Las tortillas de harina sufren los estragos del ataque ruso en Ucrania; AMLO propuso optar por el autoconsumo

Rusia es el principal exportador mundial de trigo; Ucrania se encuentra en el cuarto lugar del listado. Mientras que México adquiere en gran parte de ambos países este producto, protagonista de “burritos” y sincronizadas, encarecido hasta en un 15% por el conflicto bélico

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Tortillas de harina (Archivo)
Tortillas de harina (Archivo)

Sobre todo en el norte de México, las tortillas de harina —que no son las mismas que las representativas tortillas de maíz— son un elemento casi que básico al momento de dar cualquier comida. En tacos, con las famosas sincronizadas o los legendarios “burritos”, este alimento es bastante demandado. Sin embargo, este producto, tan mexicanas como las tortillas de maíz, ha alcanzado su precio más alto en 13 años. Y por distante que parezca, el ataque de Rusia a Ucrania sería la causa de ese incremento.

Y es que las tortillas de harina, hay que repetir, sí son mexicanas. Pero, a diferencia de las de maíz, estas se hacen a partir de harina de trigo. Y resulta que uno de los principales provedores de ese ingrediente son las dos naciones europeas que se encuentran ahora mismo en medio del conflicto bélico. Poniéndolo en cifras, ambos países representan el 29% de las exportaciones mundiales de trigo, casi el 19% de las exportaciones de maíz y el 80% de las exportaciones de aceite de girasol. Pero desde que Rusia invadió su país vecino el 24 de febrero, los puertos ucranianos están bloqueados y se han destruido infraestructura civil y silos de grano.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) anunció que las tortillas de harina aumentaron su precio en un 15% durante el pasado mes de abril, comparado con el mismo periodo del 2021. Desde noviembre de 2008 no aumentaba de esa manera el costo de ese producto, periodo en el que también sufrió un alza de mismo porcentaje. El Inegi tmabién reporta que las tortillas hechas con harina de trigo llevan medio año con un aumento a tasas de doble dígito.

Este domingo, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), refirió a esta crisis repitiendo “sin maíz no hay país”, y propuso el autoconsumo como alternativa para este reto alimenticio.

Espigas de trigo al atardecer en un campo cerca del pueblo de Nedvigovka en la región de Rostov, Rusia (REUTERS/Sergey Pivovarov)
Espigas de trigo al atardecer en un campo cerca del pueblo de Nedvigovka en la región de Rostov, Rusia (REUTERS/Sergey Pivovarov)

Juan Carlos Anaya, director de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), dijo consultado por el diario mexicano El Universal, que dicho encarecimiento está totalmente ligado al conflicto bélico en el este europeo, debido a que Ucrania es el cuarto exportador de trigo, mientras que la propia Rusia ostenta el liderato mundial. Dicho grupo reporta que, durante 2021, México compró a Rusia unas 32 mil toneladas de trigo y otras 192 mil a Ucrania.

Por hacer una idea del consumo de este alimento en territorio mexicano, proveniente del maíz y del trigo, de acuerdo con la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) cada habitante en México como unos 75 kilos de tortillas al año, entre siete y diez tortillas al día.

La crisis de los cereales se ha convertido en tema dominante durante las últimas semanas de la guerra en Ucrania. La semana pasada, el director del Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas (PMA) avisaba de que la guerra ha congelado por completo las exportaciones y ahora mismo 4,5 millones de toneladas de grano “están paralizadas en los puertos y en los barcos del país y no se pueden usar”.

Residentes locales junto a un edificio destruido durante el conflicto entre Ucrania y Rusia en la ciudad portuaria del sur de Mariúpol  (Foto: REUTERS/Alexander Ermochenko)
Residentes locales junto a un edificio destruido durante el conflicto entre Ucrania y Rusia en la ciudad portuaria del sur de Mariúpol (Foto: REUTERS/Alexander Ermochenko)

A principios de este mayo, la agencia alimentaria de la ONU repitió su advertencia al exigir la reapertura inmediata de los puertos de la zona de Odesa, en el sur de Ucrania, y así reanudar el tráfico de alimentos en un momento que 44 millones de personas en todo el mundo marchan hacia la hambruna.

Además del bloqueo de puertos persisten los ataques contra las reservas de grano del país. Sin ir más lejos, también a inicios de este mes, Ucrania denunció la destrucción, en un bombardeo ruso, de un almacén con 13 mil toneladas de semillas de girasol en un almacén de la región de Zaporiyia propiedad de la compañía Optimusagro, según informaron fuentes de seguridad el portal de noticias 1news.

Los precios mundiales del trigo aumentaron un 20 por ciento en marzo, por el impacto de la guerra, así como por la subida de los precios de la energía y los fertilizantes en todo el mundo; costos que ya estaban subiendo antes del conflicto antes de aumentar todavía más por las sanciones energéticas contra Rusia.

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