El brasileño Athletico Paranaense se estrelló este martes una y otra vez contra el portero Alain Baroja en un empate 0-0 con el venezolano Caracas FC en la apertura del Grupo B de la Copa Libertadores-2022.
Baroja hizo hasta lo imposible por mantener imbatido su arco frente a los ataques del campeón de la pasada Copa Sudamericana en el Estadio Olímpico de la UCV, en una llave que completan el paraguayo Libertad y el boliviano The Strongest.
Sigue siendo un complicado arranque de año para el 'Furacao' de Alberto Valentim, que llegó a esta Libertadores después de haber perdido contra el Palmeiras la Recopa Sudamericana y haber sido eliminado por el Coritiba en las semifinales del Campeonato Paranaense. Debutará en el Brasileirao el domingo contra el Sao Paulo.
La próxima semana, el Caracas FC visitará el miércoles a Libertad y Paranaense recibirá a The Strongest el jueves.
- Baroja, seguro de vida -
El Paranaense llevó la iniciativa en el primer tiempo, con el uruguayo David Terans dirigiendo su fútbol, Marcelo Cirino y el argentino Tomás Cuello siendo sus principales fuentes de peligro y los laterales, el colombiano Luis Manuel Orejuela y Abner, convertidos en extremos.
El Caracas, sin embargo, se defendió con orden y contó con la seguridad de Baroja, de 32 años, quien retornó al equipo esta temporada después de jugar un par de años en Ecuador con el Delfín.
Los locales buscaban a la vez hacer daño con balones largos y la sociedad africana del beninés Samson Akinyoola y el ghanés Kwaku Osei Bonsu.
Sorprendió el técnico del Caracas, Francesco Stifano, con la titularidad del mediapunta Luis Ramírez, quien reapareció en la cancha después de una larga ausencia por una ruptura del talón de Aquiles derecho. Ramírez, de 24 años, había jugado por última vez el 18 de marzo de 2021.
La primera de las intervenciones de Baroja frente al 'Furacao' se produjo en el minuto 5, cuando bloqueó un remate de Pablo en el área.
Volvería a levantar un muro en el 13 ante un disparo de Cirino y, en el rebote, Cuello tiró a gol. Salvó el zaguero Eduardo Fereira.
Sobre el cuarto de hora apareció la combinación Bonsu-Akinyoola, con una jugada finalizada por el ghanés con un tiro cruzado desviado.
Y poco después fue Akinyoola quien intentó con un latigazo controlado por Bento, a pase de Bonsu.
Más allá de esas intentonas, el Paranaense seguía siendo el equipo más puntante. Terans, en el 37, ponía a prueba nuevamente a Baroja.
La segunda mitad arrancaba con una advertencia: un cabezazo del central Ruberth Quijada en un tiro de esquina, desviado por muy poco, le dejaba claro al Paranaense que su falta de pegada podía costarle caro ante el Caracas.
El Furacao, espoleado, reaccionó y Baroja, otra vez, se creció.
Marcelo Cirino fusiló en el 50 en el área chica y el arquero de los venezolanos se estiró para hacer una milagrosa parada. Cinco minutos después, tapó un tiro libre directo cobrado por Terans.
Valentim apostó como primer cambio por Marlos, brasileño internacional con Ucrania que regresó a su país natal tras 11 temporadas con el Metalist Kharkiv y el Shakhtar Donetsk, cuando Rusia invade a su nación adoptiva.
El Paranaense fue más filoso.
Y siguieron cambiando nombres en las filas brasileñas, pero lo que no cambiaba era el temple de Baroja bajo los tres palos. Le negó el gol a Cristian en el 62 y al propio Marlos en el 78.
El Caracas estuvo a punto de ganar en el 90+4 con un violento chut de Akinyoola que hizo que Bento tuviese que imitar a Baroja.
erc/cl
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