Todo Paraguay festejó la liberación de Arlan Fick, secuestrado nueve meses por el EPP

La principal manifestación de alegría se dio cuando una caravana partió desde la vivienda del joven brasileño de 17 años, quien permaneció cautivo durante 267 días a manos del Ejército del Pueblo Paraguayo

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 ABC Color 163
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Más de 500 vehículos y 100 motocicletas participaron en la noche del viernes de la caravana que partió de la vivienda del recientemente liberado Arlan Fick, el joven brasileño de 17 años secuestrado durante casi nueve meses por el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).

La caravana estuvo encabezada por una camioneta en la que Fick se encontraba en compañía de sus amigos, primos y su novia, según reportó el diario ABC Color, de Paraguay.

El oscuro camino por el que anduvieron, desde la vivienda de Arlan, en la Colonia Paso Tuya, en Horqueta, hasta la ruta III "General Elizardo Aquino", distante a unos nueve kilómetros del lugar, se vio iluminado por gran cantidad de vehículos que se sumaron en señal de festejo.

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Durante el trayecto, varias personas salieron de sus casas para saludar al recientemente liberado. Al finalizar la caravana, los manifestantes lanzaron fuegos artificiales.

Más temprano, la familia Fick organizó una misa en su domicilio particular para agradecer que haya sido devuelto "sano y salvo". En la mañana del viernes, Fick había dado detalles de su cautiverio de más de nueve meses.

"Después de mucho tiempo, volví a casa, me liberaron. Me trataron bien, no me faltó nada, comida, agua abundante, cuando llovía no me mojaba, nunca me faltó nada", dijo el joven, cuyo secuestro mantuvo en vilo a todo Paraguay.

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El adolescente fue raptado en la finca rural de su familia, de nacionalidad brasileña, en la localidad de Paso Tuyá, en el departamento norteño de Concepción, un municipio donde viven unas 75 familias, en su mayoría inmigrantes brasileños dedicados a la agricultura.

La familia Fick pagó en su momento 500 mil dólares de rescate, pero no tuvo noticias del joven hasta la primera prueba de vida, entregada por los guerrilleros el 22 de octubre.