Mueren más de 25 civiles, incluidos once niños, en un bombardeo achacado al Ejército de Sudán del Sur

Residentes de Lankien huyen tras un ataque atribuido a las fuerzas militares, organizaciones civiles denuncian la falta de asistencia y reclaman explicaciones, mientras aumenta la tensión en medio del conflicto entre el gobierno y grupos rebeldes en Sudán del Sur

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Las consecuencias inmediatas del último ataque en el estado de Jonglei han generado una oleada de desplazamientos, ya que habitantes de Lankien abandonaron la localidad por temor a nuevos bombardeos y a la falta de protección. De acuerdo con información publicada por Europa Press, la Red Civil del Estado de Jonglei denunció la muerte de 26 civiles, entre ellos once menores de edad, durante un bombardeo atribuido a las Fuerzas Armadas de Sudán del Sur en esa localidad céntrica. La organización exigió explicaciones públicas a las autoridades y solicitó asistencia urgente para los supervivientes.

Europa Press detalló que la red civil hizo pública la cifra de víctimas a través de un comunicado en la red social Facebook, donde responsabilizó a las Fuerzas Armadas sursudanesas por lo ocurrido y rechazó cualquier acción militar que afecte a población civil. El mensaje instó al gobierno estatal a supervisar la situación y a brindar apoyo inmediato, incluyendo comida, medicamentos y suministros no alimentarios, para quienes se vieron forzados a abandonar sus hogares. Según la Red Civil del Estado de Jonglei, estos residentes presentan una necesidad urgente de ayuda humanitaria básica.

La misma organización de sociedad civil subrayó que este incidente se produce en medio de un renovado auge del conflicto interno entre el gobierno y el Ejército de Liberación del Pueblo de Sudán-En Oposición (SPLM-IO), que se ha extendido en varias áreas de Jonglei. El comunicado difundido por Europa Press cuestionó directamente el involucramiento de la población en estos enfrentamientos y demandó que los responsables del ataque rindan cuentas ante las autoridades correspondientes.

En su declaración, la Red Civil expuso: “Entendemos que ha un conflicto entre las Fuerzas Armadas y el Ejército de Liberación del Pueblo de Sudán-En Oposición (SPLM-IO) en varios lugares del estado de Jonglei. Pero, ¿por qué hay civiles involucrados en este conflicto que los rivales se han negado a resolver amistosamente?”. La organización también condenó enérgicamente el bombardeo y manifestó condolencias públicas a las familias de las víctimas, según relató Europa Press.

El contexto de violencia se agudizó tras una serie de acciones hostiles atribuidas a una milicia local denominada White Army (Ejército Blanco), que operó principalmente en el condado de Nasir, estado de Alto Nilo, cerca de la frontera con Etiopía. El gobierno con sede en Yuba responsabilizó a los rebeldes de colaborar con esta milicia, señala Europa Press, aunque el SPLM-IO rechazó esas acusaciones.

Las tensiones se intensificaron cuando se produjo el arresto de Riek Machar, líder del SPLM-IO y hasta entonces vicepresidente primero del país, una medida que puso en riesgo el frágil acuerdo de paz firmado en 2018. Según lo consignado por Europa Press, la detención alteró el equilibrio entre las fuerzas políticas y militares y contribuyó al aumento de episodios de enfrentamiento en los últimos años. El cumplimiento del acuerdo de paz ha mantenido un ritmo lento, lo que ha derivado en nuevas espirales de enfrentamiento con gran repercusión para la población civil.

A finales de septiembre de 2024, el presidente Salva Kiir oficializó una reforma constitucional con el fin de ampliar dos años más el periodo de transición política iniciado tras el fin formal de la guerra civil. Esta medida recibió críticas por parte de la comunidad internacional, que espera avances claros en la implementación de los compromisos del pacto de 2018, incluido el desarrollo de elecciones democráticas que no han tenido lugar hasta el momento, informó Europa Press.

En la coyuntura actual, la comunidad civil en Jonglei y organizaciones humanitarias insisten en la urgencia de responder tanto a las necesidades inmediatas de los desplazados como a la revisión de la estrategia gubernamental frente a los desencuentros armados. Europa Press destacó que la Red Civil del Estado de Jonglei reiteró la necesidad de que las autoridades establezcan mecanismos efectivos de protección y de reparación para los afectados, al mismo tiempo que reclamó justicia y explicaciones para los familiares de las víctimas.

El incremento de la violencia, la falta de avances políticos sostenidos y la precaria situación humanitaria han amparado la reactivación del conflicto en el centro y noreste del país. Los desplazamientos masivos y las cifras de víctimas civiles vuelven a situar a Sudán del Sur ante escenarios que recuerdan los momentos más críticos de su historia reciente, tal como respaldó Europa Press en su cobertura sobre los hechos en Lankien y el estado de Jonglei.