La nueva aplicación, denominada RideWith, usará el sistema de navegación de Waze para conocer las rutas que usan los conductores de forma más frecuente cuando van al trabajo y las conectará con las de las personas que estén buscando un viaje en la misma dirección.
Google compró hace dos años, por unos u$s1.000 millones, la empresa israelí Waze, que usa las señales satélite de los teléfonos avanzados de sus clientes para ofrecer información sobre el tráfico a tiempo real.
"Estamos realizando una prueba beta pequeña y privada sobre el concepto de compartir coche en el área del Gran Tel Aviv, pero no tenemos nada más que anunciar en este momento", dijo Waze a la agencia de noticias Reuters acerca de su incursión en el campo cada vez más competitivo de las herramientas para compartir automóvil.
Los conductores estarán limitados a solo dos trayectos al día y no podrán ganar un salario con RideWith, señaló una fuente cercana a la compañía, diferenciándolo de negocios como Uber, en el que los conductores pueden obtener beneficios.
Si RideWith termina siendo lanzado a nivel global, esta limitación podría ayudar a evitar los reveses que está sufriendo Uber en varios países que quieren proteger a los taxistas profesionales.
Waze no espera que haya conductores suficientes para satisfacer la demanda en un principio, pero según vaya sumándose gente, los pasajeros podrán pedir un viaje hacia o desde el trabajo mientras aportan algo del coste del combustible y del deterioro del coche por su uso, indicó la fuente.