que no hace falta tanto apoyo económico”, manifiesta el piloto español.
Una cena con su padre Ramón, en noviembre de 2022, fue lo que, de manera inesperada, lo activó todo. Una conversación entre ambos sobre ese equipo de karting que siempre habían querido montar, derivó en que quizás los monoplazas eran mejor opción, y así, como quien no quiere la cosa, terminaron fundando lo que hoy es ‘Palou Motorsport’.
“La idea no fue extremadamente meditada. Quedó como una idea loca, pero al día siguiente la seguimos, y a los dos meses yo estaba alquilando ya las naves para empezar a hacer reformas. No fue muy meditado, no tuvimos mucho tiempo de darle muchas vueltas pero en el momento en el que vimos que era algo que nos podía encajar, decidimos tirar para adelante”, relata Ramón Palou a EFE.
‘Palou Motorsport’ no nació con un propósito de negocio para obtener un rendimiento capital, sino que se buscó la manera de que fuera sostenible por sí mismo.
Contó con dos ingredientes muy importantes que hacen que la fórmula funcione, el primero el hecho de ser un proyecto hecho en familia, impregnándole la pasión que tanto Alex como Ramón tienen por el automovilismo. El segundo es la experiencia que el triple campeón de la Indycar puede aportar, estando muy presente pese a la distancia.
Los más de 7.000 kilómetros que existen entre Barcelona e Indianápolis y la diferencia horaria no han sido un problema para que Alex Palou haya estado implicado al máximo en el día a día de este proyecto. Lejos de apostar por otro tipo de inversiones, tiene muy claro en lo que quiere invertir su dinero: “Si no tiene cuatro ruedas no estoy interesado”, dice Alex.
“Alex está involucrado absolutamente en todas las áreas del proyecto”, comenta su padre, Ramón. “La línea de trabajo la define él y lidera este tipo de reuniones porque es el que tiene el criterio más claro y más conocimiento”.
Pero donde más puede ayudar el campeón de la Indycar es en el trabajo con los pilotos, de los que está muy pendiente: “Aunque no puede estar siempre que le gustaría, sí que tiene sesiones de ‘feed-back’ con ellos. Él sabe explicárselo mejor y comunicarse, porque una cosa es que lo explique el ingeniero o yo, y otra que lo haga él desde su propia experiencia, porque ha pasado por ese punto que le toca al chico en cuestión”, afirma Ramón Palou.
No son muchos los equipos de promoción que pueden contar con un perfil como el de Alex Palou dentro del equipo e involucrado al máximo nivel, para un proyecto así es muy importante.
‘Palou Motorsport’ tiene unos recursos importantes para ser un equipo de categoría de promoción y no profesional. Cuentan con una nave de mil metros cuadrados en Llinars del Vallés, a unos 15 kilómetros del circuito de Montmeló, allí están las oficinas centrales y un taller adaptado para poder llevar a cabo el desarrollo técnico de los coches, donde trabajan los ingenieros y todo el ‘staff’ técnico que va alrededor del equipo.
Cuentan con profesionales a tiempo completo y también con colaboradores que asisten específicamente a apoyar en los eventos. En cada uno de ellos, en las carreras, el equipo mueve alrededor de treinta personas, además de dos camiones y los cuatro monoplazas con los que compiten.
En total, el coste por temporada por cada uno de estos coches con los que compiten oscilan entre 600.000 y 750.000 euros. Con cuatro coches, el presupuesto total por año se va entre dos y tres millones.
A esto hay que sumar ingresos que pueden venir de hacer jornadas de test con otros pilotos que pagan por ello, al igual que los posibles patrocinadores.
“He tenido esponsors grandes y pequeños, programas como el de jóvenes pilotos del Circuito de Barcelona, desde la Federación también hay algunas pequeñas ayudas… Yo sin el apoyo de todas esas personas, así como mis padres y toda mi familia, no estaría aquí. Es increíble y estaré siempre infinitamente agradecido”, comenta un Alex Palou que no olvida sus orígenes y todo el proceso vivido hasta el día de hoy.
En ‘Palou Motorsport’ ponen los recursos al servicio de los pilotos para que desarrollen su talento, y aunque no se les puede ayudar financieramente a todos, sí tienen claro desde el proyecto que si apareciera ‘un Palou’ se le ayudará.
“No podemos ayudar a todo el mundo pero ojalá tengamos la capacidad de localizar a ‘un Palou’ que no tiene donde caer, que no pueda continuar, pero que tenga el talento. Si nosotros estemos en situación de poder ayudarle y tenemos la plataforma y los recursos, en un caso así lo tenemos muy claro, sin ninguna duda lo haremos”, destaca Ramón.