Alergia a las mascotas: causas, síntomas, diagnóstico y tratamiento

Dependiendo el tipo de síntoma que se presente, se puede conocer el nivel de gravedad de un padecimiento

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Muchos padecimientos no presentan síntomas
Muchos padecimientos no presentan síntomas o estos aparecen cuando ya es demasiado tarde, lo mejor es acudir al médico constantemente (Infobae/Jovani Pérez)

La alergia a alguna mascota es una reacción alérgica a proteínas que se encuentran en las células de la piel, la saliva o la orina de un animal. Los signos de la alergia a alguna mascota comprenden los signos frecuentes de la rinitis alérgica (fiebre del heno), como estornudar y moquear. Algunas personas también pueden experimentar signos del asma, como tener un silbido al respirar o dificultad para respirar.

Por lo general, la exposición a las escamas muertas de la piel (caspa) que pierde una mascota desencadena este tipo de alergia. Si bien cualquier animal que tenga pelos puede provocar este tipo de alergia, en la mayoría de los casos esta alergia se asocia a perros y gatos.

Si tienes alergia a alguna mascota, lo más recomendable es evitar la exposición al animal o reducirla en la mayor medida posible. Es posible que se necesiten medicamentos y otros tratamientos para aliviar los síntomas y controlar el asma.

Síntomas

Entre los signos y síntomas de la alergia a las mascotas causados por la inflamación de los conductos nasales se incluyen los siguientes: Estornudos resfrío; Ojos rojos, llorosos o con picazón Congestión nasal Picazón en la nariz, el paladar o la garganta Goteo nasal posterior Toser Dolor y presión facial Despertar frecuente Piel azulada e inflamada debajo de los ojos En el caso de un niño, frotarse la nariz hacia arriba con frecuencia

Si la alergia a tu mascota contribuye al asma, también puedes experimentar lo siguiente: Falta de aliento Presión o dolor en el pecho Pitido o silbido que puede oírse al exhalar Problemas para dormir causados por dificultad para respirar, tos o silbido al respirar

Síntomas cutáneos

Algunas personas con alergia a las mascotas también pueden experimentar síntomas cutáneos, un patrón conocido como dermatitis alérgica. Este tipo de dermatitis es una reacción del sistema inmunitario que causa inflamación de la piel. El contacto directo con una mascota causante de alergias puede desencadenar dermatitis alérgica y provocar signos y síntomas como los siguientes: Parches de piel rojos y elevados (urticaria) Eccema Picazón en la piel

Cuándo debes consultar con un médico

Algunos signos y síntomas de la alergia a las mascotas, como el moqueo o los estornudos, son similares a los del resfriado común. A veces, es difícil saber si tienes un resfrío o una alergia. Si los síntomas persisten más de dos semanas, podrías tener una alergia.

 Ante cualquier malestar lo
Ante cualquier malestar lo mejor es acudir al médico (Getty Images)

Las alergias a las mascotas son una afección frecuente. Sin embargo, tendrás más probabilidades de contraer una alergia a las mascotas si hay antecedentes de asma en tu familia.

El contacto con mascotas a temprana edad puede ser útil para prevenir esta clase de alergias. En algunos estudios se ha observado que los niños que conviven con un perro durante el primer año de vida pueden desarrollar mayor resistencia a las infecciones de las vías respiratorias superiores que los niños que no tienen un perro a esa edad.

Diagnóstico

El médico podría sospechar una alergia a animales domésticos en función de los síntomas, de un examen de la nariz y de las respuestas a sus preguntas. Podría usar un instrumento iluminado para observar el estado de las paredes de la nariz. Si tienes alergia a animales domésticos, las paredes de los conductos nasales podrían estar inflamadas o pálidas, o bien tener un color azulado.

Pruebas cutáneas de alergia

El médico puede sugerirte una prueba de alergias en la piel para determinar exactamente a qué eres alérgico. Es posible que te deriven a un especialista en alergias (alergista) para hacerte esta prueba.

En esta prueba, se extraen pequeñas cantidades de extractos de alérgenos purificados, incluidos los extractos con proteínas de animales, de la superficie de la piel. Esto normalmente se realiza en el antebrazo, pero puede hacerse en la parte superior de la espalda.

El médico o el personal de enfermería observa la piel para detectar signos de reacciones alérgicas después de 15 minutos. Si eres alérgico a los gatos, por ejemplo, se producirá una roncha roja, que provoca picazón, en la zona donde el extracto de gato se colocó sobre la piel. Los efectos secundarios más frecuentes de estas pruebas cutáneas son la picazón y el enrojecimiento. Estos efectos secundarios suelen desaparecer dentro de los 30 minutos.

Análisis de sangre

 Cada enfermedad tiene una
Cada enfermedad tiene una o varias formas de diagnosticarla para así detectarla y luego combatirla (Europa Press)

La primera línea de tratamiento para controlar la alergia a las mascotas es evitar los animales que causan la alergia tanto como sea posible. Cuando minimizas la exposición a los alérgenos de las mascotas, se espera habitualmente que tengas reacciones alérgicas cada vez menos frecuentes o menos intensas.

Generalmente es difícil o imposible eliminar completamente la exposición a los alérgenos de los animales. Incluso si no tienes mascota, puedes encontrar alérgenos inesperadamente que son transportados en las ropas de otras personas.

Además, para evitar los alérgenos de las mascotas, podrás necesitar medicamentos para controlar los síntomas.

Antialérgicos

Es posible que tu médico te indique que tomes uno de los siguientes medicamentos para mejorar los síntomas de la alergia nasal:

Los antihistamínicos reducen la producción de una sustancia química del sistema inmunitario que es activa en una reacción alérgica y ayudan a aliviar la comezón, los estornudos y el goteo de la nariz.

Los antihistamínicos de venta con receta médica que se los administra mediante atomizador nasal incluyen la azelastina (Astelin, Astepro) y la olopatadina (Patanase). Algunos de los comprimidos de antihistamínicos de venta libre incluyen fexofenadina (Allegra Allergy), loratadina (Claritin, Alavert) y cetirizina (Zyrtec Allergy); hay jarabes antihistamínicos de venta libre disponibles para los niños. Otras opciones son los comprimidos de antihistamínicos de venta con receta médica, como levocetirizina (Xyzal) y desloratadina (Clarinex). Los corticoides suministrados mediante atomizador nasal pueden reducir la inflamación y controlar los síntomas de la rinitis alérgica estacional. Algunos de estos medicamentos son fluticasona propionato (Flonase Allergy Relief), mometasona furoato (Nasonex), triamcinolona (Nasacort Allergy 24HR) y ciclesonida (Omnaris). Los corticosteroides nasales proporcionan una dosis baja del medicamento y tienen un riesgo mucho menor de efectos secundarios que los corticoides orales.

Los descongestionantes pueden ayudar a reducir los tejidos inflamados en los conductos nasales y facilitar la respiración por la nariz. Algunas tabletas de venta libre para la alergia combinan un antihistamínico con un descongestionante.

Los descongestionantes orales pueden aumentar la presión arterial y generalmente no debes tomarlos si tienes hipertensión arterial, glaucoma o enfermedad cardiovascular. Habla con tu médico acerca de si puedes tomar de forma segura un descongestionante.

Los descongestionantes de venta libre que se administran mediante atomizador nasal pueden reducir brevemente los síntomas de la alergia. El uso de un espray descongestionante durante más de tres días seguidos puede contribuir a la congestión.

Los modificadores de leucotrienos bloquean la acción de ciertas sustancias químicas del sistema inmunitario. Si los atomizadores nasales con corticoides o los antihistamínicos no son buenas opciones para ti, el médico puede recetarte montelukast (Singulair), una tableta de venta con receta.

Los posibles efectos secundarios del montelukast comprenden infección en las vías respiratorias altas, dolor de cabeza y fiebre. Los efectos secundarios menos frecuentes comprenden cambios de humor y de comportamiento, como ansiedad o depresión.

Otros tratamientos

Inmunoterapia. Puedes "entrenar" al sistema inmunitario para que no sea sensible a un alérgeno. La inmunoterapia se administra a través de una serie de vacunas contra la alergia.

Con las vacunas de 1 a 2 por semana te exponen a dosis muy pequeñas del alérgeno, en este caso, de la proteína animal que provoca una reacción alérgica. La dosis se aumenta progresivamente, por lo general, durante un período de 4 a 6 meses.

Las vacunas de mantenimiento son necesarias cada cuatro semanas durante 3 a 5 años. La inmunoterapia, generalmente, se utiliza cuando otros tratamientos simples no son satisfactorios.

Irrigación nasal. Puedes utilizar un rinocornio o una botella exprimible especialmente diseñada para expulsar la mucosidad espesa e irritante de los senos paranasales con un enjuague preparado con agua salada (solución salina).

Si estás preparando tú mismo la solución salina, usa agua que no tenga contaminantes (destilada, estéril, previamente hervida y fría, o filtrada mediante un filtro con un tamaño de poro absoluto de 1 micrón o más pequeño). Asegúrate de enjuagar el dispositivo de irrigación después de cada uso con agua sin contaminantes y déjalo secar al aire libre.