Esclavos del amor

Ciberesclavitud, estafas románticas y menores de edad iniciados como delincuentes

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La industria del ciberdelito es poderosa, potente y no tiene límites o, mejor dicho, nadie le pone límite
La industria del ciberdelito es poderosa, potente y no tiene límites o, mejor dicho, nadie le pone límite

La policía de Filipinas rescató a 875 “trabajadores” durante 2024, incluidos 504 extranjeros, de una organización que se hacía pasar por una empresa de “juegos online” pero que en realidad operaba un campo de trabajos forzados que alojaba a operadores de estafas románticas.

Las personas rescatadas procedían de Vietnam, China, Filipinas, Ruanda, Taiwán e Indonesia. Estas fueron reclutadas y esclavizadas con la promesa de una oferta de trabajo, pero en lugar de ello retuvieron sus pasaportes, los obligaron a adoptar identidades falsas y a pretender enamorarse de sus potenciales víctimas para hacerse de su dinero.

Los argumentos empleados para seducir a los trabajadores incluyen promesas de ganancias en criptomonedas y participación en los beneficios de las empresas. No cumplir con los objetivos demandados implica maltrato físico, encierro o privación de sueño. Custodiados por guardias armados que impiden la salida, se los amenaza con venderlos en mercados donde se ofrecen humanos por miles de dólares para realizar estas “operaciones de estafa”.

Los ciberesclavos existen, esto pasa y es real. La avalancha de amenazas, ciberataques y estafas virtuales se explica en gran medida por el pico de este tipo de ofensivas registradas a escala global. La industria del ciberdelito es poderosa, potente y no tiene límites o, mejor dicho, nadie le pone límite. Se carteliza, tiene más recursos, más presupuesto y se monetiza y financia con la industria crypto, que asegura anonimato.

Existen otros factores que explican su evolución: la “compañía de juegos” detalla que se estableció en 2023 como un próximo “prominente proveedor de jugadores/juegos en la industria lúdica online”, que ofrece servicios diseñados para satisfacer las necesidades de los operadores de casinos en línea en todo el mundo. Según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), el desarrollo de soluciones escalables y digitales ha potenciado la proliferación empresarial criminal en todo el sudeste asiático.

Los estafadores apuntan a usuarios en todo el mundo. La organización estafadora los obliga a crear identidades sintéticas usando videos y fotos de internet. Alguien atractivo, positivo, con buena imagen, que tenga un buen trabajo, estable, y que cuanto más triste sea su historia, mejor.

Una variante de esta modalidad delictiva suele ocurrir en plataformas menos populares y desconocidas para muchos. Discord es una de las más utilizadas en el mundo gamer, así como el de la informática.

La tendencia indica que es cada vez más frecuente que menores de edad participen y se involucren en el desarrollo, comercialización y venta de software para cometer ciberdelitos. Niños que promueven malware fácil de usar se están convirtiendo en piratas informáticos, involucrándose en actividades delictivas sin saberlo.

Los interesados deben pagar una tarifa para convertirse en miembros de la organización, pero otros indicios evidencian que muchos de estos menores podrían estar cooptados, obligados a delinquir a partir de algún mecanismo de extorsión, ya que inicialmente participan de la distribución ilegal de malware sin darse cuenta de la gravedad del problema y percibiéndolo todo como una simple broma.

Muchos de estos casos no se denuncian y en general no se persiguen, dado que su investigación es muy compleja. Es habitual que se reste importancia a los hechos, al considerarlos “un juego de niños”.

Algunas señales de alarma que podrían indicar que un menor esté peligrosamente involucrado en el cibercrimen o que ha sido captado por una banda es que pase demasiado tiempo online y sea muy reservado respecto a lo que está haciendo; que muestre un interés desmedido en la programación; que esté percibiendo ingresos adicionales de sus actividades online y no diga cómo los obtuvo; y que socialice más en Internet que en la vida real.

La extorsión parece ser uno de los métodos de abuso utilizados por los criminales contra las víctimas que se niegan a convertir en estafadores. Muchas que respondieron anuncios de trabajo en aplicaciones como WhatsApp o Telegram son engañadas y luego traficadas para ser recluidas en un complejo donde perpetran estafas de compras online y acosan a personas.

Las estafas románticas y sexuales son de las más productivas. Otras estafas típicas que se realizan incluyen juegos de azar online, lotería y hasta engaños con criptomonedas. Manipulan un promedio de 500 posibles víctimas por día. Utilizan programas que solo necesitan insertar el código del país, el código de la ciudad y la lista todos los números de teléfono de la ciudad, para enviar mensajes de saludo a millones de personas directamente. Disponen de software que les permite abrir sesión en 20 a 30 cuentas de WhatsApp simultáneamente y traducir instantáneamente mensajes a cualquier idioma de los seleccionados.

Una sola empresa de estafas puede ganar hasta un millón de dólares por día. La cantidad de usuarios crece todos los días en internet y redes sociales, y el stock de candidatos a víctima es enorme.