Economía lanza una consulta pública para crear una cuenta de ahorro a e inversión en España

El Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, según detalló la propia entidad, ha puesto en marcha una consulta pública dirigida a personas y organizaciones interesadas en la creación y regulación de una cuenta de ahorro e inversión en España, así como en la implementación del sello 'Finance Europe'. El objetivo de esta consulta radica en recopilar aportes que permitan diseñar un nuevo producto financiero, orientado a diversificar las fuentes de inversión de los ciudadanos, incrementar la rentabilidad de los ahorros familiares y contribuir al desarrollo del mercado de capitales de la Unión Europea.

De acuerdo con la información publicada por el Ministerio en su página web, estos productos combinarán la operatividad de las cuentas clásicas con la posibilidad de invertir en diferentes activos financieros, como acciones, bonos y fondos de inversión, siempre ofertados por intermediarios financieros con autorización. El proceso de consulta se abrirá durante un periodo que culminará el 30 de enero de 2026, período en el cual se recibirán propuestas y observaciones sobre aspectos clave para la configuración del producto.

Tal como informó el Ministerio, este tipo de cuentas ya existen en varios países de la Unión Europea, entre ellos Dinamarca, Estonia, Finlandia, Francia, Hungría, Italia, Letonia, Lituania, Polonia, Eslovaquia, Eslovenia y Suecia, donde han servido para canalizar los ahorros de los hogares hacia inversiones diversificadas y de mayor permanencia. La experiencia de esos Estados miembros sugiere que este instrumento contribuye a fortalecer tanto la seguridad financiera de las familias como la estructura de los mercados nacionales y europeos.

El texto de la consulta pública destaca que la tasa de ahorro de los hogares españoles se sitúa en torno al 13% de la renta disponible, niveles que superan los de la década anterior. Sin embargo, el Ministerio señala que, a pesar de este aumento, la mayor parte del patrimonio de las familias españolas continúa concentrándose en activos inmobiliarios, representando aproximadamente el 75% del total, mientras que solo una fracción reducida se encuentra en activos financieros con escasa diversificación. Dentro de esta última categoría, el efectivo y los depósitos constituyen un 35% del total de activos, y el 85% de esos depósitos permanece en cuentas corrientes o a la vista, caracterizadas por una rentabilidad muy baja.

Según publicó el Ministerio de Economía, esta situación evidencia un alto potencial de movilización de los ahorros hacia productos financieros capaces de incrementar la rentabilidad para los hogares y, al mismo tiempo, reforzar la profundización y continuidad del mercado de capitales europeo. Carlos Cuerpos, titular del ministerio, encabeza esta iniciativa que persigue no solo diversificar los instrumentos de ahorro disponibles para la ciudadanía, sino también orientar parte de ese capital privado hacia la financiación de la economía real de la Unión Europea.

De acuerdo con la información suministrada por el Ministerio, el proyecto cuenta con varios objetivos: incrementar la inversión de los hogares en una gama más variada de productos financieros; optimizar la rentabilidad y la diversificación del ahorro a largo plazo; y canalizar una proporción creciente de recursos privados hacia la financiación de empresas y proyectos europeos. En palabras textuales del Ministerio recogidas por el mismo portal institucional, "Un mercado de capitales europeo mejor integrado, más líquido y profundo contribuirá al doble objetivo de financiar los retos a los que se enfrenta la Unión Europea, incluyendo la transición climática, digital o los retos de seguridad y autonomía estratégica, y ofrecer mayores oportunidades de ahorro e inversión a los ciudadanos".

La consulta surge dentro del marco de acciones lanzadas tras la recomendación adoptada por la Comisión Europea en septiembre del año anterior, relativa a ampliar la disponibilidad de cuentas de ahorro e inversión, en línea con la estrategia para la Unión del Ahorro y la Inversión. En este plano, el Ministerio resalta el desarrollo de iniciativas como el Laboratorio Europeo de Competitividad, concebido como un espacio colaborativo para que varios Estados miembros adopten y pongan en marcha proyectos que favorezcan la integración de los mercados de capitales y la armonización de sus características fundamentales.

El 5 de junio, España y otros seis países de la Unión Europea (Francia, Alemania, Luxemburgo, Países Bajos, Portugal y Estonia) respaldaron la creación e implantación del sello 'Finance Europe'. Según reportó el Ministerio, esta etiqueta identificará los productos de ahorro e inversión a largo plazo capaces de destinar una parte significativa de sus activos a la economía europea, estableciendo criterios homogéneos para todos los países participantes.

El planteo del Ministerio busca obtener respuestas a una serie de aspectos relacionados tanto con el funcionamiento general de la cuenta como con el alcance y los efectos del sello europeo. Entre otros puntos, se solicita a las personas y entidades interesadas que aporten ideas sobre requisitos de importes mínimos y máximos, número de cuentas permitidas por individuo, modalidad de los proveedores, condiciones de acceso, costes y tarifas asociados al servicio. Además, considera relevante recabar opiniones sobre los tipos de activos que pueden incluirse como elegibles dentro de la cuenta, así como sobre las características específicas que debería tener el sello 'Finance Europe' en el mercado español.

El departamento encabezado por Carlos Cuerpos también pregunta sobre las posibilidades de promover, entre la población, el uso y los beneficios del nuevo producto financiero, y sobre la supervisión que debería ejercerse para garantizar la seguridad y transparencia del mismo. El plazo para recabar las contribuciones está fijado hasta el 30 de enero de 2026, lo que permitirá que personas físicas, asociaciones, entidades financieras y otros agentes económicos presenten sus consideraciones y sugerencias.

En conclusión, la consulta pública impulsada por el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa representa un paso hacia la modernización y diversificación de los productos financieros en España, al tiempo que alinea sus objetivos con las estrategias comunitarias orientadas al fortalecimiento del mercado de capitales europeo y a la optimización de las opciones de inversión y ahorro para los ciudadanos.