La Justicia concedió un divorcio por "desamor"

El juez de la causa se negó a investigar la denuncia por adulterio presentada por la mujer. Determinó que "la falta de amor" fue la causa de los problemas maritales

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"La incorporación de la palabra amor a una sentencia es una maravilla", afirmó el abogado Osvaldo Ortemberg, especialista en Derecho de Familia y con más de 42 años de experiencia en el fuero.

La opinión de Ortemberg refiere a un fallo de la Sala "B" de la Cámara Civil en un divorcio conflictivo de una pareja que estaba separada hace más de tres años. En el mismo se citó al "desamor" como posible causa de los problemas conyugales.

La mujer había querellado a quien entonces era su marido con una denuncia por adulterio, que presentó después de 6 años de haberse separado de hecho.

No obstante, los magistrados habilitaron la sentencia de divorcio por el tiempo que la pareja llevaba separada de hecho y la ausencia de signos de reintentar la convivencia, y no por la denuncia de adulterio que para la justicia no quedó probada.

El motivo: desamor
"Ni los jueces ni el Código Civil hablan de la falta de amor como causal de divorcio ni siquiera, en los divorcios de común acuerdo", indicó Ortemberg, con trayectoria en mediaciones.

Según explicó el abogado, ninguna de las partes suele aducir "falta de amor" a la hora de divorciarse.

"Hay jueces que buscan hechos graves para habilitar la sentencia, y no querer convivir más con una persona pero valorarla como un buen padre o una buena madre, por ejemplo, puede trabar la sentencia porque a los ojos de estos jueces, le quita gravedad", explicó.

Para el especialista, que una Cámara "hable de desamor, es un paso a la comprensión de algunos aspectos del matrimonio que no están mencionados en la Ley".

"La falta de amor en un fallo es un componente brillante de excepción", afirmó Ortemberg. Dijo que el juez se acercó a la "realidad subjetiva" y entendió que sólo la ley sostiene un matrimonio y que su disolución no tiene por qué estar vinculada a una infidelidad o un maltrato.